El Bitcoin surgió como un método de pago, pero poco a poco se ha ido viendo por qué ha quedado relegado a no serlo. La primera razón, la más obvia: debido a la gran fluctuación (aunque el resto de criptomonedas tampoco se salvan, y gran parte la tiene el propio BTC), sus usuarios prefieren usarlo como refugio monetario.

Otras monedas, como Litecoin o Ripple, son las que podrían llegar a servir como método de pago, aunque, como decimos, también tienen una fluctuación alta debida a la gran dependencia del Bitcoin.

Pero este no es el único motivo, también hay otros, como la lentitud en las transacciones, pues, aparte de que cada bloque se mina cada 10 minutos (para que una transacción sea efectiva, tiene que incluirse en un bloque minado), hay una gran lista de espera (conocida como mempool) puesto que en un bloque no caben todas las transacciones que realizan cada 10 minutos, por lo que este tiempo asciende normalmente, tanto que incluso se multiplica por 4.

¿Cómo es el Bitcoin comparado con otros método de pago?

Las cifras del Bitcoin, comparado con otros métodos de pago, demuestran que ni es el mejor, ni la gente lo termina de aceptar como tal.

VISA, el método de pago más tradicional, que podemos encontrar en cualquier comercio, tramita unas 2400 transacciones por segundo (el resultado de dividir las 74 mil millones de transacciones que hubo en 2017 por 31 536 000 segundos que tiene un año). MasterCard, un poco menos, en torno a 1000 transacciones por segundo. PayPal, el portal de intercambio más usado de Internet, tiene en torno a las 190 transacciones por segundo.

El Bitcoin, las otras criptomonedas más importantes quedarían así (según un estudio de The Motley Fool) y estos método más tradicionales arriba mencionados quedarían tal que así:

• VISA: 2400 transacciones por segundo (aunque se estima que podría soportar hasta 55 000 TPS).
• Ripple (la criptomoneda ‘de los bancos’): 1500 transacciones por segundo.
• MasterCard: 1000 transacciones por segundo.
• PayPal: 190 transacciones por segundo.
• Bitcoin Cash (la bifurcación del Bitcoin): 60 TPS.
• Litecoin: 56 TPS.
• Dash: 48 TPS.
• Ethereum: 20 TPS (su creador cree que en unos años podría alcanzar a VISA, pero su crecimiento no es tan veloz como el de Ripple, por ejemplo).
• Bitcoin: 7 transacciones por segundo (el año pasado por estas fechas manejaba unas 3 o 4 transacciones por segundo).

Como vemos, en perspectiva, el Bitcoin es la peor de todas las criptomonedas (en términos de número de transacciones por segundo, sin entrar en temas técnicos) y, por supuesto, está también por debajo, como es obvio, de VISA, MasterCard y PayPal. Ripple, en cambio, tiene un gran futuro por delante, y es por ello que ha pasado de valer 0,006 dólares en mayo de 2015 a valer 1,96 a principios de 2018).