¿Cuáles son los componentes que realmente necesita un jugador? Podríamos pensar que lo más importante es conseguir un buen procesador, o una buena tarjeta gráfica como la RTX 3080 o la RX 6800 XT de AMD.

Pero no podemos olvidar otros aspectos que también afectan a la experiencia, aunque inicialmente no nos demos cuenta. La ergonomía, por ejemplo, también importa mucho si te vas a tirar horas jugando, y por eso es importante invertir en una buena silla gaming.

El sitio donde nos apoyamos y ponemos el teclado y el ratón también importa. Contar con una mesa gaming puede parecer una tontería, si ya tenemos un escritorio convencional, pero hay muchas razones, tanto de ergonomía como de diseño, por las que merecen la pena.

Nueva mesa gaming

Así lo piensan en Secretlab, un fabricante más famoso por sus sillas gaming que esta semana ha presentado su primera mesa gaming, la Magnus Metal Desk, que destaca por ambas razones.

¿Cómo se puede innovar en una mesa? Pues en el caso de la Magnus, con un sistema de imanes que nos permite organizar mejor nuestros cables. Toda la mesa ha sido diseñada para tirar los cables de tal manera que no molesten y permanezcan ocultos, pero que si los necesitamos, estén ahí.

Un buen ejemplo son las abrazaderas magnéticas para el lateral de la mesa. La idea es que ahí pongamos los cables que más usamos, como los cables de carga o el cargador inalámbrico. Gracias al sistema magnético, tendremos la seguridad de que no se caerán pese a estar en el borde de la mesa. Estos cables permanecen ocultos en la parte inferior y transcurren por una de las patas de la mesa, para que no sean evidentes a simple vista.

RGB y funcional

Como buen producto gaming, esta mesa tiene iluminación RGB, en una zona superior y más elevada respecto al resto; eso es porque, en realidad, este es un compartimento secreto en el que podemos meter nuestros cables, por lo que cumple una función estética y funcional.

El uso de imanes no se queda ahí. Como muchas mesas gaming, esta cuenta con su propia cubierta diseñada para funcionar con todos los ratones sin necesidad de alfombrilla; lo interesante es que se une a la mesa de manera magnética, por lo que tendremos la seguridad de que no se mueve en mitad de nuestras partidas.

La Magnus también tiene altura variable, aunque el cambio se debe hacer de manera manual ya que no cuenta con un motor integrado, y no podremos usarla de pie. La altura puede variar entre los 74 y los 94 centímetros.

La SecretLab Magnus Metal Desk se vende con envíos a Europa en la tienda oficial; habrá dos versiones: la de 1,5 metros de ancho ya está disponible por 449 euros, mientras que la de 1,2 metros costará 399 euros y será lanzado próximamente.