El negocio de la verbena en Galicia: el Gran Prix del verano

En el Top 5 de los momentos felices de mi vida se encuentran, sin ninguna duda, las verbenas adolescentes en Parga (Guitiriz). 4 días de libertad en compañía de una heterogénea e inmejorable pandilla de oriundos, emigrantes de retorno vacacional y, por supuesto, la ‘mítica’ Ana. Todos juntos en el mismo espacio-tiempo con la excusa de celebrar San Roque y exprimir la juventud… Ese espacio ha sido, durante muchos años, mi punto favorito del planeta. Ese tiempo fue, para mí, el momento de las “primeras veces” y esa pandilla siempre serán las personas a las que volver cuando necesito un lugar seguro.

No puedo borrar de mi mente, el camino de ida a la fiesta (el regreso, no sé por qué razón, pero lo tengo más difuso) escuchando cada vez más próximo el ritmo de ‘la ventanita’. Es altamente probable que tú también guardes en tu cerebro algún o muchos recuerdos esenciales en los que suenan de fondo alguna orquesta… desde la sesión vermú a la última de la noche, desde el primer pasodoble a Extremoduro pasando por Paquito ‘el chocolatero’, de Shakira a David Civera… en un recorrido guiado por grandes clásicos, canciones del verano y los últimos éxitos del año en curso. Las orquestas son el hilo musical del verano en toda Galicia, pero también un negocio.

Galicia es sin duda el epicentro del negocio de las orquestas, representando el 70% del del mercado nacional. Ningún otro punto de la galaxia conocida presenta una concentración semejante ni tan asentada de agrupaciones musicales por metro cuadrado. Tampoco tan competitiva.

Actualmente existen en Galicia alrededor de 400 orquestas que generan un total de 4.000 empleos directos entre equipo artístico y técnico que ponen música a un volumen de negocio directo de más de 40 millones de Euros por temporada y cientos de millones en servicios indirectos y empresas auxiliares. Un festival musical que recorre nuestros 313 ayuntamientos con parada en las casi 2.500 fiestas patronales que convierten a Galicia en una “verbena” permanente durante los meses de Julio y Agosto, meses en los que muchas de ellas realizarán, sin descanso, un concierto diario. 

Según la web de referencia orquestasdegalicia.es, el ranking de las mejores está encabezado por ‘Paris de Noia’, ‘El Combo Dominicano’ y ‘Panorama’, que gozan desde hace años del status de ídolos de masas. Más allá de sus actuaciones en directo, todas ellas cuentan con merchandising exclusivo, miles de seguidores en sus redes sociales, clubs de fans multitudinarios y hasta aplicaciones propias con las que seguir cada una de las etapas de sus giras. 

Algunas, como la ‘Panorama’ tienen una plantilla de más de 30 personas entre equipo artístico y técnico y sus 5 tráilers recorrerán miles de kilómetros por toda España a lo largo de las más de 200 actuaciones confirmadas este año. Para que te hagas una idea del volumen de bolos, son el triple de las que tendrá Dua Lipa en su gira por todo el mundo. 

Algunas, como el ‘Combo Dominicano’, además de versiones, tienen temas de producción propia como ‘Ron para todo el mundo’, ‘El tatoo’ o ‘El Prostituto’ que, además de ser coreadas por miles de personas en sus conciertos, llegan a vender casi 10.000 copias en el limitado mercado discográfico actual.  

Algunas, como la ‘Paris de Noia’ cumplen 65 años de historia ininterrumpida sobre los escenarios. Como en todas las empresas, la capacidad de adaptación ha sido crítica para su supervivencia y, en los últimos años, la clave fundamental ha sido saber agregar al show musical un completo espectáculo de luces, pirotecnia e incluso números circenses que, como decían en la sintonía del Gran Prix del verano, ‘gusta al abuelo y al niño’. 

‘Olympus’, ‘Los Players’, ‘New York’, ‘Los Satélites’… la renta per capita de los municipios gallegos se mide históricamente por la categoría de las orquestas de su palco y pueblos y aldeas compiten por asegurarse alguno de estos grandes nombres en sus fiestas patronales, a sabiendas de su efector tractor, llegando a alcanzar un caché de entre 18.000 y 30.000 € en las fechas más señaladas de la temporada alta.

Las orquestas son así, un sector repleto de luces pero también con sombras como la detención y condena por fraude fiscal de Ángel María Pérez ‘Lito’ (conocido como el ‘rey de las verbenas’) y su socio Miguel Ángel García Souto, propietarios de un conglomerado de orquestas que monopolizaba el sector y puso en el ojo del huracán un negocio que permanecía en la absoluta opacidad y en el que, hace tan sólo 5 años, se facturaba sólo el 8% de las actuaciones, ocultando a ojos de hacienda la tajada impositiva de beneficios millonarios.

Superada esta etapa crítica, marcada por la modernización y la legalización financiera, el sector parecía retomar su desarrollo hasta que llegó la balada triste del COVID y la crisis que nos obligaba a alejarnos socialmente impidiendo los eventos multitudinarios, poniendo ‘en jaque’ a todo el sector, que sólo logró resistir gracias a las ayudas del gobierno regional. 

Afortunadamente, este año y con la sed de todos por ‘recuperar la fiesta perdida’, las lentejuelas y los outfits imposibles de las orquestas vuelven a la escena para seguir poniéndole banda sonora al verano de nuestras vidas.