Feijóo dimite como presidente de la Xunta: "Nunca goberné para alimentar una vanidad personal"

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El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha formalizado este viernes su dimisión tras 13 años en el cargo. "Gallegos y gallegas, nunca goberné para alimentar una vanidad personal. Goberné para que cada obra, cada avance que tenía que impulsar, fuese de toda Galicia. Así rezan todas las plazas que descubrí en estos 13 años: de los gallegos de hoy para la Galicia de mañana", indicó en su despedida el líder del PP nacional.

Feijóo llegó este viernes a las 09.45 horas al Pazo do Hórreo para entregarle un escrito de renuncia al jefe del Legislativo, Miguel Santalices, y participar posteriormente en una reunión extraordinaria del Consello de la Xunta. El líder del PP nacional leyó a las 13:00 horas una declaración institucional mediante la que comunicó su dimisión a los gallegos, convirtiéndose en el primer presidente autonómico que renuncia al cargo.

El presidente de la Xunta durante 13 años compareció ante la atenta mirada de los vicepresidentes y los conselleiros tras haber informado a Santalices, al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y al Rey Felipe VI de su decisión. "Santiago y Galicia son una meta, y son también para mí también un nuevo comienzo", indicó Feijóo, que hizo referencia a sus inicios en abril de 2009 antes de indicar lo difícil que es poner punto y final a esta época de su vida.

"Con satisfacción del deber cumplido. Ser designado presidente de este pueblo secular, servir a la causa de su libertad, de su prosperidad y de su bienestar es un honor que nunca podré agradecer los suficiente a los gallegos. Ya no seré el responsable de su Gobierno, pero seguiré siendo un gallego más para siempre. Galicia fue y seguirá siendo parte fundamental de mi camino. Ser gallego es un inmenso orgullo. Fue un orgullo servir Galicia y lo seguirá siendo allá donde esté, desde cualquier responsabilidad. Y por eso, Galicia, Galicia, Galicia y por siempre Galicia. Gracias por este honor", se despidió Feijóo de los gallegos ante los aplausos de su equipo de gobierno.

Galicia apostó por la "unidad y la moderación"

"Durante todos estos años di todo lo que fui capaz. Me entregué a Galicia con la modestia de ser un gallego más, pero consciente en todo momento de la confianza, la responsabilidad y las expectativas", indicó el presidente de la Xunta. Feijóo explicó que, por encima de los errores, "por los que pido perdón indulgente a los gallegos", y de los aciertos, "que no son solo míos sino de todos", la comunidad autónoma siempre estuvo por encima: "Los intereses de esta tierra fueron para mí principio y final. Todo con los gallegos, nada sin Galicia".

Así, Feijóo indicó que sus decisiones nunca se han orientado por lo que era más fácil, sino por lo que resulta más conveniente o lo que cree mejor para los intereses de todos. Así, aseguró que la política en España es rehén de "la frivolidad, la popularización y del populismo".

Galicia, reflexionó el líder del PP nacional, apostó por la "unidad y la moderación", participando de forma activa en las realidades española y Europa "sin nutrir en su seno la semilla de la división": "Las autonomías son Estado, y Galicia así lo entendió, sin fisuras y sin complejos". Feijóo añadió a este respecto que sobre este galeguismo integrador se levanta la estabilidad que apuntala la prosperidad y el bienestar de la comunidad pese a las adversidades.

Un repaso a su trayectoria

Feijóo indicó que tomó posesión en medio de una profunda crisis financiera y termina su etapa al frente de la Xunta en medio de una crisis económica acrecentada por la guerra a las puertas de Europa y tras una pandemia. "La estabilidad hizo que el avance de Galicia no se detuviese nunca", aseguró el líder del PP nacional en su declaración institucional, que hizo referencia a la democracia representativa y al autogobierno como aspectos claves para afrontar situaciones complejas.

"No tengo duda de que el galeguismo constitucional que heredé de los presidentes Albor, Laxe, Fraga y Touriño y que yo traté de ejercer será también la guía de quien tome el relevo", indicó el líder del PP nacional.

Y así, el presidente de la Xunta durante los últimos 13 años hizo un repaso a su trayectoria y a las crisis afrontadas: el accidente de Androis, las víctimas de la Covid, los marineros fallecidos o desaparecidos, la crueldad incendiaria en los montes gallegos… "Momentos duros que llevaré siempre conmigo y en los que siempre nos sentimos reconfortados al constatar la gran humanidad del pueblo gallego", explicó Feijóo.

