Esta piel robótica es capaz de sentir, como la de un humano
Investigadores chinos han desarrollado una piel robótica que siente, como la de un humano, pero incluso mejor.
20 septiembre, 2018 10:15Investigadores chinos han desarrollado una piel robótica capaz de sentir como la de los humanos. Se trata de una piel con sensores capaz de detectar la presión y el pulso de forma similar a la nuestra. Supone un importante paso en el mundo de las prótesis inteligentes que puedan reemplazar la capacidad de sensación de miembros naturales.
Cada vez se avanza más en el desarrollo de miembros inteligentes para personas a las que se le hayan amputado, y la sensación de tacto y pulso es muy importante. En la piel humana se percibe la presión como parte del contacto; se transforma en señales y se traslada al cerebro, creando la sensación de pulso.
Las pieles robóticas tendrán que reemplazar esto; pero es algo muy complicado. Por ahora, un grupo de científicos chinos liderados por Yuanzhao Wu, investigador de la Academia de Ciencias de Ningbo (China) ha desarrollado una piel electrónica capaz de convertir la presión al tacto en señales electrónicas.
La piel robótica capaz de replicar el tacto, como la de un humano
La piel es, en realidad, un sensor magnético y un circuito eléctrico que emite las señales convertidas en pulsos con varias frecuencias, dependiendo de la presión recibida. Esta tecnología se implantó en un dedo robótico, y fue capaz de percibir incluso el viento; también es capaz de percibir gota de agua y el movimiento de hormigas, excediendo en algunas situaciones la capacidad de sentir de la piel humana. Por lo que podríamos decir que esta piel robótica siente como un humano, pero mejor que uno.
Esta eSkin capaz de hacerlo, concretamente, porque está compuesta por un polímero (plástico) hueco con partículas magnéticas en su superficie superior. Al aplicar presión en el techo de la membrana con puntos magnéticos, esta se invierte, haciendo que las partículas magnéticas de la parte superior se desplacen hasta el sensor ubicado en el interior. Se crea una resistencia que se traduce en pulsos eléctricos.
Esta tecnología no solo ayudará en el ámbito de las prótesis inteligentes, sino también en el campo de los robots con Inteligencia Artificial. De hecho, será muy interesante para robots que realicen trabajos “manuales” donde el tacto es importante.
Imagen de portada | Darpa