Las cámaras están en todas partes, es algo que no podemos evitar. Los teléfonos, desde el inicio de la tendencia “todo pantalla”, han estado ocupados realizando malabares para esconder, ocultar o situar su cámara para obtener los marcos más ínfimos posibles. Y aunque ya hay wearables con cámara incorporada, estos suelen ser de nicho ya que dependen de su posición para hacer fotografías (además de ser tremendamente caros).
Ahora, Apple ha registrado una patente que nos hace ver con más claridad qué será el futuro de los wearables: un Apple Watch con cámara ajustable. Sí, has leído bien: una cámara situada en la correa que podremos ajustar a placer. Y viendo esta patente, podemos hacernos una idea de qué se intentará en la próxima generación de wearables.
El Apple Watch con cámara ajustable, una premonición
Como decimos, los wearables con cámara no son en absoluto nada nuevo; ya el antiquísimo Galaxy Gear lo intentó hace años. El gran problema de estos wearables es que el meter una cámara en un espacio tan pequeño encarece el producto y encima, al ser un reloj o pulsera, te obliga a mover toda la muñeca para poder apuntar con el objetivo. No es un misterio el por qué los fabricantes no han apostado por esta idea.
Esta patente cambia el concepto a algo más… lógico. Esta cámara ajustable podría colocarse en cualquier sitio que se quisiera y un gran lugar para colocarla sería en una de las partes de la pulsera del reloj, de tal forma que pudiéramos cambiar la posición sin mover excesivamente el brazo.
La idea de un Apple Watch con cámara ajustable abre la puerta a muchas posibilidades; una cámara que funcionara a ambos lados de la pulsera o que pudiera dar imagen en 360 grados. El método de disparo también podría tener espacio para la innovación, ya que podría estar incluido en un botón de la banda o podría funcionar mediante toques en la pantalla.
Los rumores de un Apple Watch con cámara se remotan a 2015, por lo que esta patente demuestra que Apple sigue con la idea en mente, al menos de forma parcial. Hay muchas limitaciones técnicas que superar; las limitaciones del sensor, el tamaño del dispositivo, la vida útil de la batería, etcétera. No obstante, los avances tecnológicos en este apartado que estamos viendo en los teléfonos móviles se podrían trasladar a un futurible Apple Watch totalmente independiente del iPhone.
En la actualidad existe una obsesión por parte de los fabricantes de minimizar el impacto de la cámara en las pantallas de los teléfonos. Las ubicaciones extrañas de la cámara dieron lugar a los notches y de ahí se están ya dando los primeros pasos a ocultar la cámara bajo la pantalla, como contamos en El Androide Libre. Una vez resuelto este “problema” en los teléfonos, nos quedan los wearables.
Esta clase de dispositivos necesitan un empujón en ventas, y el que pudieran hacer fotos sería un reclamo de venta muy importante. Volveríamos a ver la misma senda que hemos presenciado con los teléfonos; ubicaciones extrañas, correas que las alberguen, etcétera. Y aunque la patente del Apple Watch con cámara que os traemos puede que nunca se haga realidad, sí que es un testimonio que nos habla de un futuro en el que los wearables serán los protagonistas de esta nueva tendencia.
Imagen de portada | Apple – USPTO
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