Seguimos con la serie de artículos en los que analizamos a fondo el nuevo Nexus 4 de Google. Os recordamos que la idea de esta serie es echar un vistazo detallado a las características técnicas de este nuevo terminal, ya que su reducido precio de sólo 299€ libre ha hecho saltar todas las alarmas en el mundo de los smartphones. Lo bueno es que se está confirmando que pese al precio, sobre el papel el terminal parece ser una auténtica máquina.

Hoy vamos con un apartado muy interesante, el de la geolocalización. Esta es la característica de un smartphone que sirve para posicionarnos en un mapa, y de la que muchas aplicaciones se sirven para funcionar correctamente. La más evidente en Android es Google Maps, una app que muchos usamos para navegar cuando conducimos o para encontrarnos cuando estamos perdidos y necesitamos encontrar un lugar, pero otras como Forusquare o incluso Whatsapp también pueden hacer uso de este.

Vamos a aprovechar este artículo no sólo para explicar los métodos de posicionamiento de los que dispone y que emplea el Nexus 4, sino para además explicar cómo funcionan estos, ya que nos hemos acotumbrado demasiado a hablar de GPS y sus complementos sin saber muy bien a qué nos referimos.

GPS

Por supuesto el Nexus 4 tiene GPS, y es que salvo en algunas excepciones este es el estándar hoy en día. El GPS es una red de 24 satélites que pertenece al Departamento de Justicia de los Estados Unidos. Mediante el uso de la triangulación y un chip capaz de entenderse con estos satélites, el Nexus 4 y cualquier teléfono que disponga de él es capaz de obtener su posición en casi cualquier punto del mapa.

El problema del GPS es que, además de tener un margen de error que puede llegar a ser demasiado alto, el tiempo que tarda en localizarnos es en ocasiones muy elevado, especialmente si estamos bajo un techo, ya que dificulta su comunicación con los satélites. Y, lo que es muy importante, no utiliza ni Internet ni la red móvil para hacer esto, por lo que no hace uso del 3G ni de ningún tipo de conexión de datos (salvo, si consideramos así, la directa con el satélite).

aGPS

Como el GPS tiene muchos problemas para funcionar en condiciones normales, se tuvo que crear el aGPS (GPS Asistido). Este hace uso de Internet para ayudar al GPS a posicionarse mejor. Es importante entender que no lo hace más preciso, simplemente le da un empujón inicial y con esa ayuda proporciona una ubicación inicial aproximada que ayuda al GPS a posicionarse más rápidamente.

El aGPS necesita una conexión a Internet para descargar un fichero que le proporciona información sobre la célula móvil (la antena) a la que estamos conectados en ese momento. En ese fichero se encuentra la posición de dicha antena, y gracias a esto es capaz de ayudar con esa información al GPS para localizarse más rápido.

Y por supuesto, el Nexus 4 tiene aGPS, pero hasta aquí es lo normal, ya son raros los smartphones que no tienen GPS y aGPS.

GLONASS

Aquí empezamos con algunas de las novedades no tan comunes. El soporte GLONASS es algo que los smartphones empiezan a introducir recientemente, y el Nexus 4 es uno de ellos. Como decíamos al principio, GPS es una red de 24 satélites del Departamento de Justicia de Estados Unidos. Pues bien, el GLONASS es lo mismo, pero en este caso contamos con 31 satélites (de los cuales 24 se usan para posicionamiento) y pertenece a Rusia.

GLONASS es por lo general más preciso y rápido que GPS, pero aunque no lo fuera tener soporte para dos redes de satélites de geoposicionamiento es muy importante para aumentar la velocidad de localización, ya que podemos acceder a los datos que antes nos lleguen, aumentando las posibilidades de que esto se haga antes.

El soporte de GLONASS es un gran avance en el posicionamiento de teléfonos móviles, y la calidad de este se nota enormemente.

Barómetro

El barómetro es una herramienta que sirve para  medir la presión atmosférica, y el Nexus 4 cuenta con uno. Entonces, ¿por qué metemos esto en el apartado de posicionamiento? Efectivamente parece algo raro, pero vais a ver que no lo es para nada, y una vez entendido tiene todo el sentido del mundo.

La medida de la presión atomosférica no sólo sirve para determinar si se aproxima una borrasca y ayudar a la predicción de las condiciones meterorlógicas, sino que es una muy buena aproximación a la altitud a la que nos encontramos. Midiendo la presión atmosférica con un barómetro podemos saber más o menos a que altura estamos sobre el nivel del mar.

Cuando el GPS y el GLONASS reciben información de los satélites, obtienen cuatro datos: Latitud, longitud, altitud y tiempo. Como hemos dicho, todo lo que sea una ayuda para acelerar los datos de posicionamiento ayudarán a que la ubicación se obtenga mucho más rápido. Aunque sea sólo una aproximación, la altitud que el barómetro proporciona acelera mucho el proceso, y por eso el barómetro es tan importante para la geolocalización en un smartphone. El Motorola Xoom fue de los primeros en utilizarlo, y desde entonces lo han montado terminales como el Galaxy Nexus o el Samsung Galaxy S III.

Con GPS, aGPS, GLONASS y barómetro podemos decir que el Nexus 4 cumple con creces el apartado de posicionamiento, así que muy alta nota aquí.