El conflicto en Ucrania, que estalló hace algo más de dos años, está sirviendo para ver el amplio potencial militar de ambos lados. Especialmente en el caso de las tropas lideradas por Volodímir Zelenski, quienes ya han dejado ver en acción a sus últimas adquisiciones, como Vampire, un eficaz sistema de misiles para acabar con los drones rusos, o Protector, un dron terrestre. A ellos ahora se les suma Bohdana-BG, su último y devastador obús remolcado.
Hace unos días el Ministerio de Defensa de Ucrania presentó a sus socios extranjeros sus modelos más recientes de armas nacionales que han demostrado su eficacia en el campo de batalla, según señalan en un comunicado. Entre ellos se encontraban vehículos aéreos no tripulados, complejos misiles antitanques, sistemas robóticos, en particular drones kamikazes, y su nuevo obús remolcado, el Bohdana-BG.
Un nuevo sistema de artillería que es un híbrido entre el obús 2S22 Bohdana (que en ucraniano significa "dado por Dios") y el cañón de campana remolcado soviético 2A36 Giatsint-B con un calibre de 152 milímetros, que se puede utilizar en diversas condiciones climáticas y que se ha modificado para incorporar características modernas. Un arma que el ejército de Zelenski podría llevar pronto al campo de batalla para combatir a las fuerzas rusas.
Rentable y fácil de producir
El Ministerio de Defensa ucraniano ha compartido un vídeo en sus redes sociales en los que se pueden ver sus nuevas armas, entre las que se encuentra el Bohdana-BG -que aparece en él apenas unos segundos- y con el que pretenden ampliar sus capacidades de artillería ante el conflicto con Rusia. Un obús que está montando en el carro del 2A36 Giantsint-B con el objetivo de crear una solución de artillería rentable y fácil de producir para el ejército de Ucrania.
Y es que la artillería remolcada ofrece una serie de ventajas sobre los sistemas autopropulsados, especialmente en cuanto a términos de producción y simplicidad operativa. Es más barato, sencillo y, por tanto, rápido, por lo que supone un factor clave para Ucrania en la actualidad, según un informe publicado por Militarny. Unas características que permiten una fabricación y un despliegue más rápido en el campo de batalla.
No sólo eso, sino que los sistemas remolcados como el nuevo Bohdana-BG son más fiables y fáciles de mantener. Esto se debe a que carecen de muchos de los complejos componentes que se encuentran actualmente en la artillería autopropulsada, lo que también hace que sean menos propensos a sufrir fallos técnicos. Y es que en el caso de que exista una avería en el vehículo, este obús se puede acoplar a un camión de reemplazo para volver al servicio.
Otra característica interesante de los obuses remolcados es que suelen tener mayores índices de supervivencia en combate. "Cuando resultan dañados por la metralla o los ataques de aviones no tripulados, los obuses remolcados suelen enviarse a reparar, sustituyendo algunos componentes y volviendo rápidamente al frente", señala el informe. Mientras que las unidades de artillería autopropulsadas tienen más probabilidades de sufrir daños irreversibles cuando son alcanzadas.
Sin embargo, la artillería remolcada también tiene un importante inconveniente: su reducida movilidad en comparación con los sistemas autopropulsados. Y en los campos de batalla modernos, es fundamental ser rápidos. Durante las operaciones de contrabatería, estos últimos se pueden retirar rápidamente de las posiciones de fuego, mientras que los dispositivos como Bohdana-BG necesitan más tiempo para recogerse y reubicarlos, lo que les deja expuestos durante períodos más largos.
Por el momento se desconoce el coste exacto de esta nueva versión de Bohdana, aunque hay quien estima que será entre un 30 y un 50% más barato que el obús francés Caesars, (César en su traducción en castellano) que Ucrania ya ha utilizado en el conflicto con Rusia y que en el mercado mundial tiene un coste de unos 5 millones de dólares (unos 4,6 millones de euros al cambio); por lo que debería costar unos 2,5 o 3 millones de euros (entre 2,3 y 2,7 millones de euros).
Un arma que será de gran ayuda para las fuerzas terrestres ucranianas, que se han multiplicado y que están experimentando una escasez de sistemas de artillería, situación que se ve agravada por su constante retirada debido al desgaste y a las pérdidas en combate. Se conoce que a partir de diciembre de este año la producción de Bohdana alcanzó las seis unidades al mes, que sigue siendo insuficiente para el ejército de Zelenski.
Munición incendiaria y perforante
El nuevo Bohdana-BG está basado en el 2S22 Bohdana, un obús que en lugar de un carro está montado en un camión y que se ha diseñado y desarrollado íntegramente en Ucrania de acuerdo con las normas de la OTAN. Este sistema utiliza un calibre 155 mm que es el que habitualmente usa la artillería occidental; mientras que los equipos rusos emplean un 152 mm.
Incluso es la munición que se encuentra actualmente en los cañones ucranianos más potentes, como el 2A36 Giatsint-B, del que también toma inspiración. En cuanto al armamento, el 2S22 Bohdana dispone de un cañón estándar de 155 mm y puede disparar munición incendiaria y perforante de alto poder explosivo (HEIAP, por sus siglas en inglés) con un alcance de entre 35 y 40 kilómetros; además de a una velocidad de disparo de entre 4 y 8 rondas por minuto.
Mientras que para destruir objetivos más lejanos, el obús puede utilizar proyectiles asistidos por cohete (RAP, por su siglas en inglés). Estos proyectiles tienen un motor de cohete para propulsión independiente y pueden ser guiados por miras láser y permite a Bodhana tener un alcance máximo que puede alcanzar los 60 kilómetros.