El comité coruñés de Alu Ibérica presenta una denuncia ante la Inspección de Trabajo

Los Comités de Empresa de Alu Ibérica de las plantas de A Coruña y Avilés presentaron una denuncia ante la Inspección de Trabajo para que investigue la situación de la compañía tras su venta. Los trabajadores se concentraron hoy delante de la planta coruñesa para realizar una asamblea pero, según informaron a través de las redes sociales, Grupo Industrial Riesgo no permitó la entrada de los empleados para participar en la reunión.

La actual propietaria de Alu Ibérica decidó llamar a la Policía al considerar ilegal esta concentración que "impide a los empleados realizar su trabajo". Grupo Riesgo indicó a través de un comunicado que el acto no había sido comunicado previamente según establece el convenio, que carece del permiso de la autoridad y que contraviene las medidas de seguridad impuestas durante el estado de alarma. "Ante semejante cúmulo de irregularidades la compañía ha tenido la obligación de llamar a la policía para restablecer la situación y para garantizar la seguridad de los trabajadores que acudían a la planta para desarrollar su trabajo", explica la compañía.

El Comité de Empresa, por su parte, informó que el que Grupo Riesgo no permitió la celebración de la asamblea. Según compartieron a través de las redes sociales, la decisión de realizar la concentración a las 13.45 horas se debe a que el convenio colectivo permite realizarlas "media hora antes y media hora después de que salgan los turnos".

Los momentos de tensión marcaron una asamblea en la que se anunció que el jueves 28 harán una caravana de protesta en el centro de A Coruña que pasará por los Cantones y frente a la Delegación del Gobierno, además de que preparan más manifestaciones. El Comité de Empresa de la planta coruñesa también prevé mantener una reunión con representantes de la Xunta de Galicia en los próximos días.

Grupo Riesgo acusa a Alcoa de la situación

El Grupo Industrial Riesgo, al comprobar lo acontecido en la planta de A Coruña, emitió un comunicado en el que atribuye las responsabilidades de la situación actual de la planta al grupo Alcoa, anterior administrador de la fábrica. La firma asegura que solicitó una auditoría independiente para analizar la gestión de los propietarios anteriores de las plantas para asegurarse que ésta se desarrolló "a buena fe y el respeto de los compromisos".

Respecto a la denuncia ante la Inspección de Trabajo, Grupo Riesgo insiste en que "en ningún momento" las nóminas de los trabajadores se han visto comprometidas y desmiente que haya un colapso productivo en la planta coruñesa.