velocidad de la luz y la gravedad

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Tecnología

La velocidad de la luz podría no haber sido siempre como la conocemos

La velocidad de la luz y la gravedad en la actualidad son iguales, pero según un estudio reciente es posible que en el universo primitivo no fuese así.

24 noviembre, 2016 11:13

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La velocidad de la luz es una de esas constantes de la física que nos hacen memorizar cuando estamos en el colegio, hasta quedarse incrustada en nuestra mente por los siglos de los siglos.

Solemos aprenderla redondeada, como 300.000 km/s y hace referencia al espacio que la luz es capaz de recorrer por unidad de tiempo, un valor altísimo que, además, coincide con la velocidad a la que viaja la gravedad.

¿Pero ha sido siempre así? Pues parece ser que no, o al menos eso es lo que cree un equipo de investigadores del Perimeter Institute de Canadá y el Imperial College de Londres, que han llegado a una curiosa conclusión que, además, podría dar respuesta definitiva a una de las cuestiones más discutidas de la física. Pero bueno, para entenderlo, empecemos por el principio de los tiempos. Literalmente.

El problema del horizonte, el origen del dilema

horizonte

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Se sabe que en la actualidad la luz y la gravedad viajan a la misma velocidad, pero este dato impide explicar lo acaecido en el Universo primitivo, después del Big Bang.

Según los datos extraídos por los investigadores sobre los inicios de este Universo en pañales, parece ser que el Universo alcanzó una temperatura uniforme mucho antes de que las partículas de luz, también conocidas como fotones, pudiesen alcanzar todos sus rincones.

Esto no tiene sentido; ya que en los rincones en los que estos fotones aún no estuviesen presentes sería imposible que la temperatura se unificara con la del resto de zonas, por lo que lleva años conociéndose como el “problema del horizonte“, dando bastantes quebraderos de cabeza a los científicos, que tratan de buscarle una explicación plausible.

Hasta ahora, la hipótesis más aceptada sostiene que en realidad el Universo estaba condensado, de modo que la luz no tenía por qué viajar muy lejos para calentarlo por igual, pero que una vez que esto ocurrió se expandió rápidamente, convirtiéndose en algo similar a lo que hoy conocemos. Es una teoría que podría tener mucho sentido, pero nadie es capaz de explicar cómo o por qué tuvo lugar esta expansión, por lo que no está de más contemplar otras teorías.

La velocidad de la luz y la gravedad, ¿siempre iguales?

velocidad-luz

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Por aportar una alternativa a la hipótesis de la expansión, un estudio reciente de arXiv, que también será publicado en Physical Letters, pone de manifiesto las teorías de un equipo de investigadores que sostienen que la respuesta puede estar en la velocidad de la luz; que podría no haber sido igual a la de la gravedad.

Y es que, si la primera fuese mucho más grande que la segunda, los fotones podrían viajar suficientemente lejos para dar lugar a una temperatura de equilibrio más rápido.

Los científicos responsables del estudio no sabrían decir si el hecho reside en que la luz viajaba más rápida que en la actualidad o si era la gravedad la que se movía más despacio; en realidad ni siquiera están seguros de que su teoría sea correcta, pero lo cierto es que podría poner fin al problema del horizonte.

Comprobar si la teoría es cierta es posible

microondas_planck

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Para estar seguros, pretenden estudiar la radiación sobrante del Big Bang, llamada radiación cósmica de fondo de microondas, un eco del origen del Universo que aún hoy puede estudiarse para ayudarnos a comprender cómo empezó todo.

Si están en lo cierto, el índice espectral de estas radiaciones tendría un valor exacto de 0.96479. Aún no han podido medirlo con exactitud, pero el último dato aportado por el satélite que se encuentra revisando las inmediaciones del fondo de microondas es de 0’968, así que no parece estar desencaminado.

Sea como sea, aún tendrán que hacer nuevas mediciones para estar totalmente seguros de una hipótesis que, de ser correcta, podría dar un interesante giro de tuerca a la física del Universo en el que vivimos. Estaremos pendientes a los resultados.