¿Las "personalidades oscuras" leen mejor las emociones de los demás?
Esta pregunta la verdad es que crea dudas, puede que digamos ¡ah claro!, por eso son tan manipuladores, pero luego pensemos, bueno en realidad los narcisistas son poco empáticos, no puede ser. Pues ahí está la duda, que hoy resolveremos. Pero primero debemos dejar claros algunos conceptos…
La teoría de la mente
La teoría de la mente es la teoría que intenta explicar la capacidad que tenemos los humanos de razonar sobre los estados mentales de otros, de atribuirles pensamientos e intenciones. Esta capacidad metacognitiva parece aparecer con los 3-4 años de edad pero requiere de una buena estimulación del entorno a pesar de tenerla programada, dado que implica la interacción con los demás. Podemos decir que cada uno podemos construir nuestra propia “teoría de la mente”, de como son y actúan los demás. Esta capacidad se ve claramente alterada en algunos casos, por ejemplo en los autistas.
Os hablamos de esta capacidad porque tradicionalmente es la que se ha asociado a la lectura de emociones y sentimientos en otras personas y a la empatía. A la predicción del estado emocional y comportamiento de otras personas.
La tríada oscura de la personalidad
- Maquiavelismo: Personas cínicas, astutas y que manipulan a los demás. Su conducta siempre está dirigida a un éxito personal, harán lo que sea para conseguirlo sin importar las normas éticas.
- Narcisismo: Son personas egoístas y egocéntricas, con una auto-imagen excesivamente positiva (con sentimientos de grandiosidad). Las normas no se aplican a ellos porque están por encima del resto. Buscan relacionarse con gente de poder y/o éxito, creen al resto indignos de su tiempo y atención. Aunque no entraremos en ello, en realidad este tipo de comportamientos parecen ser un reflejo de una baja autoestima y un sentido de amenaza del entorno hacia la misma.
- Psicopatía: Para ellos los demás son meros objetos. Engañan y desprecian a los demás y además carecen de empatía. Son impulsivos e imprudentes. Carecen totalmente de remordimientos. Se cree que su comprensión de las emociones es intelectual pero no emocional en sí. Podemos utilizar los 16 criterios de Milton Cleckley (descritos en un artículo que hice hace poco sobre el tema) para describirla, aunque él mismo (Cleckley) afirma la gran cantidad de casos subclínicos bien integrados en la sociedad.
Los rasgos comunes que comparten los tres son la baja empatía y la baja amabilidad. Recientemente se ha comprobado que la triada puede estar presente en diferente grado y que la correlación entre los factores no es tan alta como se pensaba (solo es moderada).
Lo que no cuadra
Un estudio reciente encontró que al pasarles a sujetos de la triada el “Reading the Mind in the Eyes Test” o RMET (test que evalúa la teoría de la mente) los sujetos puntuaban inusualmente alto (podéis ver y hacer un ejemplo similar en el este enlace). En un principio esto era una contradicción ya que la cabeza angular de esa teoría es la capacidad de sentir empatía por los demás y uno de los rasgos básicos de los sujetos de esa triada es la ausencia de empatía. Para esto tenemos dos tipos de respuestas que pueden explicarlo (que no debemos confundir entre ellas):
A- Existen dos tipos de empatía.
B- Existen dos tipos de procesos o componentes dentro de la empatía.
A- Dos tipos de empatía:
Para poder contestar a la pregunta que formulábamos al inicio debemos saber distinguir entre dos tipos de empatía: La empatía cognitiva y la empatía afectiva. En la cognitiva el sujeto identifica las emociones de los demás sin verse contagiado por ellas, sin sentirlas, de forma más intelectual. En la afectiva el sujeto se ve contagiado o implicado por tal emoción, la comparte, la entiende. Obviamente las conductas altruistas se ven más facilitadas por el segundo tipo de empatía. Parece ser que los autistas tienen afectada la área de empatía cognitiva, pero no la emocional, sin embargo en los sujetos con rasgos de personalidad pertenecientes a la triada oscura ocurre a la inversa, ellos tienen mejor empatía cognitiva pero muy baja o nula afectiva.
Un estudio evaluó está teoría utilizando a 139 estudiantes de universidad. Contestaron un prueba que medía la empatía y pruebas que medían la triada oscura de personalidad. La prueba que medía la empatía consistía en evaluar imágenes de expresiones faciales de personas. Debían evaluar dos cosas para cada imagen: Como se sentían hacia la persona (empatía afectiva) y que emoción representaba la imagen que sentía la persona que aparecía (empatía cognitiva).
Los resultados mostraron que todos los sujetos con los tres rasgos de la triada oscura manifestaban sentimientos positivos al observar tristeza en las imágenes. Otra cosa interesante fue que solo los narcisistas consiguieron ser exactamente precisos en identificar el enfado/ira. Parece ser que de los tres el que mejor habilidad empática cognitiva presentaba era el grupo de los narcisistas.
