Un Dépor convertido en piña asalta un Cuatro Caminos abarrotado para celebrar el ascenso

Si no eres de A Coruña y como muchos dirían "no trates de entenderlo". Las masas blanquiazules que se han visto en la ciudad el propio día que el Deportivo consiguió el ascenso a Segunda División hace dos semanas y este sábado, 25 de mayo, están al alcance de pocas aficiones de equipos de ciudad (obviamente salvando las distancias con grandes clubes como Real Madrid o Barcelona) y ayer los deportivistas lo volvieron a hacer.

Unas 60.000 personas abarrotaron la plaza de Cuatro Caminos para poner el broche de oro a esta temporada en la que aún tendrá que decidirse el campeón absoluto de Primera RFEF contra el Castellón. Sea cual sea el resultado, la plantilla del Deportivo y su entrenador, Imanol Idiakez, ya han ganado y se ha demostrado en el estadio de Riazor y en la calle.

Ellos no han defraudado y haciendo gala de la unión que ha caracterizado al vestuario en este curso, han aparecido en el bus descapotable que les dejó en el escenario instalado en la fuente de Cuatro Caminos vestidos de piña, el símbolo del equipo en esta temporada, para sorpresa de todos los aficionados. Todo ello tras un triunfo por 3-1 contra el Real Unión en Riazor y una gran fiesta sobre el campo que se culminó incluso con un baño de David Mella, Diego Villares y Lucas Pérez en la fuente de Cuatro Caminos.

Foto: Quincemil

Los jugadores fueron presentados uno a uno y a medida que escuchaban su nombre iban saliendo del bus, no si antes mostrar su buen humor y ganas de bromear ante los medios congregados, haciendo sonar la bocina en muchos momentos jugadores como el joven Mella aliado con, entre otros, Pablo Martínez. Una de las ausencias notables fue la de Yeremay, recientemente operado, pero a quien la afición hasta hizo presente por la fuerza con la que gritó su nombre. Alguna dificultad añadida tuvo Raúl Alcaina en esta celebración, ya que tras un golpe recibido en el encuentro de ayer caminaba con muletas.

La fiesta en Cuatro Caminos duró poco más de una hora, un tiempo en el que los jugadores, vestidos con ese atuendo tan especial e inesperado, ondearon banderas del club invitando a la gente a gritar y saltar con ellos, además de que los dj de la plaza y del autobús se encargaron de poner pegadizos temas para que la plantilla y los miles de aficionados disfrutasen al máximo.

Finalmente, el dj Kiko Rivera no cumplió su palabra y no estuvo en la fiesta deportivista en A Coruña, pero como no podía ser de otra manera sonó su tema ‘El Mambo’, que los blanquiazules reconocieron poner en el vestuario a menudo.

Tampoco faltaron clásicos como ‘Yo quiero bailar’ de Sonia y Selena y el speaker del Deportivo hizo que los aficionados coreasen, entre otras, ‘Miudiño’, diversos gritos de ‘Campeones’ y "Coruña entera se va de borrachera", además de conseguir una imagen insólita de la plaza invitando a todos los congregados allí a encender sus linternas.

La emoción era palpable en todos y cada uno de los jugadores, que lucieron un llamativo rubio platino (incluso Idiakez también modificó su estilo capilar para la ocasión) y que se marcharon de la plaza de Cuatro Caminos como llegaron, con una gran fiesta a bordo del autobús después de la remontada histórica que se marcaron esta temporada.

La noche terminó para ellos con un bengaleo en la Torre de Hércules organizado por los Riazor Blues y que ha dejado imágenes para el recuerdo.