Investigadores daneses han desarrollado un nanochip que puede alcanzar la supremacía cuántica, es decir, cuando un procesador cuántico realiza un tipo de tarea prácticamente imposible para un ordenador clásico, aunque no han realizado el experimento real definitivo, ya que necesita muchos recursos económicos.
El nanochip puede producir cientos de partículas de luz (fotones) que se usen para almacenar enormes cantidades de datos en forma de información cuántica y emplearse como hardware en los ordenadores cuánticos del mañana, según el equipo de la Universidad de Copenhague.
El trabajo ha sido publicado por Science Advances y "con apoyo financiero" podría ser ampliado y utilizado para construir el simulador cuántico del futuro", señala la universidad de un comunicado.
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Google es la primera que asegura haber logrado la supremacía cuántica. Un ordenador de este tipo completó en 200 segundos una tarea que la supercomputadora más rápida del mundo tardaría unos 10.000 años en realizar, aunque la firma IBM, su mayor competidora en este campo, puso en tela de juicio los resultados.
A diferencia de las computadoras clásicas, los ordenadores cuánticos utilizan un sistema de cúbits (bits cuánticos) que almacenan información en las dos cifras del código binario, 1 y 0, mientras que las máquinas clásicas utilizan bits y deben elegir entre almacenar datos en una de las dos cifras, el 1 o el 0.
Ahora, el equipo danés asegura que dispone de "la herramienta que hace posible construir un simulador cuántico que puede superar a un ordenador clásico", lo que es "un gran avance y el primer paso hacia un territorio inexplorado en el mundo de la física cuántica", afirma Profesor Peter Lodahl, uno de los firmantes del estudio.
Un proyecto de 10 millones
Los investigadores aún no han realizado un experimento real de ventaja cuántica, aunque el artículo prueba que el nanochip "produce un recurso de mecánica cuántica que puede ser utilizado" para alcanzarla con una tecnología ya demostrada.
Realizar un experimento real como el hecho en su día por Google "podría costarnos 10 millones de euros (12 millones de dólares). Simplemente no nos lo podemos permitir", indica en la nota el autor principal de los resultados Ravitej Uppu.
Sin embargo, lo que como investigadores sí han hecho es desarrollar una fuente de fotones y demostrar que puede ser utilizada para lograr una ventaja cuántica. "Hemos desarrollado la piedra angular fundamental", aseguró el científico.
Por el momento, el equipo usará sus fuentes de fotones para desarrollar nuevos y avanzados simuladores cuánticos destinados a resolver complejos problemas bioquímicos que podrían, por ejemplo, utilizarse para desarrollar nuevos medicamentos.