Milagros Rey, la primera arquitecta de Galicia
La historia de la primera arquitecta gallega y tercera de España, con un gran legado de obras en la ciudad de A Coruña
29 octubre, 2023 09:21Tras haberse graduado en ingeniería por la Universidad de California en 1894, Julia Morgan viajó a Europa para estudiar arquitectura en la Ecole des Beaux-Arts de París. Sin embargo, allí no la querían, una regla no escrita decía que las mujeres no podían ni debían estudiar esa carrera. Pero Julia, que ya había tenido que pelear contra el machismo para poder estudiar ingeniería, otra profesión vedada para mujeres, no se rindió. Tras varios intentos de admisión, finalmente consiguió matricularse y comenzar unos estudios que terminaría en 1902. Aún tendría que esperar un par de años para pasar el examen de aptitud y obtener, en California, la licencia que le habilitaba para ejercer la arquitectura, convirtiéndose en la primera arquitecta de la historia. Y a pesar de todos los obstáculos a los que tuvo que enfrentarse durante sus más de 40 años de profesión, Julia construiría más de 700 edificios por toda el área de San Francisco, en Estados Unidos. Gracias a pioneras como ella, otras mujeres pudieron cumplir también su sueño. En 1960, otra jovencita también se licenciaba en arquitectura, estableciendo su estudio en A Coruña y convirtiéndose así en la primera arquitecta de Galicia: Milagros Rey Hombre.
María Milagros Rey Hombre nacía en Madrid en 1930, aunque su infancia transcurrió por completo en A Coruña. Era hija de una ama de casa madrileña y del excepcional arquitecto coruñés Santiago Rey Pedreira, en cuyo estudio aprendió a dibujar y donde se enamoró de lo que hacía su padre.
Porque Milagros quería ser arquitecta.
Estudió Bachillerato en A Coruña hasta que llegó la hora de decidir su futuro. Su padre no quería que Milagros estudiara arquitectura, ya que temía que su hija tuviese que vivir los peligros que su ejercicio profesional podían acarrear. Así que le hizo una propuesta, un desafío que, en su interior, realmente quería que superase: si aprobaba la reválida a la primera, le permitiría estudiar arquitectura.
Por supuesto, tras muchos sacrificios, Milagros no solo aprobó, sino que obtuvo el premio extraordinario, siendo la primera mujer en Galicia en conseguirlo, en 1947.
Su padre cumplió su promesa y Milagros se trasladó a Madrid para cursar la carrera, donde era la única mujer, algo que no fue para ella un impedimento, y participaba activamente en actividades como practicar rugby con el equipo universitario o formar parte en las protestas políticas de la época.
Un año y medio después de titularse, en 1960, regresa a Galicia, y fija su residencia en A Coruña, donde abre un estudio y compagina su actividad por libre con el desempeño de la jefatura de la Sección Técnica del ayuntamiento.
Milagros era la primera arquitecta de Galicia y la tercera de toda España.
Solía decir que los únicos problemas que tuvo al ejercer su profesión no habían sido con sus colegas ni con los trabajadores de la construcción, que se mostraban orgullosos de tener a una mujer como jefe, sino con mujeres que creían que iba contra la moral trabajar rodeada de hombres y que se escandalizaban por su actividad profesional.
Entre sus prioridades se encontraba la precaria situación de la vivienda social, lo que provocó que se involucrara en los proyectos de construcción de viviendas protegidas que promovía el ayuntamiento de A Coruña, además de gestionar el suelo para la construcción de polígonos de viviendas como el de Elviña o el legendario Barrio de las Flores y participar en el diseño de la emblemática fuente de Cuatro Caminos.
Otras de sus creaciones la Torre Dorada o Torre de los Maestros, el primer rascacielos moderno de la ciudad. Debido a su altura y al viento de la zona, tenía que ser diseñado con un hormigón más elástico y resistente, así que Milagros se hizo con un libro sobre teoría del hormigón del ruso Timoshenko, provocando que la acusaran de falta de amor a la patria por utilizar métodos soviéticos y que parte de los ingenieros que participaban en el proyecto elevaran quejas al gobierno de Franco.
Fuera del ámbito municipal, Milagros diseñó el local social del pescador en Fisterra, el hotel Santa Cristina o la reforma de la capilla del colegio Compañía de María, en 1962, siguiendo las orientaciones del Concilio Vaticano II.
Por si fuera poco, también fue nombrada jefa del Cuerpo de Bomberos, porque en la escuela de arquitectura de Madrid se daban clases de bomberos y extinción de incendios y se obtenía un título en el Parque de Bomberos número 1 de la capital con pruebas teóricas, prácticas y físicas. Milagros, al igual que el resto de sus compañeros, tenía la formación necesaria para ejercer, así que el ayuntamiento de A Coruña, decidió darle el puesto.
Como comandante del cuerpo, tuvo que participar en dos graves accidentes ocurridos en la ciudad: el hundimiento del túnel de Casablanca y el accidente aéreo de Montrove.
El primer incidente fue ocasionado por un corrimiento de tierras que aplastó al tren de Valladolid lleno de pasajeros y en el que, afortunadamente, solo hubo heridos. Durante el rescate, Milagros no dudó en ponerse un casco de bronce que tenían en el parque de bomberos de exposición, ya que, aun soltándose el pelo, los cascos normales no le cabían, y se introdujo dentro del túnel junto a sus hombres con su casco de bronce como si fuese Leónidas al frente de los 300.
También participó en las labores de rescate del accidente de avión de 1973 en Montrove. A pesar de ser la jefa del servicio de bomberos, se puso de nuevo al frente de su equipo para recoger lo poco que quedó tras este accidente, en el que fallecieron los 85 ocupantes de la aeronave. A pesar de que estaba habituada a recoger cadáveres, lo ocurrido aquel 13 de agosto de 1973 la dejó tan traumatizada que necesitó ayuda psicológica durante algún tiempo.
Milagros también ejerció la docencia en la Escuela de Arquitectura Técnica de A Coruña, donde tiempo después obtuvo el doctorado, la cátedra en Historia de la construcción y fue directora del Departamento de construcciones arquitectónicas durante.
Tras jubilarse, fue nombrada profesora emérita, además de ser galardonada por la Xunta de Galicia, en el año 2005, con la Medalla Castelao, un premio que se entrega a personas que han destacado por su contribución artística, social o literaria.
Milagros fallecía el 17 de marzo de 2014, con 83 años. Su muerte dejó un vacío difícil de ocupar, porque fue una pionera que abrió puertas a muchas otras, al igual que Julia Morgan lo había hecho antes por ella. Cuando pases por delante de la Torre de los Maestros, de la fuente de Cuatro Caminos, del Polígono de Elviña o simplemente veas alguno de sus más de 2.300 trabajos, recuérdala, porque son las personas como ella las que hacen girar el mundo.
Iván Fernández Amil. Historias de la Historia.
Referencias:
- LOPEZ GONZÁLEZ, C. Milagros Rey Hombre, 1930-2014 Memorias y proyectos de una arquitecta pionera. Editorial Club Universitario, 2023
- es.wikipedia.org
- laopinioncoruna.es
- elidealgallego.com
- elcorreogallego.es
- lavozdegalicia.es
- elpais.com
- undiaunaarquitecta2.wordpress.com
- cosinestudio.com
- heroinas.net
- arqa.com
- udc.com