Las retransmisiones desde la Tierra podrían provocar una invasión alien, dicen investigadores
Investigadores de Oxford han advertido que emitir la ubicación de nuestro planeta podría exponernos a un ataque alienígena.
20 abril, 2022 10:31Noticias relacionadas
Pese a que franquicias como Marvel o DC hayan puesto en el ideario popular la existencia de los extraterrestres como algo lúdico para crear historias, lo cierto es que la ciencia lleva intentando, desde hace años, contactar con vida alienígena. Ya lo hemos visto desde España y desde el resto del mundo con cosas como el mensaje de Arecibo. Ahora, un estudio de Oxford nos advierte de que este tipo de comunicaciones podrían valernos una invasión extraterrestre.
Así lo afirma Anders Sandberg, investigador del Instituto del Futuro de la Humanidad (FHI por sus siglas en inglés) de Oxford. Advierte que comunicaciones que den nuestros datos a hipotéticas civilizaciones extraterrestres podría representar un riesgo de invasión, según recoge The Telegraph.
Y es que la NASA se ha dispuesto a actualizar el mensaje de Arecibo, el mensaje de radio enviado desde el radiotelescopio de Arecibo en el año 1974 lanzado al cúmulo de estrellas M13. Lo harán con "Faro en la Galaxia" o Beacon in the Galaxy, que incluye conceptos matemáticos y físicos básicos que establezcan un medio universal de comunicación, así como información sobre la composición bioquímica de la vida en la Tierra, su posición en el Sistema Solar y demás datos.
Cuidado con los mensajes
Este mensaje concluye con imágenes digitalizadas de la forma humana, junto con una invitación para que cualquier tipo de inteligencia pueda responder. De hecho, se especifica en dicho mensaje el cálculo exacto del momento óptimo durante un año para la posible transmisión de esta comunicación. Sandberg considera que esto es peligroso.
El investigador ha explicado a The Telegraph que el hecho de que se esté compartiendo toda esta información con vida inteligente probablemente más avanzada es un riesgo "que debe ser considerado". Según Sandberg, la clave está en el impacto que tendría la llegada de este mensaje a una civilización alienígena. Un impacto "tan alto que en realidad hay que tomarlo con bastante seriedad".
Estas cuestiones no son nuevas. Toby Ord, compañero del propio Sandberg en el FHI, ya planteo esta problemática en The Precipice, un libro publicado en 2020 que precisamente ahonda en este asunto. Y es que el problema principal de este mensaje es que da información vital sobre nuestra civilización, explicando que en primer lugar podría ser "prudente" tener una "discusión pública" antes de enviar según qué mensajes a estos extraterrestres, según se recoge en el libro.
Desventaja terrícola
De hecho, incluso la posibilidad en sí misma de escuchar mensajes de otras civilizaciones tiene peligros, "ya que el mensaje podría estar diseñado para atraparnos". Detalla que estos peligros "son pequeños pero mal comprendidos" y que en lo que se refiere a proporciones de civilizaciones, el humano está en clara desventaja.
Ord explica que la "proporción de civilizaciones pacíficas frente a civilizaciones hostiles" es un tema a considerar. "Tenemos muy poca evidencia sobre si esto es alto y bajo, y no hay consenso científico". No obstante, el problema es que en caso de que una civilización tenga la tecnología suficiente como para realizar una invasión. Por lo tanto, en caso de que la desventaja sea mucho mayor que la ventaja, el contacto con estas civilizaciones no sería la mejor idea. "No me parece una buena situación para tomar medidas activas hacia el contacto", dice.
Ya Stephen Hawking, en el pasado, puso sobre la mesa este problema en un episodio de Into de Universe with Stephen Hawking en 2010. En él, explicó que el contacto entre civilizaciones muy distintas a nivel de avance tecnológico podrían ser un auténtico problema. "Solo tenemos que mirarnos a nosotros mismos para ver cómo la vida inteligente podría convertirse en algo que no nos gustaría conocer".
Sandberg, no obstante, se encarga de mirar para el otro escenario. Critica que haya un "factor de risa" en torno a la búsqueda de vida inteligente por parte de la comunidad científica y que aunque siga creyendo en el riesgo, también reconoce que este es pequeño. Y es que al ser tan difícil avanzar en el espacio, bromea explicando que un mensaje recibido por una civilización avanzada podría ser poco más que "una postal que dice: 'Ojalá estuvieras aquí'".