El Pleno del Concello de A Coruña ha dado un paso más este jueves para recuperar la Casa Cornide para la ciudad y ha aprobado por unanimidad la revisión de oficio de las resoluciones tomadas por el Ayuntamiento en 1962, que permitieron que el inmueble acabase en manos de la familia del dictador Francisco Franco. El inmueble fue declarado el año pasado Bien de Interés Cultural (BIC), lo que obligaba a la familia a abrirlo al público, pero, pese a ello, no lo han hecho, si bien la Xunta asegura que ya ha comunicado a los Franco "que tienen que cumplir la legislación".

El consistorio inicia así oficialmente los trámites para recuperar la titularidad de la Casa Cornide e incorporarla al patrimonio público municipal. "O informe xurídico encargado polo Concello para reclamar a Casa Cornide estima que houbo, naquel entón, un incumprimento dos requisitos e leis vixentes na transacción que lle permitiu aos Franco usurpar un ben que pertence á cidadanía da Coruña", ha detallado el concejal del área de Fomento, Gonzalo Castro.

El concejal hacía referencia al informe jurídico que el Concello encargó para reclamar la devolución de la Casa Cornide al patrimonio municipal, y cuyas conclusiones mostraban que la transacción inscrita en el año 1962 no fue legal y no cumplía con los requisitos y leyes vigentes. El Gobierno municipal inició el procedimiento en base a ese informe con el fin de anular los pasos administrativos dados entonces.

El Ayuntamiento también instó al Ministerio de Educación y de Hacienda a realizar una revisión de oficio de la permuta hecha en su día, a través de la que el Gobierno de Inés Rey busca anular dos decisiones: la enajenación de la propiedad municipal aprobada el 3 de julio de 1962 y la adjudicación en subasta de la Casa Cornide aprobada el 2 de agosto de ese mismo año.

Con la decisión tomada hoy, el Gobierno municipal contará con un plazo de seis meses para resolver la revisión de oficio de las dos decisiones tomadas por el Ayuntamiento en el año 1962. Además, también se abre un plazo de 15 días para que las personas interesadas presenten los alegatos que consideren.

Valoraciones de los grupos

El portavoz del BNG, Francisco Jorquera, se ha "congratulado" por el inicio de este proceso, pero ha recordado que su grupo ya llevó este asunto a Pleno en la primera sesión del anterior mandato, y que el Gobierno municipal ya contaba con los informes necesarios para iniciar el trámite.

Al mismo tiempo, ha vuelto a reclamar a la Xunta que tome las medidas necesarias para que el inmueble se abra al público.

En ese sentido, Castro ha mostrado su confianza en que el proceso llegue a "buen puerto", y ha remarcado que "lo fundamental es que está acción tenga un resultado positivo". "Se trata de un acuerdo de especial significado simbólico en términos de restauración democrática, de justicia", ha valorado.

Además, en respuesta al nacionalista, ha recordado que se trata de "un tema que a pesar de ser claro a nivel ético, tiene un componente jurídico que no podemos eludir", lo que, a su juicio, ha hecho que el proceso de tramitación se alargue.

Por su parte, el concejal popular, Gonzalo Mora do Campo, ha trasladado que con su voto a favor "estamos ayudando al Gobierno municipal a hacer un ejercicio de memoria", y ha aprovechado para comprar la "dudosa permuta" de la Casa Cornide, con el caso del concejal Lage Tuñas.

"Si respetan las normas y los procedimientos tendrán nuestro respeto, si no mienten en este Pleno ganarán credibilidad, y si traen proyectos de interés para la ciudad podrán contar con nosotros, en cosecuencia votaremos a favor", ha añadido.

Comunicación a los Franco

Asimismo, el Concello de A Coruña también le remitió a la Xunta el pasado mes de abril una solicitud escrita para reclamarle que tome las medidas precisas para que la familia Franco abra el edificio al público, en tanto a su condición de BIC.

Preguntado a este respecto este jueves, el nuevo Conselleiro de Cultura, José López, ha asegurado que "la semana pasada se le comunicó ya a la familia Franco que tienen que cumplir la legislación y por lo tanto tiene que abrirse cuatro días al mes", si bien ha matizado que "todavía no tenemos conocimiento de que fuera recibido por la familia porque fue comunicado por correo ordinario, pero estamos convencidos que en los próximos días tendremos noticias en relación a ese tema".

Según un documento al que ha podido acceder este medio, el pasado 8 de marzo la familia Franco solicitó la exención de su obligación de permitir la visita pública alegando que el inmueble constituía "una vivienda, la cual es utilizada de manera temporal por sus distintos propietarios".

Sin embargo, la Xunta respondió que, en vista del informe emitido por los técnicos de la Dirección General de Patrimonio Cultural, "esta se encuentra prácticamente vacía de muebles por lo que no parece probable que sea domicilio particular de sus propietarios", y añadía que: "En el momento que esto varíe, es decir, pase a ser domicilio particular de alguno de sus propietarios o de algún arrendatario, podrá ser dispensado total o parcialmente de la obligación de visita pública gratuita".

Por tanto, y mientras esa situación no cambiase, la Xunta requería a la familia "para que proceda a dar cumplimiento al deber de facilitar la visita pública a la Casa Cornide en los términos ya expresados".