Los extraños sonidos captados con globos en la estratosfera que desconciertan a la ciencia
Un equipo de investigadores lanzó a la estratosfera unos globos equipados con sensores de infrasonidos, y captaron audios con un origen inexplicable.
12 mayo, 2023 17:19Si bien la ciencia y la tecnología sirven para dar respuesta a muchos de los fenómenos que a los humanos nos parecen extraños, en ocasiones se encuentran con misterios que incluso pueden quedar sin explicación. Es lo que pasó con el equipo de investigadores de los Laboratorios Nacionales Sandía de Nuevo México, liderado por Daniel Bowman, que se encontró con una serie de sonidos grabados en la estratosfera que no tienen explicación.
Según recoge The Washington Post, Bowman y sus compañeros decidieron enviar una serie de globos sonda a la estratosfera. Dichos globos equiparon sensores y grabadores de infrasonidos para registrar sonidos principalmente de volcanes. Lo que no se esperaban era que dichos globos registraron sonidos "cuyo origen no está claro", tal y como explica el propio Bowman.
Estos hallazgos se han compartido en la Reunión número 184 de la Acoustical Society of America, en Chicago y aunque se pueden apreciar en dichas grabaciones sonidos característicos pertenecientes a nuestro planeta, se pueden presenciar crujidos y susurros que no tienen una explicación directa.
Globos sonda en el cielo
Este experimento arrojó resultados muy concretos, y no dejaron indiferentes a ninguno del equipo de Bowman. Durante su congreso, Bowman definió a sus globos sonda como "bolsas de plástico gigantes con un poco de polvo de carbón en el interior para oscurecerlas". Estaban fabricadas con láminas de plástico de pintor, de las que se encuentran en ferreterías.
Esto se hizo debido a que cuando el sol brilla sobre globos oscuros, el aire de su interior se calienta y flotan. Así, se consiguió llevar a los globos a alturas de más de 20.000 metros, algo impresionante teniendo en cuenta que cada uno de estos 'dispositivos' podía llegar a costar 50 dólares. El globo primero llega a la estratosfera antes de que se ponga el sol, momento en el que el globo desciende. De hecho, Bowman se interesó en un primer momento en estos globos para medir erupciones volcánicas.
Fue entonces cuando Bowman propuso colocar estos grabadores de infrasonidos. Su asesor, Jonathan Lees, profesor de ciencias terrestres, marinas y ambientales de la Universidad Chapel Hill de Carolina del Norte, aprobó dicha proposición ya que en palabras de Bowman, se habían dado cuenta de que "nadie había intentado poner micrófonos en globos estratosféricos durante medio siglo".
Los sonidos registrados incluyen "truenos, colisiones de olas oceánicas, aviones de hélice, sonidos de la ciudad, lanzamientos de cohetes suborbitales, terremotos y tal vez incluso trenes de carga y aviones a reacción". Sonidos completamente reconocibles, y que en muchos casos están perpetrados por humanos.
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El problema está en que hay otros crujidos o susurros intermitentes que no tienen sentido que estén ahí. "En la estratosfera hemos encontrado señales de infrasonidos que han sido registradas con una frecuencia de unas cuantas veces por hora en algunos vuelos, pero la fuente de estos sonidos es completamente desconocida". Ni el propio Bowman ni sus colegas han podido determinar de qué se tratan.
Pero ¿qué es un infrasonido? Estas son ondas acústicas que tienen una frecuencia inferior al espectro audible del oído humano, es decir, que están debajo de la escala de los 20 Hz. Para poder escuchar dichos infrasonidos, se hacen uso de instrumentos especializados capaces de acelerar dichas ondas muchísimas veces para que su frecuencia sea audible.
Lo cierto es que pese al misterio, Bowman y su equipo no están tan interesados en el fenómeno. De hecho, se limitan a especificar que los resultados de su experimento podrían influenciar en otras áreas, como el estudio de explosiones, "erupciones volcánicas y otros fenómenos en regiones remotas de la Tierra".
Tampoco han cerrado la puerta a que se usen otros dispositivos, como detectores sismológicos, en estos globos para detectar la sismología de Venus. Lo que buscan Bowman y el resto de sus homólogos es "descubrir cómo hacer esto en la Tierra" para luego "exportarlo a Venus".