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Un paso importante para mejorar los árboles frutales

28 diciembre, 2012 20:23

 

La familia de las Rosáceas es un grupo de plantas considerada como la tercera económicamente más importante debido a su distribución cosmopolita, a su alto número de especies y a su alto valor nutritivo, ya que  la mayoría de los árboles frutales pertenecen a este grupo: manzano, peral, ciruelo, naranjo, melocotonero, albaricoque y un largo etcétera, sin olvidar la importancia ornamental que tienen las rosas en general.

Cualquier mejora que se pueda hacer en este tipo de árboles supondría una mejora directa para nosotros. Por este motivo, un equipo de investigadores chinos, liderados por la Universidad Forestal de Beijing, ha secuenciado el genoma de una especie de ciruelo, Prunus mume, de cara al estudio de sus características para poder mejorar el resto de árboles frutales y para el entendimiento de la evolución de las rosáceas en general. El trabajo se ha publicado en Nature esta semana.

El mei, un ciruelo muy especial

El ciruelo chino, Prunus mume, conocido como “mei” en su lengua natal, fue domesticado en china hace 3.000 años. Los científicos han secuenciado el genoma de esta especie que vive aislada en el Tíbet por poseer una serie de  características que lo hacen ser un ejemplar perfecto para el estudio y mejora del resto de especies afines:

  • Es uno de los primeros árboles que florece en primavera, incluso a temperaturas de 0ºC. Han hallado los genes responsables que hacen salir a los árboles de su latencia en invierno, punto importante para poder mejorar este aspecto en todos los árboles frutales en general.
  • Esta especie tiene una fragancia especial durante todo el invierno. Los científicos han encontrado los genes responsables de la síntesis compuestos volátiles responsables de ese olor tan característico. Entender el proceso relacionado con las fragancias podría ser interesante de cara a la industria de la perfumería.
  • Es un árbol resistente a enfermedades. Han encontrado genes relacionados con la respuesta del árbol a la salinidad, a la sequía y a las infecciones causadas por hongos en raíces y hojas.

Por todas estas razones, según palabras del principal autor del trabajo, Wenbin Chen:

“El  genoma de Prunus mume establece una base sólida para la identificación de rasgos económicos importantes y proporciona un valioso recurso para su cría y futuros estudios de  otras especies de rosáceas. El trabajo también aporta un nuevo enfoque para profundizar en la biosíntesis de aroma floral y el mecanismo de regulación de la floración temprana, además de estudios de genómica comparada sobre el resto de especies de las Rosáceas. “

En concreto, los estudios de genómica se centrarían en los géneros Prunus, Malus y Fragaria. El género Prunus incluye árboles como el ciruelo, el melocotonero, el almendro, el cerezo y el albaricoque. El género Malus incluye a todos los tipos de manzanos y el género Fragaria incluye las fresas. Son tres géneros de alta importancia económica y el estudio de su evolución filogenética podría ayudar también a la mejora de los mismos.

 

Fuente: Nature