La tecnología está cada vez más presente en los hospitales y clínicas de España. Ya hay incluso algoritmos que detectan horas antes que un médico cuándo fallecerá el paciente por infección. Aunque, sin duda, no se trata de una competición entre el ser humano y la máquina. De hecho, también existen profesionales que se aprovechan del modo macro del iPhone 13 Pro para revisar los ojos de sus pacientes. No es la única innovación tecnológica que se aplica a día de hoy a la vista.
Según la Sociedad Española de Oftalmología (SEO), una de las patologías más frecuentes es la catarata, que produce una pérdida de visión progresiva. Aunque puede afectar a edades tempranas, por lo general empieza a ser significativa a partir de los 60 años. Tratarse de cataratas sólo requiere una intervención rutinaria y rápida. No son pocos quienes deciden optar por esta vía para restaurar eficazmente su discapacidad visual: en España se realizan 350.000 intervenciones de cataratas al año, 3,6 millones en Estados Unidos y 20 millones en todo el mundo.
En función de las necesidades del paciente, para la operación se escoge un tipo de lente intraocular u otra. En el caso de la lente intraocular multifocal puede tener ciertas consecuencias tras el implante. Así, entre un 6 y un 7% de los pacientes implantados con lente intraocular multifocal presenta inadaptación, manteniendo un patrón de esfuerzo para el procesamiento de la información visual recibida que puede condicionar la actividad funcional de ciertas áreas cerebrales.
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Este tipo de molestias visuales se traducen en deslumbramiento, pérdida de capacidad de ver contrastes o percepción de halos. El implante de las lentes intraoculares multifocales también puede impedir actividades como la conducción nocturna. En la mayoría de los casos, suele desaparecen durante el período posoperatorio gracias a la neuroadaptación. Aunque hay pacientes en los que estas molestias visuales persisten y dificultan su día a día.
Por este motivo, un grupo de investigadores de universidades españolas ha desarrollado la primera tecnología para tratar la intolerancia de pacientes recién implantados con lente intraocular multifocal. Con OpticTrain se puede facilitar la rehabilitación visual a todas las distancias, evitando la intolerancia a la multifocalidad y minimizando potenciales problemas de calidad de la visión. Y es que estas complicaciones pueden llevar en los casos más severos al explante de las lentes multifocales, con los costes asociados a la intervención y el riesgo de una segunda cirugía intraocular.
Cómo funciona esta tecnología
"OPTIcTRAIN es un novedoso sistema de entrenamiento visual que combina los avances en percepción visual, psicofísica y neurología que permite acelerar y promover el proceso de neuroadaptación en pacientes operados de catarata con implante de lente intraocular multifocal". Quien habla es el doctor David Piñero, especialista en Óptica y Optometría de la Universidad de Alicante.
Piñero ha desarrollado esta tecnología pionera junto con el oftalmólogo Miguel Maldonado de la Universidad de Valladolid y la doctora Begoña Coco, especialista en rehabilitación visual de la Universidad de Valladolid.
El software de OpticTrain se basa en un sistema gamificado, por lo que resulta más entretenido para los pacientes. Una vez instalado en la tablet, la persona accede a un videojuego similar a los de conducción. "Mientras juega, le van apareciendo algunos estímulos", explica Piñero a EL ESPAÑOL - Omicrono. De esta forma se activan determinadas áreas del cerebro que generan una adecuación a la imagen en cuestión. "Se genera un patrón de no esfuerzo, que integra poco a poco en su vida cotidiana".
Esto es posible gracias al sistema de eye tracker —seguimiento de ojo— con el que cuenta. "Durante la realización del ejercicio se pueden monitorizar los movimientos oculares por si el paciente tiene algún tipo de problema". Para Piñero lo interesante del videojuego es que tiene una historia continua: "A medida que avanzas en el videojuego, aparecen una serie de minijuegos con los que activar distintos tipos de estímulos".
Por un lado, OpticTrain ofrece estímulos que impulsan la resolución espacial para que el paciente pueda ver mejor. Y por otro, hay un conjunto de estímulos que se encargan de que el cerebro aprenda a asimilar imágenes más complejas.
Validado por ensayo clínico
En la actualidad ya se utiliza con éxito en los departamentos de Oftalmología de algunas clínicas españolas, no sin antes haberlo testeado mediante un ensayo clínico. De los 60 individuos implantados con lentes multifocales trifocales que participaron, 29 utilizaron un software sin estimulación específica —a modo de placebo—, mientras que el resto de participantes sí que utilizaron la tecnología de OpticTrain.
"Los 31 pacientes que utilizaron nuestra tecnología notaron una mejoría de la sensibilidad al contraste y un cierto progreso en la agudeza visual intermedia", apunta Piñero en referencia al estudio que se ha publicado en la revista Innovations in Neurorehabilitation and Neuroplasticity.
Aunque se trate de un sistema pionero, Piñero, junto con su grupo de investigación, pretende continuar mejorando sus distintas aplicaciones: "A día de hoy, lo hemos probado con lentes intraoculares multifocales. Pero nuestra intención es optimizarlo para que funcione con otro tipo de lentes oculares, e incluso que pueda aplicarse a otras anomalías visuales". Lamenta que para ello se encuentran todavía en búsqueda de financiación.
Ante las posibles dudas, este investigador aclara que la cirugía de catarata con implante lente ocular multifocal no deja de ser segura y eficaz. "En algunas personas sí que genera ciertas molestias, ya que el cerebro no se ha adaptado de manera automática a la lente multifocal. De esta manera, el sistema de OpticTrain trata de acelerar dicho proceso de adaptación.