La multinacional japonesa Resonac, antes conocida como Showa Denko, tiene superadas algunas etapas de su fase de análisis de viabilidad técnica para construir en sus instalaciones de A Coruña una planta piloto para el uso de grafito destinado a ánodos de baterías de coches eléctricos. La previsión de la compañía es tener la fábrica operativa en el segundo semestre de 2025.
El presidente de Resonac y CEO de la unidad de grafito, César Castiñeira, señaló esta mañana en el Rectorado de la Universidade da Coruña (UDC) que "se han validado hitos a nivel técnico" del proyecto si bien quedan "otros hitos que cubrir". Añadió que las previones son "optimistas" y que se mantienen las inversiones y los plazos previstos.
Este proyecto fue avanzado hace más de dos años por Alberto Núñez Feijóo cuando era presidente de la Xunta. En presencia de su sucesor, Alfonso Rueda, la multinacional anunció a comienzos de 2024 la aprobación de una inversión de 10 millones de euros para la puesta en marcha de la planta piloto de grafito de baterías para vehículos eléctricos. Castiñeira dijo entonces que a continuación comenzaría una etapa de viabilidad económica, aunque hoy no precisó por qué fase pasa el proyecto actualmente.
Castiñeira informó de la situación del proyecto en un acto celebrado esta mañana en la UDC, donde firmó un convenio con la institución académica para la creación de la nueva cátedra UDC-Resonac Sparking Truth, con la que la Universidad y la empresa fomentan la investigación en aplicaciones relacionadas con la energía.
Hidrógeno verde
Resonac fabrica en A Coruña electrodos de grafito para hornos de arco eléctrico, que sustituyen a los antiguos altos hornos para hacer acero. Dos de sus proyectos para ampliar actividad son la planta piloto de grafito para coches eléctricos, que se ubicaría en unos 10.000 metros cuadrados en los terrenos de la antigua fábrica de Alcoa y Alu Ibérica comprados por la compañía el año pasado en el polígono de Agrela; y la construcción en el mismo ámbito, en sociedad con Ignis, de otra planta para abastecer a sus factorías de hidrógeno creado con energías renovables (hidrógeno verde).
Precisamente este proyecto en Agrela recibirá ayudas de la Xunta por medio de una línea de subvenciones a través del Instituto Enerxético de Galicia (Inega) para impulsar proyectos de gases renovables en Galicia, según informó hoy el presidente gallego, Alfonso Rueda, tras la celebración del Consello de Goberno que aprobó la iniciativa. Es un programa que movilizará 2,36 millones de euros que permitirán movilizar casi diez millones de inversión público-privada. Además del de Ignis Energy en A Coruña, otros dos planes que obtendrán fondos son los de Norvento en el polígono lucense de As Gándaras y el de producción de hidrógeno verde de Tasga en Vila de Cruces (Pontevedra).
Ignis y Resonac informaron el año pasado de que este proyecto supone una "solución integral que consolida la firme apuesta de ambas compañías por las energías renovables". La planta de hidrógeno renovable se ubicaría en 50.000 metros cuadrados en los terrenos de Agrela.
Ignis también tiene otro proyecto industrial en A Coruña para el que en abril de este año obtuvo la autorización ambiental integrada. Se trata de una planta de producción de amoníaco verde en el puerto exterior de punta Langosteira.