Sony ha presentado esta tarde los nuevos WH-1000XM4, la renovación de sus populares auriculares de diadema con cancelación de ruido. Una papeleta complicada porque los XM3 que le preceden han sido un éxito en el mercado español amparados por sus funciones inteligentes, su diseño y, sobre todo, por su calidad de sonido. Pero Sony ha ido un paso más allá.
Ante el reto de mejorar los sobresalientes WH-1000XM3, la compañía nipona se ha centrado en añadirle a los WH-1000XM4 (380€) más funciones inteligentes que permiten personalizar y controlar la música, mejorar aún más la cancelación de ruido y ajustar el sonido ambiente automáticamente según las preferencias del usuario.
Es decir, Sony ha mantenido todo lo bueno de la generación anterior para que la experiencia en estos nuevos auriculares de diadema sea todavía mayor. Siguen apostando así por un diseño cómodo y elegante, al tiempo que tienen una autonomía de 30 horas de uso.
Menos ruido, mejor sonido
Si por algo se caracteriza la familia 1000X de Sony es por su cancelación de ruido. Ahora, los nuevo 1000XM4 ofrecen el mejor rendimiento en este aspecto que unos auriculares de la compañía han tenido nunca gracias a reducir sonidos a frecuencias altas y medias.
Cuentan con dos micrófonos en cada auricular que trabajan para capturar el ruido ambiente y transferir los datos al QN1, el procesador específico para la cancelación de ruido que ya tenía la generación anterior. Eso sí, en esta ocasión encontramos un nuevo circuito bluetooth Audio SoC que detecta y ajusta la música y el ruido más de 700 veces por segundo. A esto, hay que sumarle un nuevo algoritmo, bautizado como HD Noise Cancelling Processor QN1, capaz de aplicar el procesamiento de cancelación de ruido en tiempo real. Es decir, ‘desconecta’ el ruido que nos rodea.
Más allá de la tecnología de cancelación de ruido, Sony también ha mejorado el proceso de precisión de audio. Lo hace usando Edge-AI, DSEE Extreme, un sistema capaz de reconstruir con mayor precisión que otros sistemas el audio que se pierde en la compresión digital.
Este sistema analiza la música en tiempo real, reconoce instrumentos, géneros y diferentes elementos de una canción para restaurar así los sonidos. En otras palabras, esta inteligencia artificial -desarrollada con Sony Music Studios Tokyo- trabaja para que la pérdida de calidad que se produce en la compresión digital el usuario la note lo menos posible.
Además, la experiencia de un mejor audio llega a un nuevo nivel con una inmersión completa con el sistema 360 reality audio, siempre y cuando se combinen con una aplicación de streaming compatible.
Sonido adaptativo
Si la cancelación de ruido de la gama 1000XM es un factor clave para su compra, también lo va a ser la integración del sonido adaptativo. Tus auriculares ahora sabrán en qué entorno te encuentras y ajustarán lo que estás escuchando al sonido ambiente.
De este modo, la configuración cambiará según donde estemos para tener una experiencia más cuidada. Sin embargo, el verdadero punto a favor de los XM4 en este aspecto es que, con el tiempo, sabrán en qué lugares estamos: en el trabajo, en una cafetería, en el gimnasio, en el transporte público…
Estas ubicaciones frecuentes pueden configurarse desde la aplicación propia de la compañía. Así podremos personalizar opciones que no son tan habituales como que baje el volumen en el transporte público o que nos elimine por completo el ruido de fondo mientras entrenamos. Eso sí, la configuración de sonido ambiente se actualizará automáticamente conforme cambiemos de ubicación.
Siempre puestos
Si en la generación anterior bastaba con tocar el lateral derecho con la mano para silenciar el sonido y poder comunicarnos, ahora no hará falta tan siquiera hacerlo. Sony incorpora en este modelo la función Speak-to-chat con la que los auriculares nos reconocen la voz para detectar conversaciones cortas.
De este modo, en el momento que detecten que estamos hablando se detendrá automáticamente la música y entrará el sonido ambiente con la idea de mantener una conversación corta como pedir un café, parar un taxi o pagar en un comercio. La música volverá automáticamente a los 30 segundos en cuanto hayamos terminado de hablar.
Pese a la incorporación de esta nueva funcionalidad, sigue siendo posible colocar la mano derecha en el lateral (Quick attention) para activar el modo transparencia y escuchar lo que nos rodea. Especialmente útil en aeropuertos para los avisos de megafonía.
Otra de las novedades es que los auriculares ahora saben si los llevamos puestos. Detectan si se están usando o no para adaptar la reproducción de música en consecuencia. Con un sensor de proximidad y dos acelerómetros la música se para o se reanuda para permitirnos ahorrar batería. Una autonomía que dura en torno a 30 horas y que mantiene carga rápida: 10 minutos bastan para tener 5 horas de música.
Mismo diseño, mejor conexión
Sony ha innovado poco en el diseño. Tienen una línea continuista con los anteriores y que hace complicado diferenciarlos a simple vista. Son ligeros y con una distribución uniforme para que reposen bien sobre cabeza y orejas y los podamos usar durante horas sin problemas. Además, los controles táctiles se mantienen y están optimizados para Google Assistant y Alexa.
Sin embargo, sí hay novedades a nivel interno. Los WH-1000XM4 mantienen el emparejamiento NFC y bluetooth, aunque en este caso podrán combinarse con dos dispositivos a la vez, ideal para tenerlos en la oficina y conectarlos a la vez al ordenador y al móvil. De hecho, si nos entra una llamada, los auriculares sabrán qué dispositivo la está recibiendo y lo priorizará. También podremos pasar de uno a otro con un toque.
Por otro lado, Sony ha apostado por la función Fast Pair de Google, que ya hemos visto en los OnePlus Buds o en los Pixel Buds. Esto no sólo permite conectarlos a nuestro Android más fácilmente, sino que podremos saber dónde los hemos dejado desde el móvil.
Precio y disponibilidad
Con respecto al precio y disponibilidad, Sony ha confirmado que llegarán en dos colores (negro y plata) a finales de este verano al mercado español por 380 euros, mantiendo así la línea de precio que caracteríza a sus auricualres de diadema de gama alta.