El Miura 1 de PLD Space acaba de hacer historia en España. El cohete suborbital y reutilizable despegó a eso de las 2:19 horas de este sábado desde la base de El Arenosillo (Huelva), ejecutando paso a paso el plan de vuelo de su primer lanzamiento. Tras ascender a unos 50 kilómetros de altitud que corresponden con su apogeo —de los 80 planeados inicialmente— y trazar una trayectoria parabólica, descendió lentamente gracias al despliegue de un par de paracaídas.
El lanzador ha caído en mitad del mar frente a las costas onubenses tras unos minutos de vuelo de los que sólo unos segundos han sido en microgravedad, de los 6 minutos planeados. En la zona prevista de amaraje se encuentran comisionados dos equipos de rescate con embarcaciones y buzos para intentar localizar el Miura 1 con el fin de hacerlo regresar a tierra firme. De conseguise, se estima que el cohete podría llegar a puerto unas horas después.
La compañía ilicitana intentó ejecutar el primer lanzamiento el pasado 31 de mayo, pero las malas condiciones meteorológicas —por excesivo viento en altura— impedieron lo impidieron en el último momento. La segunda vez, el 17 de junio, un fallo en la desconexión de un cable que unía el cohete con la plataforma abortó la operación menos de un segundo antes de que se fuera al aire.
Completar este despegue de forma exitosa supone un gran empujón tanto para PLD Space como para la industria aeroespacial nacional. El Miura 1 es el primer cohete diseñado, desarrollado y fabricado íntegramente en España y coloca al país en una posición clave en el panorama mundial y un gran potencial en un futuro próximo.
En la parte superior del cohete, en la zona habilitada para llevar cargas, el Centro Alemán de Tecnología Espacial Aplicada y Microgravedad ha integrado un experimento científico relacionado con la microgravedad. El Miura 1 también ha ido plagado de sensores cuyos datos recogidos durante el lanzamiento servirán a los ingenieros para saber cómo se ha comportado ahí arriba.
Aspectos tan esenciales para el futuro como la maniobra de reentrada —que tendrá que hacer igualmente la primera etapa reutilizable del Miura 5— o las temperaturas que se alcanzan durante el descenso en caída libre darán unas pistas sobre el rendimiento.
En el apartado de las especificaciones, cuenta con 12 metros de largo por 70 centímetros de diámetro que se reparten las casi 3 toneladas en el momento de despegue. La carga útil calculada por los ingenieros de PLD Space es de unos 100 kilogramos y está conformado por una única etapa protagonizada por un motor.
El TREPEL-B, como han denominado al motor, es de combustible líquido alimentado por queroseno —en un tanque de 600 litros— y oxígeno líquido —1.100 litros a -182 ºC—. Cuenta con un tiempo de combustión de 122 segundos y desarrolla 30 kN de empuje a nivel del mar que se traducen en menos de 5 G de aceleración máxima durante el ascenso.
Miura 5, el futuro
"Aproximadamente un 80% de Miura 1 está en Miura 5", declaró a EL ESPAÑOL - Omicrono Raúl Verdú, cofundador de PLD Space, en una entrevista hace un par de meses. Esto da una idea de la importancia de este lanzamiento como un gran demostrador tecnológico para la compañía.
El concepto en el que se basa el Miura 5 es radicalmente diferente con un gran despliegue comercial internacional y el lanzamiento desde el Puerto Espacial de Kourou (Guayana Francesa) de la Agencia Espacial Europea. Tal y como indicó Verdú, pretenden realizar el primer lanzamiento de prueba a lo largo de 2024 y comenzar con la puesta en órbita de satélites en 2025.
Las especificaciones técnicas de este lanzador son mucho más avanzadas. Cuenta con 36 metros de longitud por 2 metros de diámetro que se reparten los 68.742 kilogramos que pesará en el momento del despegue.
La primera etapa reutilizable la componen 5 motores de combustible líquido y bioqueroseno como propulsantes que generan 950 kN de empuje a nivel del mar. Supone la mayor parte de la longitud del cohete con 20,37 metros y se calcula que podría ejecutar hasta 15 lanzamientos al año.
La segunda etapa, por su parte, cuenta con un único motor con 50 kN de empuje en el vacío y 10,94 metros de longitud. En ella se sitúa la cofia con una capacidad de carga de pago de 540 kilogramos donde se integrarán los sistemas orbitales de los clientes.