Parque Central de Madrid Nuevo Norte con el Jardín del Viento a la derecha. Omicrono
Así será el Jardín del Viento, la espiral vegetal que rebajará 4 grados la temperatura de Madrid
Con forma de espiral y cubierta de vegetación, esta estructura del Parque Central de Madrid Nuevo Norte puede producir su propio microclima.
22 julio, 2022 02:43Parte de Europa se está viendo afectada por una ola de calor que está provocando muertes, incendios y altas temperaturas, como en España, donde se han registrado cientos de fallecidos y hay zonas que superan los 40 grados. Quedarse en casa con el aire acondicionado o la piscina son las mejores opciones para refrescarse. Sin embargo, en unos años, en Madrid se podrá pasear cómodamente por el parque en días como éstos gracias al futuro 'Jardín del Viento', que rebajará la temperatura 4 grados.
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La capital española construirá el Parque Central de Madrid Nuevo Norte, que ha desarrollado el estudio de arquitectura West 8, el mismo que diseñó el proyecto de Madrid Río, y la firma Porras Guadiana, con experiencia en la renovada Plaza de España. Una zona verde que se prevé que se complete en 25 años y que tendrá como eje central al 'Jardín del Viento', que capturará la brisa y la dispersará por todo el recinto, bajando así las temperaturas de manera significativa.
Esta estructura con forma de espiral será el elemento emblemático del Parque Central de Madrid Nuevo Norte, un espacio que contará con una superficie de 14,5 hectáreas y se ha diseñado para transformarse en un nuevo icono de la ciudad. La zona albergará un gran bosque urbano que tendrá actividad tanto de día como de noche y que se levantará sobre las vías del tren que durante décadas han ocupado un terreno del barrio de Chamartín.
Su propio microclima
El Parque Central de Madrid Nuevo Norte, que conectará con el monte de El Pardo y con el Bosque Metropolitano, será un espacio predominantemente verde y estará construido sobre losas encima de vías ferroviarias. Un recinto que pretende ser activo durante las 24 horas del día, abierto y flexible que albergará diferentes usos e incluirá una gran variedad de ambientes.
"Estará dominado por un gran bosque urbano multiespecie que creará unas condiciones de confort térmico adecuadas y de sombra para poder usarse todo el año. Combinando las sombras de los árboles con todo el sistema de riego, la humedad y las brisas, construirá en su interior un microclima fresco durante el verano", explica Juan Tur, responsable de proyectos de West 8, a EL ESPAÑOL - Omicrono.
Un boceto de cómo será el Parque Central de Madrid Nuevo Norte. Omicrono
La pieza central del nuevo parque es el Jardín del Viento. Una estructura con forma de espiral y cubierta de vegetación que produce su propio microclima y que tiene la capacidad de bajar la temperatura entre 3 y 4 grados. "Estará levantada en el punto donde hemos detectado que se da la principal confluencia de mayor intensidad de los vientos. Es realmente un artefacto o una pieza climática que lo que genera en su interior son unas condiciones de mayor frescor", señala Juan Tur.
El Jardín del Viento se elevará sobre la altura de las copas de los árboles para capturar las altas brisas y direccionarlas a través de su estructura envolvente, reduciendo la temperatura del ambiente y creando un espacio interior fresco que se ha ideado con el objetivo de que se transforme en el principal punto de encuentro del parque.
Boceto del interior del Jardín del Viento. Omicrono
"Al levantar esta espiral húmeda, vegetal y que incorpora sombra, junto con el análisis previo para determinar el punto de construcción; se consigue que el viento sea más frío y baje, logrando generar unas brisas un poco más acentuadas de lo que por naturaleza haría ese lugar", indica Fernando Porras-Isla, director de Porras Guadiana Arquitectos, a EL ESPAÑOL-Omicrono.
De alguna manera, el Jardín del Viento replica un poco los efectos del resto de parque, pero concentrados en un punto y de una forma más tecnológica. "Está pensado como una especie de envolvente vegetal en su interior permeable. Y lo que hace es que las brisas de aire atraviesan por su envolvente, que va a estar con riego y nebulizadores para la vegetación que, al mismo tiempo de regarla, hacen que las brisas cuando atraviesan el aire, que es seco, se queden ahí y descienden hacia la parte donde estarían los peatones. Un aire fresco que se difunde a todo su alrededor", detalla Juan Tur.
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La idea es que el frescor del Jardín del Viento irradie a todo el parque. "No es una estructura dentro del parque, sino que el Jardín del Viento es como una confluencia de líneas de viento que se esparcen por todo el recinto. Todos los cambios del parque se expanden desde el jardín, por lo que es la pieza icónica del mismo", apunta Tur.
Eventos y proyecciones
Además de proporcionar aire fresco a todo el parque, el Jardín del Viento cuenta con otras funciones. Una es su uso como espacio público, es decir, "esto no es simplemente una especie de gran ventilador, sino que también es una plaza cubierta tremendamente confortable y fresca que se convertirá en el punto más de destino del parque", explica el responsable de proyectos de West 8.
Un espacio en el que, en su interior, se pueden dar muchos eventos durante el año, pero que de noche se convierte en algo totalmente diferente. "Mientras el interior es verde gracias a la vegetación, el exterior de noche se transforma en un soporte para la aplicación de una iluminación especial donde se aplicará tecnología digital a través de proyecciones. Además, el sistema de iluminación del parque irradiará también de este Jardín del Viento", indica Tur.
Así lucirá el Parque Central de Madrid Nuevo Norte de noche. Omicrono
El Jardín del Viento se convertirá por la noche en una "especie de objeto animado a través de la luz. Se proyectarán cosas sobre su superficie y de alguna manera los usuarios podrán interactuar con ellas. Todos los días la iluminación cambiará y se ofrecerán propuestas digitales innovadoras e interactivas, como experiencias sensoriales con luz y sonido que se expandirán por los caminos del parque. Algo parecido al Festival de Luz que se celebra en Madrid", apunta Fernando Porras-Isla.
Además, "el parque está programado al completo, no sólo el Jardín del Viento. La idea es que la gente pueda informarse sobre lo que está ocurriendo en diferentes puntos del parque a través del móvil. También podrán usar el smartphone para ver si los árboles están produciendo tanta fijación de CO2 o interactuar con las experiencias de luz y sonido", apunta Mariola Merino, directora de diseño, innovación y sostenibilidad en Crea Madrid Nuevo Norte, a EL ESPAÑOL-Omicrono.
El proyecto, cuya construcción "parece una cosa milagrosa al tener debajo del bosque unos trenes", contará con sensores que irán monitorizando todo y es amigable con el medioambiente. También incorpora desde jardines con lluvias hasta prados, restaurantes, terrazas, pabellones y áreas deportivas, entre muchos otros elementos.
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