Anhelado por muchas y temido por tantas otras, el momento de probarse bikinis y bañadores para decidir qué diseños incluiremos en nuestros esenciales de verano ha llegado. La ropa de baño es, sin lugar a dudas, una de las compras estrella de la temporada primavera/verano, y es que al final todas buscamos que las prendas que nos van a acompañar durante los próximo meses cumplan algunos requisitos que, en este caso, resultan innegociables.
Los bikinis y bañadores que elijamos para disfrutar sobre la arena, al borde del mar o en la piscina tienen que ser cómodos y permitir absoluta libertad de movimientos, además, deben que hacernos sentir bien y, por último, estar en línea con las tendencias que marcan la pauta esta temporada. Y sí, todas sabemos que, en ocasiones, se trata de una búsqueda más o menos compleja tanto si tienes 30 como 50 años.
Saber si somos más de bikini o de bañador –o de ambos–, es una de las primeras cuestiones a considerar. Y es que aunque los bikinis siguen siendo la opción más recurrente, cada vez son más las mujeres que están de acuerdo en que los trajes de baño de una sola pieza son la apuesta más segura a la hora de pisar la arena. Otro aspecto a tener en cuenta es que, aunque siempre hay momento y lugar para los diseños exagerados con grandes flores o volantes, invertir en cortes, estampados y paletas atemporales es una forma infalible de garantizar que la próxima vez que te haga falta ponerte en traje de baño –para una playa en verano o una escapada tropical en pleno invierno– tengas a mano un recurso fácil y ganador del que tirar.
La buena noticia es que el verano de 2024 viene cargado de opciones tanto en bikinis como en bañadores. En líneas generales podemos adelantar que las siluetas más osadas han llegado para quedarse, que el estampado de leopardo pisa (muy) fuerte también en materia de baño y que los metalizados y colores llamativos continúan siendo aliados infalibles para resaltar el bronceado y sumar puntos a nuestro look playero. A continuación, recopilamos las tendencias en bikinis y bañadores que no pueden faltar en tu maleta veraniega durante los próximos meses.
El bikini de triángulo
Resulta revelador que, en un mercado con infinitas posibilidades, un clásico sobreviva y además consiga postularse como uno de los imprescindibles verano tras verano. El tradicional bikini de triángulo regresa a nuestras vidas –si es que llegó a irse alguna vez– para recordarnos por qué durante décadas supuso una opción prácticamente exclusiva en el campo de la ropa de baño. Favorece el pecho, apenas deja marcas de bronceado y permite múltiples posiciones. ¿Qué más le podemos pedir?
El bikini bandeau
El siempre atractivo bikini bandeau –es decir, los que tienen silueta de banda y carecen de tiras– es un traje de baño de corte especialmente favorecedor. Realzan la clavícula y sientan fenomenal a las mujeres con pecho pequeño, pero además, este tipo de tops también son ideales para broncearse sin marcas en la zona del cuello y del escote.
El bañador de print animal
Presente en todo tipo de prendas esta temporada, el estampado de leopardo impregna también algunos de los bañadores más apetecibles del verano. Este print se ha convertido en la alternativa sexy a los estampados naïf –de los lunares a los cuadros vichy– omnipresentes en temporadas anteriores. Eso sí, si apuestas por un traje de baño de animal print mantén los accesorios simples y sutiles para no recargar el conjunto.
El traje de baño rojo
Tanto en trajes de baño de una sola pieza como de dos, el rojo emerge como una de las principales tendencias playeras del verano 2024. Este color que se popularizó en moda de baño de la mano de Pamela Anderson y su icónico bañador rojo en Los vigilantes de la playa, continúa acaparando tantas miradas como entonces. Es favorecedor, resalta el bronceado y queda bien con todos los tonos de piel.