No fueron estos los únicos desafíos a los que hizo referencia el popular en su discurso, que definió como "virulenta" la crisis económica que lo recibió en 2009. Esta situación "puso a prueba la madurez del Gobierno gallego", pero la comunidad tiene ahora menos desempleo, uno de los menores endeudamientos per cápita de España y ha batido cinco récords consecutivos de exportación. La pandemia, indicó el líder del PP nacional, supuso otro desafío que "puso de relevo el altísimo nivel del sistema sanitario y sus profesionales. Una joya en nuestro sistema de bienestar".

El de Os Peares enumeró alguno de los hitos alcanzados, como la renovación de los hospitales gallegos, la accesibilidad de las universidades, la gratuidad de las escuelas infantiles o las casas niño, al mismo tiempo que destacó la potencia pesquera o láctea de Galicia. El presidente aseguró el mismo día que presentó su dimisión que todo esto lo hizo acompañado por su equipo de gobierno.

Feijóo se emocionó cuando recordó al fallecido Valeriano Martínez, conselleiro de Facenda fallecido el pasado mes de octubre, y cuando agradeció el trabajo de su equipo a lo largo de estos años. Las palabras de agradecimiento se extendieron a los trabajadores del servicio público, a la oposición, a los sindicatos, a los medios de comunicación, a su familia y seres queridos y a todas aquellas personas con las que a lo largo de los últimos años ha trabajado.

"Galicia fue mi maestra"

"Galicia fue mi maestra de niño. Galicia me enseñó a admirar a una gente educada por la historia en la tolerancia y el diálogo y de Galicia aprendí que gobernar consiste en dialogar", indicó un emocionado Feijóo en el Pazo de Raxoi. El presidente de la Xunta desde 2009 aseguró sentirse con una mezcla de tristeza y satisfacción al echar la vista atrás, hacia tantas experiencias inolvidables "que están más vivas que nunca".

Así, Feijóo aseguró haber sentido siempre el cariño de los gallegos y confesó que no le resulta fácil poner distancia física de por medio, aunque no anímica. "El protagonista de esta peregrinación que se inició en 2009 fue el pueblo gallego. Yo solo fui un intérprete de una partitura escrita por los gallegos y por los gallegos: la Constitución Española. El Estatuto de Autonomía nos proporcionó una herramienta que utilizamos para entendernos, para ser libres y para crecer juntos. Ese es el pueblo que goberné, del que me siento orgulloso", aseguró el de Os Peares.

"Los liderazgos no miden su valor por el vacío que dejan, sino por la continuidad y la unidad que garantizan", indicó Feijóo, que hizo referencia, ya en castellano, a la unidad y a las mayorías alcanzadas al frente del PP de Galicia: "Es el galleguismo entendido como cas común de todos los gallegos, alejado de nacionalismos intransigentes, de centralismos de otros tiempos, sobre los que se levanta una cohesión social clave para entender el tiempo que vive España".

Así, el ourensano aseguró que "ser distintos no implica ser hostiles" ni rechazar cambios, establecer fronteras o levantar trincheras. "Si los gallegos lo hemos entendido así, tengo fe en que el conjunto de España también vuelva a hacerlo finalmente", indicó en castellano Feijóo, antes de pasar al gallego para decir que "se puede y se debe servir España desde Galicia. Galicia es España", para pasar de nuevo al castellano: "Se puede y se debe servir Galicia desde España. Galicia es una prueba de la España de las autonomías, lejos de generar problemas, puede ayudar a resolverlos; lejos de disgregar, puede unir; y lejos de desvertebrar el estado, ayuda a coserlo y a armonizarlo".

Presidente en funciones

El máximo mandatario y sus conselleiros seguirán en el cargo en funciones hasta que la decisión sea publicada en el Diario Oficial de Galicia y el Boletín Oficial del Estado, por lo que no podrán tomar decisiones de índole económica pero sí reunirse y seguir trabajando. El el jefe del Parlamento gallego, Miguel Santalices, prevé convocar a los grupos parlamentarios el próximo lunes para proponer al nuevo presidente de la Xunta y seguir adelante con un proceso de sucesión que podría terminar en dos semanas.

Todo parece indicar que el sucesor de Feijóo al frente de la Xunta será el vicepresidente primero, Alfonso Rueda, que ayer presentó más de 7.000 avales para formalizar su candidatura a liderar el PP de Galicia. Precisamente, Rueda inicia mañana sábado en Lugo su campaña para suceder a Feijóo al frente de los populares gallegos con el objetivo de revalidar en 2024 el Gobierno de la Xunta.