¿Cómo se ganan 20.000 millones de dólares con Spam?
Y es que aunque muchas veces nos parezca inverosímil que alguien se trague alguno de los mensajes de spam que nos llegan al correo, o que haya gente capaz de comprar medicamentos online sin prescripción y sin saber qué es lo que le están vendiendo, hay gente que pica. Y pongo el ejemplo de los medicamentos porque curiosamente las farmacias online encabezan el ranking de la oferta spammer por excelencia. Le siguen los casinos online y las ofertas de trabajo, aunque también podemos encontrar citas u ofertas de esposas, dietas o software ilegal. La oferta es muy amplia, como lo es su difusión en la red. Para que nos hagamos una idea de sus dimensiones, se dice que el 80% del tráfico de correo electrónico en el mundo es Spam. Una porcentaje que deja con la boca abierta y que nos ha de hacer reflexionar.
Pero la difusión, aunque es principalmente por email, tiene muchas más maneras de alcanzar objetivos. Grandes redes de botnets u ordenadores zombies son los encargados de realizar los envíos masivos a la red en cuestión de minutos. Y lo mismo
Pero, ¿cómo generan beneficios los spammers?
Un estudio de unos investigadores de la Universidad de Berkeley y San Diego ha dado un poco con la clave de la pregunta que nos planteamos. Todo y que averiguar realmente como funciona todo al 100% es algo que es muy difícil de conocer. El mundo del spammer es como cualquier otro negocio que se mantiene al margen de la legalidad, y evidentemente los métodos y formas de hacer negocio no son del dominio público.
Los investigadores decidieron que la mejor manera para averiguar de que iba la cosa, era crear su propia red de Spam. Para ello crearon una página falsa para vender productos farmacéuticos, principalmente productos como Viagra y otros relacionados. Para propagar sus correos electrónicos de publicidad hicieron uso de una botnet llamada Storm, cuyos datos de infección en aquel entonces eran de 20.000 a un millón de infectados. Con tal cantidad, infiltrarse en una pequeña porción ya supone un triunfo.
Durante 26 días utilizaron la botnet para enviar emails con publicidad de su página de Viagra, y en total
Pero el spam se mueve en muchas direcciones y en muchas ocasiones no se trata de vender nada, si no de estar en una red de afiliados de publicidad en la que el beneficio se consigue llevando al usuario a hacer click en anuncios, altas fantasmas en servicios que lo único que hacen es conseguir datos bancarios, posicionar de manera fraudulenta webs en Google, y todo un ámplio catálogo de servicios que también incluyen todo lo relacionado con redes sociales. Puesto que si el correo electrónico ha dado durante tantos años buenos resultados, no es menos esperable que las redes sociales, tan en auge y tan relevantes no tengan un efecto igual. Miles de perfiles falsos en Facebook o Twitter también son productos a la venta en foros y otros lugares de encuentro de spammers. Lo que no podemos llegar a saber es qué métodos se utilizan para no dejar rastro, aunque probablemente también se compran los favores.
Un tema siempre peliagudo el del spam, pero del que viven muchas empresas ya sea de forma ilegal generandolo, como de forma legal luchando contra él e inventando sistemas de protección. Todo un ecosistema que sigue saliendo caro para el que lo sufre, y para todos los usuarios en general. No sólo por la molestia, si no porque si erradicásemos el tráfico basura que generan estas acciones muy probablemente mejoraríamos en aspectos de velocidad y agilidad de la red. Pero yo particularmente no le veo fin a esto. ¿Y vosotros?
Fuente: Consumer Warning Network