La tecnología híbrida y los motores eléctricos son cada vez más comunes en las carreteras, pero el impacto que tienen en la cantidad de emisiones contaminantes es mínimo. De hecho, incluso aunque la mayoría de los coches pasen a ser no contaminantes, la humanidad aún tendría un grave problema con las emisiones. Otros medios de transporte, como los barcos o los aviones, suponen un porcentaje importante en la cantidad de contaminantes emitidos a la atmósfera.

El problema es que “electrificar” estos vehículos es un desafío incluso mayor que con los coches. En el caso de un avión, contar con una fuente de energía fiable y segura es más importante que consumir o contaminar poco; al fin y al cabo, lo último que quieres es quedarte sin energía en mitad del vuelo. Los aviones eléctricos no han terminado de despegar (perdón por el chiste) por el peso añadido de las baterías y su baja eficiencia.

El avión híbrido que quiere ofrecer servicio en sólo unos años

Es por eso que los primeros vuelos comerciales con electricidad probablemente serán de aviones híbridos, como el BEHA_M1H presentado por el fabricante británico Faradair. Se trata de un avión híbrido eléctrico, con capacidad para 18 pasajeros que tiene previsto empezar a volar en el 2025. En efecto, en sólo seis años se espera que los primeros vuelos comerciales empiecen a estar disponibles.

El BEHA_M1H pretende ser pionero en el sector de la aviación, usando no solo combustible de aviones tradicional sino también una serie de baterías; lo interesante es que Faradair no se ha centrado en la eficiencia o en el ahorro de combustible, sino en la rapidez. La apuesta, al menos inicialmente, es vender este avión para viajes cortos y rápidos; por ejemplo, se espera que pueda realizar el trayecto entre Londres y Manchester en sólo 42 minutos a una velocidad de 370 km/h.

Eso sería un cuarto de hora más rápido que ir en tren de alta velocidad, así que la apuesta es clara: el BEHA_M1H está más pensado para gente de negocios que no puede perder ni un minuto. Es una estrategia que nos recuerda a la que Tesla usó, ofreciendo primero coches de alto rendimiento y para usuarios con expectativas “premium”, antes de llevar esa tecnología a más gente con modelos más baratos. Faradair afirma que ya está negociando con sus primeros clientes, tanto en el sector civil como en el militar.

Tres alas para la máxima eficiencia

Además de pasajeros, el BEHA_M1H será capaz de transformarse en una versión de carga en sólo 15 minutos; de esa manera sería capaz de transportar tres contenedores LD3 y una carga de cinco toneladas.

Lo interesante del BEHA_M1H no es sólo que es un avión híbrido. Sino que, para conseguir la máxima eficiencia, se ha optado por un original diseño de tres alas. Es gracias a esto que el avión genera el suficiente empuje como para poder despegar en pistas muy cortas, de apenas 300 metros. Esto será importante para operar en pequeños aeropuertos y pistas privadas, que serán las que usen sus primeros clientes. En la parte trasera, un sistema de hélices que se mueven en dirección contraria y un conducto para reducir el ruido en la cabina.

Los primeros vuelos del BEHA_M1H pueden ser históricos, aunque para ello aún tendremos que esperar unos años.