Apple ha presentado este mes Apple Intelligence, el sistema de inteligencia artificial para iPhone, iPad y Mac, que marcará el futuro de la compañía. Para ello cuenta con el apoyo de un socio crucial, OpenAI y su ChatGPT al que podrá conectar Siri, el asistente virtual de Apple. Sin embargo, esta colaboración antes de final de año se verá en España, no llegará a otro país: China.
ChatGPT no está disponible en China, por lo que Apple se ha encontrado con un vacío en su oferta de IA en este país, que es el segundo mercado más importante para los iPhones. El fabricante de teléfonos aspira a ponerse al día en una carrera en la que ya va detrás de sus rivales, otras marcas como Samsung o Xiaomi ya han lanzado funciones de IA en sus nuevos móviles.
Para ello, Apple está siguiendo una doble estrategia doble con la que conseguir servicios de inteligencia artificial. Por un lado, desarrollando sus propias capacidades de IA algo que lleva tiempo y muchos recursos. Por otro lado, se asocia con OpenAI, cuya tecnología tiene más desarrollo y es conocida por la mayoría de usuarios.
La ausencia de este socio esencial para la nueva estrategia de inteligencia artificial presentada por Apple, ha obligado a la compañía a buscar otros socios en el gigante asiático, según revelan fuentes de la industria a The Washington Post. Por el momento, no habría ningún acuerdo en firme a pocos meses del lanzamiento de los nuevos iPhones y la futura versión de software que integrara todas estas novedades.
Apple ha mantenido conversaciones con varias empresas chinas que fabrican modelos de IA, incluida la empresa de motores de búsqueda Baidu, el líder de las ventas online Alibaba Group y una startup con sede en Beijing llamada Baichuan AI, asegura el artículo.
En China, el gobierno ejerce un férreo control sobre los servicios digitales. Las empresas deben contar con su aprobación para introducir chatbots de IA basados en grandes modelos de lenguaje entrenados con enormes bases de datos de texto, imágenes y videos que se han extraído de Internet. Los reguladores se aseguran que los modelos no influyan en la opinión pública de forma contraria a las directrices marcadas por el gobierno.
En este proceso de control, se han aprobado más de 117 productos de IA generativa, pero ninguno desarrollado fuera de las fronteras chinas. Apple habría intentado ser el primero en conseguirlo, pero habría valorado como más posible la asociación con una empresa local. Lo mismo le ha pasado a otros fabricantes extranjeros como Samsung.
La marca coreana ofrece su propia IA en el resto del mundo, pero en china ha contado con el apoyo de dos empresas locales. Por un lado, Baidu que ofrece la función para rodear con un círculo el objeto que se quiere buscar en la pantalla del teléfono, entre otras opciones. En segundo lugar, la empresa de software Meitu se encarga de gestionar la edición de fotografías basada en inteligencia artificial.
Esta adaptación al país no es nueva para Apple, allí el servicio iCloud de Apple almacena datos en los servidores de una empresa de propiedad gubernamental. Además, se espera que en breve lancen en las tiendas chinas las gafas Vision Pro, pero sin su servicio de streaming, Apple TV+, que no está disponible en el país.