El fabricante de neumáticos Bridgestone y Microsoft han presentado un sistema común que permitirá crear neumáticos inteligentes, que sepan si han sufrido daños y sean capaces de avisar al conductor.
Nuestros coches en general ya son muy 'inteligentes', y eso sin contar con los coches autónomos. Desde cambios de marcha inteligentes, capaces de seleccionar la marcha adecuada, a controles de crucero que nos imitan, a faros que proyectan información, ya estamos llegando a un nivel impensable hace años.
Sin embargo, aún quedan partes de nuestro coche que son 'tontas', como por ejemplo, los neumáticos. Sí, probablemente tu coche es capaz de mostrarte la presión de los neumáticos, e indicarte si tienes que reinflarlos o si puedes tener un pinchazo; pero aparte de eso, no hay manera de saber si el neumático está desgastado o tiene daños, sin bajarse y mirarlo.
Llega el neumático inteligente
Ahora el sistema TDMS (Tire Damage Monitoring System) desarrollado en colaboración entre Bridgestone y Microsoft puede protegernos en esas situaciones. Está basada en la plataforma de vehículo conectado de Microsoft, para ejecutar algoritmos que analicen el comportamiento del neumático dependiendo de nuestra conducción.
El sistema es capaz de detectar eventos que pueden dañar la superficie del neumático, que normalmente pasaríamos por alto; al menos, hasta que esos daños empeorasen hasta convertirse en un pinchazo en el peor momento.
Lo interesante es que el TDMS es capaz de funcionar usando sensores ya existentes, obteniendo datos que se analizan con algoritmos ejecutándose en la nube de Microsoft. Por lo tanto, la gran ventaja es que no precisaría de hardware adicional, y los coches que ya están en producción ya podrían ser actualizados con esta funcionalidad.
Evitando accidentes
Cuenta Bridgestone que el 30% de los accidentes de tráfico en Reino Unido provocados por un fallo técnico estaban relacionados con fallos de neumáticos. Por lo tanto, el objetivo de esta tecnología es detectar este tipo de fallos antes de que se conviertan en un problema serio. Los neumáticos son de esas partes que no requieren mucha atención constante, pero que cuando fallan pueden provocar accidentes mortales.
Desde la pérdida de presión, hasta el simple desgaste de haberlos usado durante mucho tiempo, pueden provocar la pérdida de control. Otro detalle es que, si una rueda no está bien equilibrada, puede provocar un desgaste irregular en la superficie; que algunas partes se desgasten más rápido que otras.
La tecnología TDMS funciona de manera proactiva, buscando esos problemas y ayudándonos a prevenirlos. No solo eso, sino que también es capaz de registrar los eventos que provocan esos problemas; por ejemplo, si hemos pasado por un bache o hemos golpeado una roca en el aslfalto. Es