La Policía Nacional detiene en A Coruña a seis mujeres por robos con fuerza en casas
Las autoras de los hechos utilizaban el método del resbalón y esperaban en los descansillos de las escaleras hasta que un vecino salía de su casa y prestaban atención a si la puerta quedaba cerrada con llave o no
5 noviembre, 2020 08:50La Policía Nacional ha detenido en A Coruña a seis mujeres por robos con fuerza en viviendas que a su vez formaban tres células distintas pertenecientes a grupos itinerantes. Las detenciones se han desarrollado en los últimos cuatro meses, en tres operaciones distintas, en las que se han desarticulado cada una de esas tres células, que estaban formadas cada una de ellas por dos mujeres.
Las dos primeras detenciones se produjeron el pasado julio, momentos después de intentar cometer un robo en la zona de Adormideras por el método del resbalón. Las mujeres fueron localizadas y detenidas de forma inmediata en las proximidades del edificio Y se les considera presuntas autoras de diversos robos en viviendas en la ciudad. Otras dos fueron detenidas en septiembre y ambas eran las presuntas autoras de diversos robos. Para ello utilizaban el método del resbalón y fueron localizadas en las escaleras de un edificio de la Plaza de Pontevedra, cuando intentaban forzar la puerta de acceso a una vivienda.
Las dos últimas mujeres fueron detenidas el pasado mes de octubre, por haber cometido siete robos en domicilios en un fin de semana. Para llevarlos a cabo forzaban las puertas de acceso a las viviendas con diversas herramientas y fueron localizadas y detenidas en la zona de Los Cantones.
Modus operandi
Los métodos utilizados por las detenidas fueron el del resbalón en viviendas que no habían sido cerradas con llave y para aquellas que sí estaban cerradas utilizaban el forzamiento de cerradura y el apalancamiento de marco y puertas de acceso. El acceso a los edificios lo llevaban a cabo por el propio portal de los mismos, bien cuando los vecinos salían, o en ocasiones, forzando las cerraduras de los portales.
Las autoras de este tipo de hechos, antes de actuar sobre una vivienda, suelen llamar insistentemente a los timbres, tanto a los del portal como a los de las viviendas, para comprobar que no hay nadie en el interior, según concretan los agentes. Aparte, esperan en los descansillos de las escaleras hasta que escuchan que un vecino sale de su casa y prestan atención a si la persona que sale cierra con llave o no, momento que aprovechan para acceder rápidamente al domicilio por el método que precisen.