Lavarse los dientes después de cada comida es muy importante para tener una buena salud bucal, tal y como recomienda el Consejo General de Dentistas de España. Aunque la última innovación en limpieza dental es un cepillo de doble cara que limpia la dentadura de una pasada, ahora hay un complemento perfecto: Zaamigo, que va un paso más allá. Se trata de un dispositivo que incluye una cámara e inteligencia artificial (IA) que toma una foto de la boca para monitorizar la salud de los dientes y las encías.
Zaamigo ha sido desarrollado por la empresa suiza del mismo nombre y permite al usuario controlar por sí mismo su higiene bucal, avisándole cuándo es el momento de acudir al dentista. Un invento que adopta la forma de un cepillo eléctrico, pero que no se usa para lavarse los dientes, ya que cambia el anillo de cerdas giratorias por una pequeña cámara digital a prueba de agua rodeada por ocho luces LED para iluminar cada rincón de la dentadura.
La cámara toma fotografías microscópicas de los dientes y las encías que, en apenas segundos, es analizada e interpretada por una inteligencia artificial en una aplicación para móviles que ofrece notificaciones como por ejemplo, que las encías están inflamadas. "Los usuarios ven de inmediato qué tan bien se cepillan los dientes y qué áreas descuidan, que a menudo es hasta el 40% de los dientes", explica Severin Stalder, fundador de Zaamigo.
Avisa para ir al dentista
El funcionamiento de este dispositivo es más sencillo de lo que pueda parecer y se utiliza siempre después de cepillarse los dientes. En ese momento, el usuario coloca el cabezal de Zaamigo -que es justo el lugar en el que se encuentra la cámara- en la boca y lo usa para, pulsando un botón, tomar un total de seis fotos de sus dientes, tanto superiores como inferiores.
Las imágenes se transmiten de forma inalámbrica a una aplicación para dispositivos móviles con sistema operativo iOS, es decir, para iPhone o iPad; donde unos algoritmos basados en inteligencia artificial son los encargados de comprobar en segundos si hay manchas en los dientes, sarro o encías inflamadas.
Unos algoritmos que se desarrollaron haciendo que expertos dentales analizaran una base de datos de miles de imágenes capturadas por Zaamigo, identificando los problemas presentes en cada una de ellas. La aplicación, en función de lo que detecte, también ofrece consejos a los usuarios sobre cómo mejorar su técnica de cepillado o el uso del hilo dental y puede avisar de la necesidad de acudir al dentista.
El dispositivo, que también incorpora una pantalla que ofrece el nivel de la batería y el estado de la conexión, está pensado para que lo pueda usar cualquier persona, tanto niños como adultos, aunque tiene más sentido para los primeros para que los padres puedan tomar las medidas necesarias a tiempo. Así mismo, sus creadores confirman que ya hay dentistas que utilizan Zaamigo y usan las imágenes para comunicarse con el paciente y lograr que sus explicaciones sean más comprensibles.
No detecta las caries
Zaamigo se puede comprar a un precio de 88 euros, y su creador ya señala cuáles son sus siguientes objetivos: "queremos desarrollar un dentista artificial con una gran experiencia y proporcionar diagnósticos avanzados en el futuro". Una de las principales ausencias de este dispositivo es que la tecnología actualmente no es capaz de detectar las caries.
La idea de sus desarrolladores es que esta función sea posible a medida que la inteligencia artificial se desarrolle más, aunque para lograrlo las imágenes se deben vincular con otros hallazgos, como compararlas con imágenes de rayos X o encías sangrantes después de una prueba táctil. También se espera que en el futuro pueda detectar otros problemas, como la periodontitis, también llamada enfermedad de las encías, o el bruxismo.
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