Las autoescuelas de A Coruña han pisado el acelerador. En 2023 en la provincia de A Coruña la DGT expidió 10.452 permisos de conducción a nuevos conductores, una cifra que continúa la tendencia general de los últimos años. Es decir, los coruñeses no han perdido interés en obtener el permiso de conducción tipo B. Lejos de ello, las autoescuelas de la capital de provincia viven un momento de lo más dulce: tienen más alumnos matriculados, mejor distribuidos a lo largo del año y con un gasto medio superior.
A Coruña tiene una ventaja competitiva importante respecto al resto de municipios del área metropolitana: "el flujo de alumnos es constante durante todo el año". Así lo asegura Pablo Pérez, presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas de A Coruña. Esto quiere decir que no hay épocas de sequía, aunque sí hay repuntes puntuales en el número de matriculaciones. Es el caso de junio y de septiembre.
En junio, muchos coruñeses afincados en otras partes de España deciden aprovechar el periodo estival para preparar el examen de conducir. Durante tres meses su prioridad es conseguir la L de novato. Pero la época de bonanza de las autoescuelas no termina ahí: en septiembre, con la llegada del curso universitario, también hay muchos jóvenes de fuera de A Coruña que deciden sacar el carnet en la ciudad.
Pablo Pérez explica que "por lo general junio es la época alta para las autoescuelas, pero las ciudades grandes como A Coruña no ven tanta variación gracias a los universitarios". Él lo sabe bien, es gerente de la empresa ferrolana Fenesport y se pone a sí mismo de ejemplo: "En junio tenemos la subida y luego en junio tenemos un bajón importante. Y así hasta el siguiente verano".
En la Autoescuela Llano, sin embargo, el efecto es justo al revés. "Antes de la pandemia el grueso de gente venía en mayo o junio, pero ahora es menos estacional. La gente ya no se obsesiona con sacar el carnet en verano", dice su propietario, José Llano. Y es que el número de matrículas ha crecido como la espuma en cuestión de cuatro años. En 2020 tenían 120 alumnos al año y a esta altura del 2024 rondan los 500.
Lo mismo ocurre en la Autoescuela Norte, entre 2020 y 2024 han duplicado el número de matriculados. Para ellos, la clave está en los estudiantes de grado y FP. "La mayoría de nuestros clientes son universitarios", dice la administrativa del negocio, Melanie Piñón.
El perfil más habitual, jóvenes de 18 a 26 años
El perfil del cliente en las autoescuelas de A Coruña es claro: hombres y mujeres entre los 18 y los 26 años, si bien la amplia mayoría son jóvenes que acaban de estrenarse en eso de la mayoría de edad. "Hemos notado que la gente vuelve a ser más joven, hubo unos años en los que estaban más reticentes", comentan desde la Autoescuela Norte. Melanie Piñón cree que las ayudas de la Xunta para sacarse el carnet también han empujado a muchos jóvenes a probar suerte.
No obstante, el presidente de la asociación provincial tiene una percepción diferente a la de su compañera. "Ya no hay tanta prisa por hacerlo a los 18", dice. Aunque él va un aso más allá y añade un variable que, está convencido, condiciona la prisa que tienen los chavales por sacarse el carnet: el lugar de residencia. "En las ciudades grandes hay mucha facilidad de transporte público y en las pequeñas la facilidad de movimiento suele ser menor. La cosa cambia cuando ya con 24 o 25 empiezas en el mundo laboral y trabajas en un polígono", apunta Pérez.
Hay gente mayor que no encuentra trabajo y ve en el permiso de camión y autobús una oportunidad
Todo así, las autoescuelas no siempre vivieron momentos tan alegres. Durante los años posteriores a la crisis del 2007 se notó un descenso de las matriculaciones en autoescuela, dice José Llano. Ahora, por el contrario, hay gente que invierte en el carnet de conducir como una salida laboral. "Hay gente mayor que no encuentra trabajo y ve en el permiso de camión y autobús una oportunidad", explica Llano. Si bien es cierto, el tipo B sigue siendo la joya de la corona.
25 euros por clase, una subida del 60% en cuatro años
Preguntados por los precios de las prácticas en la ciudad, los dos profesores con negocio en la urbe herculina reconocen que han subido de forma exponencial en los últimos dos años. No obstante, tienen una explicación: la inflación. En la Autoescuela Norte pasaron de vender la práctica a 16 euros en 2020 a hacerlo a 26 en 2024. Es más de un 60% de subida. Explican que el encarecimiento del combustible, los gastos derivados del mantenimiento del mecánico y la necesidad de mantener los beneficios es lo que les llevó a tomar la decisión de hacer un aumento tan acusado.
Melanie Piñón, sin embargo, sostiene que los beneficios no crecieron. "La gente no gasta tanto en la prueba práctica como antes. Lo normal para aprobar es hacer 30 o 40 prácticas, pero la gente fuerza la máquina y ya van con 25, aproximadamente", indica.
Lo normal para aprobar es hacer 30 o 40 prácticas, pero la gente fuerza la máquina y ya van con 25
José Llano también subió los precios un 100% en cuestión de varios años. "En A Coruña las prácticas han llegado a ser unas de las más baratas de España, incluso han estado por 12 euros. Estábamos muy por debajo de la media europea y española. Era insostenible. Ahora empiezas a ver el beneficio a partir de los 19 euros la clase", explica. En su autoescuela la práctica se paga a 25 euros.
El presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas de A Coruña corrobora que "los precios doblan lo que había anteriormente". Recuerda que en su sector "hay mucha competencia" y que, si todos los negocios se mueven en los mismos precios, "es porque están muy ajustados".
A Coruña, Ferrol o Santiago, ¿dónde es más fácil sacarse el carnet?
Ya se ha apuntado que A Coruña es una ciudad en la que hay formación de conductores continua y que los precios se han duplicado en cuestión de cuatro años, pero: ¿Es fácil sacarse el carnet en A Coruña? Los entrevistados tienen sentimientos encontrados. Para Pérez hablamos de una ciudad "con una circulación bastante amable" en el que el único problema son las rotondas. "Hay alguna que tienes que saber de memoria para aprobar", bromea.
Por el contrario, José Llano está seguro que "el que aprueba en A Coruña sabe conducir en cualquier lado", mientras que los que lo hacen en Santiago o Ferrol pueden pasarlo peor en su primera vez circulando por una gran ciudad. "No porque no les enseñen bien los profesores, sino porque el tráfico es muy distinto", puntualiza.