El Dépor ha obrado el milagro. Cuatro años hubo que esperar para que los coruñeses puedan ver a su equipo jugar en el fútbol profesional. Lucas Pérez ha hecho soñar, una vez más, al deportivismo. El Niño de Monelos marcó el 1-0 a favor del deportivo en el minuto 57 de partido con un tiro magistral de falta. Tras 10 años sin celebrar un ascenso es hora de festejar.
Así lo harán los más de 40.000 coruñeses que siguieron el partido en Riazor y en su explanada, donde se prevé que la fiesta se extenderá hasta largas horas de la noche. Eso sí, para hacerlo en la fuente de Cuatro Caminos habrá que esperar al próximo 25 de mayo. Será ese día cuando los jugadores se den, de nuevo, un baño de masas. Lo harán, como es habitual, subidos al autobús del equipo y coronados como líderes del grupo.
Será tras el último partido de la temporada, contra la Real Unión, cuando el deportivismo vuelva a lanzarse a la calle para celebrar un nuevo momento para recordar en la historia del club: tras cuatro años jugando en la tercera categoría, el Deportivo vuelve al fútbol profesional.
No en vano fue la movilización de miles de deportivistas que a lo largo del día tomaron las calles de A Coruña, tiñendo la ciudad de blanquiazul gracias a banderas, camisetas, bengalas y pancartas.