El avance de la tecnología ha sido fundamental en la creación de nuevos materiales dentro de la industria textil, dejando proyectos como vaqueros que se imprimen y no contaminan, una tela que escucha al corazón y contesta llamadas o un hilo que mide la tensión y temperatura. Lo último en llegar a este sector promete combatir el calor del verano, que en España suele ser elevado: un tejido capaz de disminuir varios grados la temperatura del cuerpo.

Un grupo de investigadores chinos han creado un tejido que puede generar energía a partir del calor para cargar dispositivos electrónicos y que, además, ayuda a las personas a refrescarse en verano, cuando las temperaturas son más elevadas. Sin embargo, no es el primer proyecto de este tipo que sale a la luz, ya que hace tiempo se presentó una camiseta que refresca en verano, calienta en invierno y carga móvil.

En esta ocasión se trata de un tejido termoeléctrico que tiene forma de brazalete y se ajusta a la muñeca. Se puede doblar, torcer, estirar o anudar sin ningún tipo de problema para adaptarse a cualquier forma; y hasta es capaz de generar energía a partir del calor para cargar dispositivos como un podómetro o una pantalla LED. "Se siente como una pulsera normal cuando se usa y los materiales textiles pueden ser una buena base para los dispositivos portátiles", ha apuntado Zhang Kun, autor del estudio y profesor de la escuela de la Universidad de Donghua en Shanghái, a South China Morning Post.

Electricidad del calor

Este proyecto tiene de base los materiales termoeléctricos que se utilizan en una variedad de aplicaciones, como en los chips de ordenador, los detectores de infrarrojos y hasta en la industria aeroespacial. Un tejido que puede convertir cualquier calor, como el corporal, para producir un voltaje eléctrico. 

En ese sentido, los investigadores creen que se podrían utilizar cuerdas y materiales termoeléctricos para crear un generador termoeléctrico que sea confortable y que pueda generar electricidad y ajustar la temperatura del cuerpo. Por ahora se encuentran investigando cómo combinar este tejido con otras telas, ya que "debido a las diferencias de temperatura entre el cuerpo y el medioambiente, los textiles termoeléctricos, en teoría, pueden generar energía durante todo el día", ha afirmado Zhang Kun.

El tejido se puede doblar y hasta estirar. SCMP Omicrono

El estudio, que se compartió el pasado mes de marzo en la revista Energy & Environmental Science, señala que durante las pruebas realizadas el nuevo tejido ofreció unas excelentes propiedades mecánicas y termoeléctricas. De hecho, fue capaz de lograr un voltaje de salida de aproximadamente 0,18 voltios a una temperatura exterior de 8 grados centígrados. Una cantidad de energía más que suficiente para alimentar dispositivos eléctricos de tamaño pequeño.

El tejido tiene otra interesante característica, y es que los científicos han asegurado que esta tecnología se podría utilizar para disminuir varios grados la temperatura corporal, llegando a refrescar al usuario en verano. De hecho, el año pasado realizaron un experimento para ver cómo rendía esta tecnología.

Disminuir la temperatura

"Las temperaturas de verano en Shanghái pueden alcanzar los 45 grados centígrados. En nuestro experimento del verano pasado, el tejido termoeléctrico podía mantener la temperatura corporal alrededor de los 35 grados", ha informado Zhang Kun. Incluso el científico ha asegurado que su equipo está investigando un tipo de ropa flexible que actúe como una especie de aire acondicionado que podría disminuir la temperatura corporal hasta en 15 grados centígrados. 

"Cuando usamos aires acondicionados en verano, una persona consume la misma cantidad de energía que diez a la vez, y gran parte de esa energía de desperdicia. Si podemos controlar la temperatura corporal, entonces también podemos reducir en gran medida el consumo eléctrico", han concluido.

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