Hoy AMD ha presentado los nuevos drivers para tarjetas Radeon.

Si pensabas que los drivers no tienen peso a la hora de elegir tarjeta gráfica, un simple vistazo a lo que hace cada compañía es suficiente para hacerte cambiar de idea.

De nada sirve contar con la GPU más potente si no se aprovecha, o si se gestiona tan mal que acaba provocando problemas; un driver mal optimizado puede hacer que un juego se vuelva injugable, y sus funcionalidades pueden acabar desaprovechadas.

Hace un par de años, Nvidia tenía la ventaja; sus drivers se actualizaban constantemente con mejoras para los nuevos juegos lanzados, y estaban llenos de funcionalidades.

Con los drivers Crimson para gráficas Radeon lanzados en 2015, las cosas empezaron a cambiar; desde entonces, AMD se ha centrado en ampliar y mejorar sus drivers cada mes que pasa. No en vano, sólo en lo que llevamos de 2017 han salido 16 nuevas versiones de sus drivers.

La versión 17.7.2 presentada hoy es especial, por la gran cantidad de novedades que incluye; tantas, que creemos que merece la pena repasarlas.

Radeon Chill

La principal novedad es, sin duda alguna, el nuevo Radeon Chill, el software diseñado para reducir el consumo sin afectar al rendimiento; el nombre viene porque, evidentemente, si se reduce el consumo también bajarán las temperaturas de nuestra gráfica.

Aunque Radeon Chill ya estaba disponible, con la versión 17.7.2 de los drivers ahora también se añade soporte a juegos que usen DirectX12 y Vulkan; las dos APIs más recientes. Aunque hay que tener en cuenta que el juego tiene que ser soportado por esta funcionalidad.

Chill funciona estableciendo un rango de frames por segundo a los que puede ir el juego en la configuración de Radeon. De esta manera, la gráfica no trabajará más de lo necesario, sin que lo notemos.

AMD asegura que en Battlefield 1 (que usa DX 12)con una Radeon RX 580, el consumo se reduce más de un 20%; mientras que en Doom (que usa Vulkan) el consumo se reduce en un 34%.

Además, incluso si no usamos Radeon Chill gracias a una nueva opción de la Configuración de Radeon podremos imponer un límite de frames por segundo.

Enhanced Sync

Uno de los defectos más molestos al jugar es el efecto de “pantalla partida”; esto ocurre cuando la cantidad de frames que la gráfica renderiza cada segundo no concuerda con la cantidad de imágenes que el monitor muestra cada segundo. Por ejemplo, si nuestro monitor es de 60 Hz y la gráfica no envía exactamente 60 frames por segundo.

El “V-Sync” es el método más famoso para evitar esto, sincronizando la cantidad de frames por segundo con el refresco del monitor; pero también es muy ineficiente y requiere un procesamiento adicional.

Es por eso que a veces no es recomendable activar el v-sync, porque puede empeorar el rendimiento y añadir latencia. El resultado es que el juego da sensación de ir a saltos y el control empeora.

El Enhanced Sync es un nuevo tipo de sincronización de AMD que elimina estos problemas. En vez de limitar la cantidad de frames que puede renderizar la gráfica, deja que renderice todos los que pueda cada segundo.

Enhanced Sync se encarga de mostrar sólo el frame completo más reciente en cada intervalo de refresco del monitor; de esta manera, siempre veremos el último frame posible y la latencia se reducirá.

Y si el rendimiento cae, Enhanced Sync puede decidir desactivar la sincronización temporalmente; lo malo es que aparecerá la pantalla partida, pero lo bueno es que no notaremos esos saltos y el aumento de la latencia.

Radeon ReLive

ReLive es la herramienta de AMD para capturar vídeo y hacer streaming de nuestros videojuegos; con la nueva versión, no solo se ha mejorado la calidad de vídeo, sino que también se ha optimizado el uso de memoria para que no afecte tanto al rendimiento de los juegos.

Si hacemos streaming con una cámara, ahora tenemos la opción de añadir una transparencia al vídeo de la cámara; de esta manera no taparemos todo el juego. También recibiremos notificaciones mejoradas en tiempo real, como el guardado de repeticiones o el ancho de banda.

Pequeñas mejoras

Como siempre, esta actualización trae pequeñas mejoras; en 17.7.2, estas tienen que ver sobre todo con la interfaz de la Configuración de Radeon. Por ejemplo, el control de sonido se ha mejorado mucho, muy útil si usamos el sonido que sale por la gráfica hasta el monitor.

El control de color por fin se ha implementado en la propia interfaz de la Configuración de Radeon; podremos cambiar el brillo, la saturación, el contraste, y la temperatura de color.

Por último, gracias a cambios en la caché de shaders, veremos mejoras de rendimiento en nuestros juegos como una reducción en tiempos de carga.