Artika, buque rompehielos hermano del Yakutia
Yakutia, el gigantesco rompehielos nuclear de 33.000 toneladas con el que Rusia conquista el Ártico
La embarcación acaba de ser botada y entrará en servicio en 2023 para abrir paso a las rutas marítimas congeladas en el norte de Rusia.
26 noviembre, 2022 02:10Los múltiples frentes abiertos de Rusia en su guerra contra Ucrania y la pérdida de algunas plazas importantes en las últimas semanas no están impidiendo el desarrollo de otros programas industriales de gran calado. El de la creación de una nueva flota de barcos rompehielos nucleares es uno de ellos. Un tipo de embarcación, que España no tiene, esencial para la navegación el Ártico donde las vastas superficies de hielo flotante interrumpen con frecuencia el tráfico marítimo.
El último de los barcos en ser botado ha sido el Yakutia, que pertenece a una saga de rompehielos nucleares creados bajo la denominación de Proyecto 22220 en los Astilleros Bálticos, pertenecientes a la compañía gubernamental Corporación Unida de Construcción Naval. Junto al Yakutia, en la misma ceremonia, se inició oficialmente las operaciones del Ural, un buque hermano que terminó su programa de adiestramiento y puesta en funcionamiento hace tres semanas.
"Hoy celebramos dos grandes eventos al mismo tiempo, que son importantes para la construcción naval nacional y nuestra flota de rompehielos, de hecho, [son importantes] para todo el país", declaró Vladímir Putin por videoconferencia durante la ceremonia. También destacó el potencial de la vía Ártica como ruta de transporte logístico hacia Asia.
Yakutia en el astillero
El Yakutia fue bautizado por Victoria Abramchenko, política rusa a cargo de la Vicepresidencia de Medio Ambiente, quien destacó los "altos estándares ambientales del Proyecto 22220" y recalcó que en estas altas latitudes se requiere una atención especial para la protección del medioambiente.
Gigante rompehielos
El desarrollo del Proyecto 22220 se culminó prácticamente en los años 80 ante la necesidad de la por entonces Unión Soviética de mantener abiertas y operativas las rutas marítimas del mar del Norte. Pero la gran crisis económica tras su caída desbarató todos los planes de Moscú, que tenía el objetivo puesto en los años 90 para estrenar esta nueva clase.
Rompehielos Ural, buque hermano del Yakutia
No fue hasta el 2009 cuando la Oficina Central de Diseño Iceberg finalizó todos los trabajos técnicos necesarios y, en agosto de 2012, finalmente se firmó el contrato con Astilleros Bálticos para la construcción del primer ejemplar por unos 1.000 millones de euros. Tras esta aproximación, fueron llegando más adjudicaciones hasta completar los 7 rompehielos que actualmente tienen contratados. El primero de ellos entró en activo en 2020 y se espera que el último haga lo propio en 2029.
El Yakutia, como todos los buques de su misma clase, cuenta con 173 metros de eslora por 34 de manga y 51 metros de altura. Tiene un peso de desplazamiento de 33 millones de kilogramos que pueden operar en zonas someras gracias al calado de 9 metros que le permiten navegar en zonas fluviales del Ártico.
El Takutia ya botado
Por diseño, cuenta con una capacidad para romper capas de hielo de hasta de 2,8 metros de espesor lo que le catapultan como las embarcaciones más grandes de su clase en todo el mundo. En su interior se acomodan un total de 75 tripulantes que cuentan con el apoyo de un helipuerto y un hangar para un helicóptero en la popa.
"Para el Ártico, un factor muy importante es la cantidad de emisiones a la atmósfera. En esta serie de rompehielos se reduce drásticamente", concluyó Abramchenko. Por su parte y aprovechando la ceremonia, también se anunció que antes de final de año, Rosatom —compañía estatal encargada de lo nuclear— debe concluir con Astilleros Bálticos un contrato para la construcción de 2 rompehielos más dentro del Proyecto 22220.
Dos reactores nucleares
Al igual que sus antepasados desde finales de los años 50, el Yakutia emplea un sistema de propulsión basado en un par de reactores nucleares que generan vapor de agua que hace girar unos turbogeneradores eléctricos. Esta electricidad, en última instancia, es la que mueve los motores y genera la propulsión necesaria para mover la embarcación.
Los 2 reactores que acomoda a bordo están diseñados por OKBM Afrikantov y generan una potencia térmica de 175 MWt (megavatio térmico) cada uno. Además, según indican, necesita un reabastecimiento de combustible nuclear cada 7 años de funcionamiento y tienen una vida útil planificada de 40 años.
Yakutia en la ceremonia de botadura
El sistema de propulsión de los barcos del Proyecto 22220 consta de 3 ejes de propulsión de hélices acompañados de un timón. Estas hélices de paso fijo, 60 toneladas y 4 palas tienen un radio de 6,2 metros y, cada una, está impulsada por un motor eléctrico de unos 27.000 caballos de potencia. Que da en total 75.000 caballos.
A pleno rendimiento, cuando se enfrenta a los 2,8 metros de capa de hielo, puede mantener una velocidad continua de entre 2,8 a 3,7 kilómetros por hora a máxima potencia. En aguas abiertas, esta clase de rompehielos puede alcanzar los 41 kilómetros por hora.
