Así es Tramontana, el vetusto submarino español que la Armada ha jubilado tras 38 años de servicio
La embarcación ya se encuentra en su base de Cartagena a la espera del inicio de los trabajos de desmantelamiento de equipos y sistemas.
8 agosto, 2023 01:31El buen ritmo del programa S-80 junto a la proximidad del fin de su vida útil está propiciando lo inevitable: la retirada del S-74 Tramontana. El submarino de la Armada de España pertenece a la clase Galerna y lleva casi cuatro décadas de servicio desde que saliera de los astilleros cartagineses de Bazán, hoy Navantia, a finales de 1984 y se integrara un año después a la Flotilla de Submarinos.
La embarcación ya se encuentra inmovilizada en su base situada en el Arsenal de Cartagena, según recoge Infodefensa. La Armada tiene planeado comenzar próximamente el proceso de baja, que podría completarse en la primera mitad del próximo 2024. Estos trabajos consisten en la retirada de algunos sistemas clave del interior del sumergible, así como su posterior desmantelamiento para enfrentarse a un futuro incierto.
Otro submarino de la clase Galerna, el S-72 Siroco, fue desguazado en 2021 tras varios años en los que se intentó la venta a países como Turquía, Tailandia o Pakistán. Por otro lado, está previsto que el puente de mando del S-73 Mistral, retirado en 2021, se instale en una plaza pública de Cartagena.
El fin del Tramontana
Los últimos meses en activo del Tramontana han sido de todo menos tranquilos. En agosto de 2022 se integró en la operación Sea Guardian impulsada por la OTAN en el mar Mediterráneo, cuyo objetivo se estableció en el "conocimiento del entorno para disuadir y luchar contra el terrorismo, así como mitigar el resto de amenazas". Todo ello en medio de un entorno muy complicado con la invasión de Rusia en Ucrania.
Ya a principios de este 2023, el Grupo Anfibio Aeronaval, Dédalo-23, realizó una serie de maniobras frente a las costas de Francia, Italia y Egipto. Este ejercicio liderado por el buque Juan Carlos I, contó con la presencia del S-74 Tramontana, que sirvió de vector submarino al despliegue.
El Tramontana pertenece a la clase Galerna, un modelo de submarinos diseñados y desarrollados por la compañía estatal francesa DCN —ahora llamada Naval Group— y fabricados en España. Tras una evaluación técnica, el contrato de compra se firmó en mayo de 1975, iniciándose entonces el trabajo de construcción de los sumergibles.
El primero de ellos fue el S-71 Galerna, que da nombre a la rama española de este modelo de embarcación, y oficializó la entrada en servicio a principios de 1983. Con la retirada del Tramontana, el Galerna será durante un tiempo el único submarino operativo dentro de las Fuerzas Armadas españolas. Esta circunstancia se debe principalmente a una gran carena que finalizó en octubre de 2022 y alargó su vida útil hasta el 2028. Para entonces, se espera que estén en servicio varias unidades de la clase S-80.
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Por su parte, el Tramontana entró en servicio en 1985, siendo el último de su clase en salir de los astilleros. Su eslora alcanza los 68 metros, mientras el diámetro es de 6,8 y el calado de 5,40 m. En cuanto al desplazamiento, cuenta con 1.510 toneladas en superficie y 1.760 toneladas en inmersión, de las que se encargan dos motores diésel y uno eléctrico.
En cuanto a la autonomía, la propia Armada indica que contaba con 16.668 kilómetros empleando un esnórquel a una velocidad de 17 km/h. Aunque, donde se enfrentaba realmente a los límites, es en la capacidad para almacenar víveres, con un tiempo estimado de 45 días para 68 tripulantes, la dotación estándar que hasta ahora solía viajar a bordo de la embarcación.
El armamento corría a cargo de 4 tubos lanzatorpedos de 550 milímetros capaces de desplegar varios tipos de munición, así como minas. También incorporaba un sistema de guerra electrónica.
Clase S-80, el sustituto
El programa del submarino S-80 para la Armada española comenzó a gestarse a principios de los años 90 con todo el proceso de estudios de viabilidad y definición del proyecto. Fue en 2004 cuando el Ministerio de Defensa ejecutó finalmente la orden de construcción de un total de 4 submarinos, siendo el primero de ellos el Isaac Peral.
Tiene una eslora de 81 metros por 7,3 de diámetro del casco y alcanza las 2.965 toneladas de desplazamiento en inmersión. Tiene capacidad para 32 tripulantes más 8 espacios extra para embarcar personal adicional que podrán recorrer los más de 15.000 kilómetros de autonomía.
El S-81 Isaac Peral, que da nombre a la clase, tiene previsto entregarse a la Armada a finales de este mismo año. Será, junto con el S-82 Narciso Monturiol, los dos primeros de la serie y los que carecerán del AIP desarrollado por Navantia que permite más tiempo sumergido gracias a un sistema de generación de energía eléctrica independiente del oxígeno atmosférico. Los S-82 y S-84, ya contarán con esta capacidad de serie.
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De entre la larga lista de tecnología, sensores y armamento a bordo de la familia S-80, un equipamiento que descata es el sistema de combate de Navantia en colaboración con la compañía estadounidense Lockheed Martin. Esta función permite la comunicación con otros submarinos convencionales de la UE y la OTAN para lanzar misiles tácticos de ataque a tierra.
La versión española cuenta con 6 tubos lanzatorpedos con munición DM2A4 para responder a amenazas submarinas y de superficie. El alcance de este torpedo supera los 50 kilómetros a una velocidad de 93 km/h y cuenta con un sistema de guiado por fibra óptica y un sonar a bordo.