El desastre de Starliner pasa factura a Boeing que sigue sin un plan para traer a los astronautas de la ISS
Ni la compañía ni la NASA detallan una fecha y plan para que los astronautas puedan regresar, mientras prueban los propulsores de la nave.
1 agosto, 2024 10:45Cuando el pasado 5 de junio se pudo seguir en directo desde España el vuelo tripulado de Starliner hacia la Estación Espacial Internacional (ISS), parecía que los sucesivos problemas de Boeing habían terminado. Casi dos meses después la realidad es otra, la nave sigue sin regresar con los dos astronautas y ni la NASA ni Boeing pueden dar aún una fecha de retorno para la Starliner a la Tierra. La empresa espacial acaba de anunciar nuevas pérdidas económicas a causa de estos problemas.
Esta última semana se han realizado nuevas pruebas de los propulsores de Starliner, con buenos resultados. Aún así, todavía no hay una fecha en firme para intentar devolverla a Tierra, los astronautas llevan ya 50 días en la ISS. Al mismo tiempo, la empresa advierte a sus inversores de nuevas pérdidas y un cambio de dirección.
La Starliner de Boeing ha costado al menos el doble que la Crew Dragon de SpaceX, informa ArsTechnica, las pérdidas totales de la compañía en esta nave alcanzan los 1.600 millones de dólares desde 2016. Aunque, no se sabe exactamente el gasto invertido en Crew Dragon, la nave de Elon Musk, comenzó a transportar astronautas en 2020 y ya ha realizado seis vuelos tripulados.
Trabajando en la vuelta
En un principio, la vuelta a casa de los astronautas estaba fijada para el pasado sábado 22 de junio. A día de hoy, sigue sin haber fecha para intentar ese regreso. El sábado, los controladores de tierra ordenaron a Starliner que probara sus propulsores y 27 de los 28 jets parecieron funcionar con normalidad a pesar del sobrecalentamiento al principio de la misión. Cada propulsor mostró un empuje máximo que osciló entre el 97% y el 102 %, aseguran.
La empresa ha explicado que el problema está en la pérdida del aislamiento de teflón de los propulsores, cuando se encienden repetidamente, de ahí el calentamiento detectado. La NASA y Boeing aseguran que este problema no se podría haber descubierto antes del vuelo de CFT.
A pesar de las fugas encontradas también durante su viaje de ida, la nave espacial también tiene suficiente helio para presurizar su sistema de propulsión, dijeron funcionarios de la NASA. El buen resultado de estas recientes pruebas, podría suponer que la NASA autorizara el regreso durante las próximas semanas.
Aunque volviera, todavía es necesario encontrar una solución a las fugas y demás fallos detectados durante la misión. La semana pasada, la NASA anunció un retraso de seis meses para la misión Starliner-1, planteada para 2025, para dar más tiempo para resolver los problemas de la nave espacial.
Más gastos
La NASA y Boeing han comprometido al menos 6.700 millones de dólares al programa Starliner desde 2010, recuerda ArsTechnica. Mientras que para el programa Crew Dragon el total informado es de 3.100 millones de dólares, aunque SpaceX no ha revelado sus cuentas. Desde 2016, cada nuevo retraso de Boeing, ha supuesto nuevas pérdidas para la empresa.
Es su responsabilidad pagar las soluciones a los problemas descubiertos en el vuelo de prueba tripulado de Starliner en curso. Por este motivo, Boeing ha advertido a los inversores de nuevas pérdidas económicas en el programa Starliner en los próximos meses y años.
En medio de esta tormenta, Boeing anuncia un importante cambio en la dirección, Kelly Ortberg será su nuevo CEO el 8 de agosto. Dave Calhoun deja el cargo de director ejecutivo desde el que también ha tenido que hacer frente a los escándalos relacionados con el avión de pasajeros 737 MAX, al que se le desprendió una puerta.