Incautan miles de millones en bitcoin robados: así actuaron los Bonnie y Clyde de las criptos
Los 36.000 millones de dólares incautados a esta pareja en criptomonedas es la mayor cifra obtenida por la justicia estadounidense en una investigación.
9 febrero, 2022 10:01Noticias relacionadas
El mercado de las criptomonedas, en auge en muchos países como España, se están convirtiendo en un refugio para el lavado de dinero a través de la venta de NFTs y las cifras de dinero robado son cada vez más grandes. Sin embargo, el FBI ha anunciado esta semana la detención de una pareja bautizados por la prensa como los Bonnie y Clyde de las criptomonedas por la excentricidad de su historia.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha incautado 3.600 millones de dólares en criptomonedas y ordenado la detención de Ilya Lichtenstein, de 34 años, y su esposa, Heather Morgan, de 31. Esta última es rapera con el nombre artístico de Razzlekhan y excolaboradora de Forbes.
Se trata de la incautación más financiera más grande que ha realizado esta institución estadounidense en toda su historia. La fiscalía general asegura que Morgan y Lichtenstein han tratado de lavar el dinero que hace cinco años fue robado a una web de intercambio de criptomonedas.
El cocodrilo de Wall Street
Morgan se describe a sí misma en diferentes redes sociales como "una experta en persuasión, ingeniería social y teoría de juegos" y en una de sus canciones de rap como "cocodrilo de Wall Street". Su canal en YouTube ya ha sido cerrado y su cuenta de Instagram permanece protegida, pero en Facebook y otras web se puede ver la vida de esta pareja de hackers.
Según la investigación, los 119.754 bitcoins que fueron robados al atacar Bitfinex en 2016 y provocar más de 2.000 transacciones no autorizadas en esta web de cambio virtual acabaron en manos de Morgan y Lichtenstein. Durante cinco años, los dos detenidos conspiraron para lavar esa cifra entre distintas carteras digitales, pero Daily Mail indica que la fiscalía no les ha acusado de provocar el robo.
"Cuando no está haciendo ingeniería inversa en los mercados negros para pensar en mejores formas de combatir el fraude y el ciberdelito, disfruta rapeando y diseñando ropa de calle" se puede leer en la biografía de Morgan en Forbes donde publicaba artículos dando consejos para triunfar en YouTube, por ejemplo. Ilya Lichtenstein, por su parte es ciudadano ruso y estadounidense y cofundador de una empresa de marketing online.
Las autoridades siguieron el rastro del dinero robado hasta la cartera virtual de Lichtenstein. En el momento del robo, el valor de los bitcoins robados era de 72 millones de dólares, pero ahora el cambio ha subido hasta los 5.100 millones de dólares.
A través de una serie de transacciones, la pareja trató de blanquear parte del botín con sofisticados mecanismos y acumulando la cantidad en cuentas bancarias a su nombre, mientras el resto permanecía en la cartera virtual. Los investigadores obtuvieron órdenes judiciales para analizar las cuentas online y obtener las claves privadas con las que recuperar el dinero robado, unos 94,000 bitcoins.
Condena de 25 años
Morgan y Lichtenstein están ahora bajo arresto y deben comparecer ante la corte federal de Manhattan. "Los delincuentes siempre dejan huellas, y el caso de hoy es un recordatorio de que el FBI tiene las herramientas para seguir el rastro digital, donde sea que conduzca", dijo el subdirector del FBI, Paul M. Abbate, en NBC, aunque no han querido explicar cómo han conseguido seguir el rastro del dinero robado.
El blockchain o cadena de bloques se creó de tal manera que impidiera que las transacciones pudieran modificarse sin dejar rastro. Al ser un mercado independiente de los gobiernos, muchos ciberdelincuentes lo están aprovechando para blanquear dinero y los ataques se están convirtiendo en a la orden del día, como en el resto de la red.
No obstante, esta detención demuestra que las autoridades también cuentan con herramientas para perseguir estas actividades delictivas. Así lo han manifestado desde la fiscalía, a Morgan y Lichtenstein les podrían condenar a 25 años de prisión por estos delitos.