La extraordinaria riqueza geológica del Xeoparque Cabo Ortegal (A Coruña), único en el mundo

El trabajo realizado durante los últimos siete años por los ayuntamientos de Cariño, Cedeira, Cerdido, Moeche, Ortigueira, San Sadurniño y Valdoviño para que el proyecto del Xeoparque do Cabo Ortegal sea reconocido como Geoparque Mundial de la Unesco está próximo a su examen final. Se trata de un reconocimiento de igual relevancia a una declaración de Patrimonio de la Humanidad de dicha organización, que se conocerá en la primavera del 2023 y que repercutirá en la conservación de los 630 kilómetros cuadrados que abarca.

Este año, el Comité español de evaluación de la Unesco sólo ha propuesto a dos candidaturas para obtener tal distinción: una es la gallega y la otra la de Costa Quebrada en Cantabria. Ambas pueden conseguirlo aunque no suele darse que dos opciones de un mismo país lo hagan en el mismo año. En total, en todo el mundo, solo hay 17 candidaturas este año.

Playa de Teixidelo (Cedeira) única en el mundo con arena negra de origen no volcánico. Imagen: Xeoparque Cabo Ortegal

¿Qué se necesita para lograrlo?

El pilar fundamental sobre el que se asienta esta denominación es que el geoparque tenga alguna característica que lo haga único en el mundo. A partir de ahí, se valora la parte geológica, que representa el 35% de la puntuación global, y la parte no geológica (que incluye aspectos como el social y cultural) que pesa el 65% restante.

Lo que hace singular al proyecto gallego es que los vecinos de la zona caminan sobre piedras que en cualquier otra parte del mundo están presentes en el manto terrestre, es decir, a unos 70 kilómetros de profundidad hacia el centro de la Tierra y "aquí está en superficie", indica el presidente del Xeoparque do Cabo Ortegal y alcalde de Cariño, José Miguel Alonso Pumar. Él mismo añade que se trata de algo "tremendamente extraordinario" y que sucedió a partir de un choque de placas mediante el que la placa que tendría que haber quedado por debajo, se mantuvo en la superficie.

Eclogitas en superficie. Imagen: Xeoparque Cabo Ortegal

Otro de los elementos diferenciadores de esta candidatura son los acantilados que van desde San Andrés de Teixido en Cedeira, hasta el Cabo Ortegal: los más altos de Europa occidental que superan los 600 metros de altura. Se trata de "uno de los puntos claves de fractura del macrocontinente Pangea", explica Alonso Pumar.

Asimismo, otro de los requisitos fundamentales solicitados por la Unesco es que cualquier territorio considerado Geoparque Mundial debe contar con, al menos, un geosite, es decir, un elemento sobresaliente a nivel universal desde el punto de vista geológico que esté catalogado como tal. El proyecto gallego no cuenta con uno. Ni con dos. Tiene seis geosites: la zona de cizalla de Carreiro, el flanco sureste de la Sierra de A Capelada, Punta Candieira, litoral de Teixidelo, Punta dos Aguillóns y Complejo ígneo de San Xiao y Masanteo-Isla de San Vicente.

Vixía de Herbeira en Cedeira, techo de la Sierra de A Capelada. Imagen: Xeoparque Cabo Ortegal

Además, la zona cuenta con rocas anfibolitas que superan los 1.150 millones de anos, "de las más antiguas del planeta", aclara Alonso Pumar. Todos estos ítems son, sin duda, aspectos diferenciadores del proyecto a nivel mundial que ahora esperan ser visitados por el comité enviado por la Unesco y que ya se encuentra en las comarcas de Ferrolterra y Ortegal.

Evaluación social

Conocidos ya los principales puntos fuertes de la candidatura geológicamente hablando, los ayuntamientos implicados también pueden sacar músculo de la parte social y patrimonial de la zona. "Tenemos ejemplos de buen hacer empresarial con productos locales, como las conservas de Cariño, los lácteos en Moeche y San Sadurniño o los productos pesqueros en Cedeira y ahora hay que demostrarlo in situ", explica el presidente del proyecto.

