El sector de la construcción recurre cada vez más a la impresión 3D para crear piezas únicas. Por sus beneficios, esta técnica se está usando en España para fabricar piezas claves en cirugías y a su vez, como método de construcción para puentes y edificios.
Un buen ejemplo de lo que se puede conseguir con la impresión 3D es este parque en el Centro Mundial de Exposiciones y Convenciones de Shenzhen, en el sur de China. Un área de 5.523 metros cuadrados en la que se han instalado bancos y esculturas impresas en 3D.
La compañía responsable de este proyecto es Advanced Intelligent Construction Technology (AICT), constructora también de este puente de hormigón impreso en 3D, el más grande del mundo de su tipo construido que también está en China.
Piezas de concreto
Las esculturas, bancos, parterres, hasta los muros de contención y los bordillos de este parque se han impreso en 3D con concreto como único material. Alrededor de la vegetación del parque se han colocado 2.000 piezas en un proyecto que ha requerido de dos meses y medio de trabajo.
La empresa utiliza un brazo robótico modular ligero de seis ejes que va dando forma a cada pieza según los diseños que se han creado por ordenador. El modelado previo puede calcular la cantidad exacta de material que se necesita y aplicar más en las zonas que requieran de más fuerza, como los bancos.
El hormigón impreso en 3D ofrece los beneficios propios de esta técnica, frente a la fabricación tradicional. La impresora aplica el concreto en aquellos lugares donde la estructura lo requiere, evitando el uso de madera para dar forma al concreto y se reduce el gasto de cemento pesado en carbono.
La compañía, además, ha utilizado la arena local para cubrir el 50% de los compuestos del hormigón y disminuir las emisiones contaminantes y costes excesivos provocados por el transporte de materiales.
Reducir costes
"Un gran porcentaje de los costos de construcción es el aumento de los costos laborales debido a la escasez de mano de obra calificada" explica la empresa en su comunicado. Abogan por la utilización de la impresión 3D para reducir costes en personal y materiales. Hasta un 30% aseguran que se reduce el presupuesto de proyectos como este.
Poco a poco esta técnica va adquiriendo más presencia en el sector de la construcción, tanto para la decoración de los con esculturas modernas, como en la propia estructura de los edificios. "La construcción inteligente está todavía en su infancia, pero la digitalización de la industria tiene perspectivas brillantes", afirma Zhang Yu, funcionario de la oficina de construcción del distrito de Baoan de Shenzhen.