Hoy en día, especialmente en España y en la mayoría de países de Europa, tenemos los servicios de Google y su ecosistema como el estándar por excelencia. Google Chrome y sistemas como Chrome OS dominan con mano de hierro en algunas áreas, como el sector educativo. No obstante, se ha producido un incidente harto curioso, ya que el Ministerio de Educación de Holanda ha restringido tanto el navegador como el sistema en las escuelas.
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Tal y como recoge TechRadar, el organismo de los Países Bajos ha lanzado una proclama al sector educativo: implementar una restricción mayoritaria al software de Google en la medida de lo posible ante la perspectiva de que este pueda entrar en conflicto con la GDPR, o lo que es lo mismo, el Reglamento General de Protección de datos.
Esta medida se ha producido después de que el encargado del Ministerio, junto con los ministros de educación primaria y secundaria, enviaran una carta al parlamento de Holanda detallando estas cuestiones respecto a los datos de los usuarios.
Restricciones a Google
La misiva lanzada por estos ministros explica cómo estos hablaron con los representantes tanto de Google como de Microsoft y Zoom. Representantes de estas tres empresas han dado garantías a los ministros sobre actualizaciones que harán que las versiones futuras de sus productos sean más transparentes con las normas de protección de datos vigentes en territorio europeo.
El organismo de control responsable asegura que no sabe ni dónde ni cómo se almacenan estos datos personales, y aunque no se ha confirmado de ninguna forma que se está violando la GDPR, la carta detalla algunos de los asuntos de ciberseguridad y protección de datos que conciernen al software de Google.
GDPR de Europa.
Los funcionarios están preocupados de que estos servicios recopilen datos de los estudiantes para venderlos a instituciones publicitarias, tal y como recoge BleepingComputer. Algunas de las garantías ofrecidas a estos funcionarios incluyen la promesa de que estas nuevas versiones llegarían el año que viene.
Las instituciones educativas y escuelas que quieran seguir usando los servicios de Google deberán realizar una serie de pasos específicos, como la implementación de políticas de grupo específicas y la desactivación de servicios como la traducción automática de sitios web. Sobre todo, se debe desactivar el rastreo de datos para la personalización de datos.
Esta restricción tendrá lugar, al menos, hasta agosto del 2023, momento en el que los reguladores holandeses volverán a realizar una inspección sobre estas actualizaciones de software.