Sierra del Forgoselo en San Sadurniño. Imagen: Xeoparque Cabo Ortegal

El domingo, la expedición de la Unesco formada por el británico Chris Woodley- Stewart, director del Geoparque North Pennines, y el uruguayo César Goso, director científico del Geoparque Grutas del Palacio, comenzará una amplia agenda de visitas a diferentes puntos de los ayuntamientos implicados así como de reuniones con colectivos vecinales y profesionales que finalizará el miércoles 31 de agosto.

Ese mismo día, los evaluadores se reunirán con el equipo de gestión del proyecto para hacer un balance de los días pasados en el territorio, pero en ningún caso desvelarán su valoración sobre la candidatura del Xeoparque. Esta misma expedición emitirá en las próximas semanas un informe al Consejo de Geoparques Mundiales y entre los meses de noviembre y diciembre el organismo realizará las deliberaciones y votaciones oportunas para otorgar o no el distintivo internacional al Xeoparque. La decisión tomada en otoño deberá ser refrendada en una reunión del Consejo en la primavera de 2023, momento en el que se conocerá el veredicto final.

Litoral de Loiba en Ortigueira. Imagen: Xeoparque Cabo Ortegal

Cohesión entre territorios

El desarrollo de este proyecto ha generado una fructífera dinámica de colaboración entre las localidades adheridas al mismo, lo que ha desembocado en que también trabajen de forma conjunta en otros ámbitos del día a día municipal. La buena sintonía se ha visto en las decisiones que han tenido que ir tomando a lo largo de los años de desarrollo del proyecto en el que "podemos decir con orgullo que hemos sacado todas las decisiones por unanimidad, las siglas políticas no fueron importantes", explica el alcalde de Cariño.

San Andrés de Teixido (Cedeira) y sus acantilados. Imagen: Xeoparque Cabo Ortegal

El regidor califica a esta candidatura como una oportunidad para todos. "Estamos hablando de siete ayuntamientos que están perdiendo población a un ritmo alto y las fuentes habituales de ingresos como la pesca o la agricultura van menguando, por lo que hay que buscar otras oportunidades para abrir negocios y esta es una de ellas", afirma. Y es que este proyecto arrastra inversión e interés en el territorio. "La candidatura es el motor, pero lo consigamos o no, ya solo con el intento, hemos conseguido, como territorio unido, dos millones de euros en ayudas", indica, de los que 1,5 millones corresponden a fondos europeos Next Generation y el otro medio millón a la Diputación de A Coruña.

Todo esto, repercute en los vecinos y vecinas de las localidades a quienes Alonso Pumar ha querido lanzar un mensaje tranquilizador, sobre todo a aquellos más escépticos con el tipo de turismo que puede llegar a partir de ahora. "Otros geoparques mundiales destacan que sus visitantes son muy respetuosos" con el entorno, por lo que esto no debe ser algo que genere reticencia entre la sociedad, asegura.

Zona litoral entre Valdoviño y Pantín. Imagen: Xeoparque Cabo Ortegal

Los residentes en estas localidades son otra de las piezas fundamentales para que la candidatura llegue a buen puerto, por ello el proyecto gira también en torno a su integración en la misma a través de numerosas actividades como las más de 40 georutas que se están celebrando este verano y a través de una completa página web en la que, tanto locales como visitantes, encuentran información detallada del Xeoparque.

Mina Piquito en Moeche. Imagen: Xeoparque Cabo Ortegal

El presidente del Xeoparque afronta esta recta final con el optimismo de quien ha puesto todos sus esfuerzos, junto a sus homólogos municipales y a la sociedad del territorio del Cabo Ortegal, en que este se convierta en un referente divulgativo y turístico para personas procedentes de todo el mundo, sean especialistas en geología y naturaleza o, simplemente, amantes de vivir experiencias únicas como la que presenta el Xeoparque do Cabo Ortegal.