Otro estudio relaciona el rasgo de personalidad narcisista con el de extroversión y el deseo de contacto social, puede ser que su alta empatía cognitiva facilite las relaciones cortas y superficiales.
B- Diferentes componentes de la empatía:
- El componente social-perceptual: Averiguar el estado de los demás utilizando pistas no verbales inmediatamente disponibles, por ejemplo los ojos, la cara, los gestos… Esto se solapa con la empatía cognitiva y es lo que en realidad mide el test del que hablábamos, el RMET. Parece ser que esta capacidad aparece antes en el desarrollo y se asocia con el área orbitofrontal y temporal medial del hemisferio derecho.
- El componente social-cognitivo: Es la capacidad de razonar sobre el estado mental de los otros y hacer predicciones en base a ello. Permite inferir lo que piensan y contrastarlo con lo que nosotros pensamos. No es lo mismo que la empatía afectiva de la que hablábamos antes. Tiene un desarrollo más posterior en la vida y depende mucho de la capacidad lingüística del sujeto. Se asocia con los circuitos del hemisferio derecho, concretamente la unión temporo-parietal y las áreas frontales mediales. Ésta sí parece tener mayor relación con la teoría de la mente. Es el que se encarga de que seamos compasivos, amables, altruistas.
Una vez observados estos resultados podemos entender por qué puntuaron alto los sujetos que se englobaban en esa triada y como en realidad ello no desmiente la teoría que inicialmente se tenía sobre ellos, la de que tienen déficit de empatía, a pesar de considerarse esta prueba una medida de ello.
El secreto de las personalidades oscuras
Parece ser que el secreto de que obtengan de los demás lo que quieren está precisamente en que son capaces de utilizar la información emocional para jugar con los demás, sí tienen esa capacidad para leer las emociones en cierta manera mejor o más acentuada (que era la pregunta inicial), lo que ocurre es que está acentuada esta área porqué otra está en detrimento. No sería nada funcional este rasgo de personalidad oscuro si en realidad fueran muy malos en manipular y convencer al resto o en utilizar las emociones de los demás en su beneficio. Ese es su estilo de comportamiento y es comprensible que se vea aparejado a una excelente capacidad para reconocer los estados emocionales de los demás y jugar con ellos a su favor, a pesar de que no puedan entender como realmente se siente uno así (no pueden empatizar con el otro), lo cual les lleva a infravalorar el daño que causan a los demás.
Las personalidades “oscuras” en realidad tienen una alta capacidad de empatía social-perceptual o cognitiva pero amplios déficits en el resto de áreas de la empatía si asociadas a las emociones genuinas. Además se ha encontrado que su manejo emocional es bastante deficitario, con sus propias emociones y con las de los demás si tuvieran que vivirlas de forma empática.
Un toque final: El punto de vista evolutivo
Autores como Andrew Whiten and Richard Byrne afirman que la inteligencia de los primates evolucionó a través de esta inteligencia maquiavélica. La habilidad de engañar y manipular a los demás en un medio en el que se competía por recursos resultó adaptativa. Esta habilidad evolucionó junto a la capacidad de leer la mente.
Claro que, no todo se queda ahí, las sociedades (que son el entorno de los primates) promueven actitudes amables y prosociales. La clave es ser capaz de separar la mente propia de la del otro y tener una empatía afectiva y ello garantizará el funcionamiento harmonioso de una sociedad. Para que un primate que carece de esas habilidades pueda permanecer medianamente integrado en la sociedad y adaptado al entorno es necesario que sepa manipular a los otros para conseguir lo que quiere y fingir los estados que jueguen en su beneficio. Esto es posible gracias a que mantienen intactas las capacidades más perceptivas de la “empatía”. Ello juega en su favor, utilizar esa empatía de los demás y la falta de remordimientos en su beneficio, haciéndoles obtener lo que quieren (incluyendo una mayor tasa de reproducción, o parejas sexuales), lo cual mantiene el rasgo dentro de la sociedad.
Pero en la sociedad actual y en los humanos en realidad hay un problema, la reproducción está asociada (normalmente) a parejas de larga duración, algo difícil para estos tipos de personalidades. Es difícil pero no imposible, utilizando las mismas herramientas son capaces de explotar el entorno para encontrarse en una posición de éxito económico y laboral, con estatus y con descendencia, independientemente de que lo que haya detrás de todo ello sean mentiras y manipulaciones, son capaces de desarrollar estrategias de procreación a corto plazo parece ser. Es bien sabido que son sujetos que tienden a relaciones tóxicas y manipulativas.
Fuente: Psychology Today, Universidad de Valencia, Wikipedia.
Imagen: Devianart.