El Paint es uno de esos programas que parece que “siempre ha estado ahí”. Desde hace décadas, hemos tenido la seguridad de que, en caso de emergencia, teníamos disponible un programa de dibujo fiable y bien conocido. Vale, puede que haya alternativas mucho mejores a Paint, pero ninguna viene ya preinstalada en Windows.
Incluso aunque la versión de Paint de Windows 10 no tenga novedades, sigue siendo un programa muy valioso para hacer bocetos; o simplemente, para entretenernos un rato. Los artistas con más talento incluso pueden conseguir resultados increíbles con un programa tan simple.
Por eso fue todo un “shock” para mucha gente que Microsoft anunciase que iba a dejar de incluir Paint en Windows. El programa iba a ser abandonado, si bien podríamos seguir descargándolo desde la Tienda de Windows. Pero todo el desarrollo iba a terminar; y por lo tanto no podía permanecer como un programa instalado por defecto en el sistema.
El Paint de Windows no desaparecerá
Esta no es una decisión que se tome a la ligera. Todo el código que viene en Windows tiene que recibir soporte y actualizaciones; por lo que cada programa incluido supone más trabajo para Microsoft. Incluso aunque Paint no haya recibido novedades en años, si se descubriese un bug, por ejemplo, los programadores de Microsoft tendrían que solucionarlo.
Con un programa de “legado” como Paint, que sólo está en Windows 10 porque ya estaba en versiones anteriores, simplemente todo ese trabajo no merecía la pena…o al menos eso creíamos. Porque pese a las amenazas, Paint se mantuvo en la última actualización de Windows. Y ahora miembros de Microsoft han confesado que Paint continuará preinstalado en Windows “por ahora”. Es decir, que Microsoft ya no tiene una fecha para eliminarlo.
Paint será abandonado tarde o temprano, pero mientras siga siendo una herramienta útil para los usuarios de Windows, continuará en el sistema. Eso, pese a los intentos de Microsoft de que nos pasemos a Paint 3D, un nuevo programa compatible con el diseño en tres dimensiones; sin embargo, pese a ser un programa más moderno y con más posibilidades, no ha conseguido desbancar a un programa que es peor, pero que todo el mundo conoce. La historia de Windows XP se vuelve a repetir.