El confinamiento por el coronavirus ha hecho que el teletrabajo se instaure en España, lo que ha provocado que los usuarios pasen más horas delante de sus ordenadores. Unos dispositivos que requieren de cierto cuidado, ya que con el paso del tiempo pueden ir dando una serie de problemas en cuanto a rendimiento. 

Tardar en encenderse o que vayan más lento son algunas de las consecuencias que pueden surgir si se tiene el ordenador repleto de programas que no se usan, archivos temporales y otros elementos que poco a poco van afectando a su productividad. Al igual que para alargar la vida útil del portátil, llegados a este caso siempre se pueden tomar medidas para mejorar su rendimiento.

Por suerte, en el mercado existen una gran variedad de herramientas que ayudan a paliar y solucionar estos problemas. En ese sentido, desde la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI) han recopilado seis consejos para conseguir que un ordenador vaya fluido y para que su rendimiento no se vea afectado en ningún momento.

Archivos temporales

Una de las principales causas que propician que un ordenador vaya lento o no rinda al nivel esperado tiene que ver con todos aquellos archivos temporales que se van creando y guardando en el sistema. Si a esto se le suman los programas que se instalan, la memoria del equipo se va llenando.

La falta de espacio en la memoria hace que el ordenador vaya más lento, lo que supone un auténtico quebradero de cabeza. Para terminar con este problema es recomendable eliminar todos aquellos archivos temporales o duplicados del dispositivo. 

Para ello se pueden utilizar diferentes herramientas de limpieza, como CCleaner, que se encargan de localizar y eliminar todos estos archivos de la memoria del ordenador. Con ello se aumenta el espacio disponible y se mejora considerablemente la velocidad de procesamiento. 

Eliminar registros

Los registros son una especie de base de datos en la que se almacena información detallada sobre la configuración del ordenador, de las aplicaciones instaladas y del hardware. Por ejemplo, a la hora de desinstalar un programa en ocasiones se pueden quedar rastros que ralentizan el funcionamiento del dispositivo y esto se debe a que dicho programa no ha desaparecido por completo del sistema.

Para estos casos, las herramientas de limpieza vuelven a ser fundamentales, ya que comprueban el estado del sistema, analizan los programas que están instalados y los archivos sueltos. Además, también son capaces de eliminarlos cuando no son necesarios para que el equipo funcione correctamente. Eso sí, es recomendable realizar una copia de seguridad antes por si acaso.

Arranque automático

Son muchos los programas que se pueden configurar para que arranquen de forma automática nada más encenderse el ordenador, como es el caso de Spotify. Una función realmente útil para aquellos que están acostumbrados a utilizar la plataforma para escuchar música o pódcasts mientras trabajan.

Sin embargo, esta función puede tener una serie de consecuencias. Por ejemplo, en ocasiones se puede notar que el ordenador tarda más tiempo de lo habitual en arrancar o en abrir otras aplicaciones, además de notar una bajada en su rendimiento. Unos problemas que suelen deberse a los programas configurados para iniciarse solos.

Una vez más, las herramientas de limpieza pueden ser útiles para terminar con este problema. En esta ocasión, se valdrían de una función para localizar y desactivar el autoarranque o el inicio de estas aplicaciones. De esta forma, se evita que el ordenador abra programas que no se van a utilizar.

Historial de búsqueda

Cuando se navega por internet, las páginas web, los servicios en línea y los navegadores almacenan una serie de datos, como las credenciales, el historial de búsqueda o los hábitos de consumo, entre otros. Una información que permite que la navegación sea cada vez más personalizada.

Sin embargo, estos datos contienen información sensible que en manos de personas equivocadas pueden suponer un grave problema. Para que la navegación sea más segura y privada, se recomienda eliminar las cookies, el caché y el historial de búsqueda cada cierto tiempo. Una acción que se puede realizar directamente desde el navegador o con las diferentes herramientas de limpieza.

Desinstala programas

Una medida que puede no llamar la atención, pero que es bastante útil para mejorar el rendimiento de un ordenador. A veces, desinstalar un programa desde el sistema puede suponer un problema porque es posible que tras el proceso aún queden algunos archivos sin eliminar.

Incluso, al contrario, puede ocurrir que el sistema no sea capaz de poner en marcha el proceso para desinstalar dicho programa. Si ese es el caso, el riesgo para el ordenador es aún mayor, ya que puede indicar que se tiene instalado un software malicioso que puede poner en peligro la seguridad del equipo.

Para hacer frente a este problema se puede recurrir, una vez más, a las herramientas de limpieza. Éstas suelen incluir una función que desinstala completamente cualquier programa y que resulta más agresiva que la propia del sistema operativo del ordenador, ya que es capaz de eliminar todo el rastro.

Discos duros

Los archivos que se almacenan en los ordenadores están formados por pequeños fragmentos que se guardan en el disco duro. Con el tiempo, éstos se sobrescriben y se borran, por lo que para el sistema es complicado ordenarlos correctamente, teniendo que trabajar más para encontrarlos. Como consecuencia, poco a poco el rendimiento se ve afectado.

Los sistemas operativos y las herramientas de limpieza cuentan con una función, que se llama desfragmentación de los discos, que sirve para reorganizar los archivos y recuperar espacio; además de para mejorar la vida útil y el rendimiento. 

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