La Dirección General de la Policía Nacional acaba de anunciar la adquisición de un total de 2.976 nuevas armas Glock 43X para unidades no uniformadas por un importe de 1,2 millones de euros. Se trata de un modelo muy extendido en todo el mundo que dispone de gran precisión y capacidad de ocultación. No es tan futurista como la Kel Tec P50, la pistola de 'ciencia ficción' con la que te olvidas de recargar, pero desde luego es más moderno que los actuales revólveres.
Según indica el Cuerpo, la importancia de esta compra reside en su utilidad para aquellos servicios policiales en los que la Policía Nacional debe guardar especial sigilo en orden a no revelar su condición de aguante de la autoridad. En su desarrollo y ejecución se pone de manifiesto la necesidad de portar un arma de menor tamaño que la reglamentaria de la dotación individual.
Esta nueva Glock 43X cuenta con una munición calibre 9x19 milímetros y tiene un cargador con capacidad para 10 balas. Tiene un peso de 530 gramos con el cargador sin balas incluido repartidos en una longitud total de 16,5 centímetros donde se incluye una corredera con ranuras en ambos lados de la parte delantera de la ventana de expulsión.
En cuanto al rendimiento, tiene una velocidad de salida de 300 metros por segundo y una energía a boca de cañón de 360 julios. Una vez realizadas y evaluadas las pruebas técnicas, se decidió ampliar la adquisición desde las 2.000 unidades iniciales a las casi 3.000 que finalmente se reflejaron en la orden de compra. La entrega del lote de las 2.976 pistolas se llevará a cabo a lo largo del año.
Sustituye a un revólver
La anterior arma utilizada por este tipo de unidades era el revólver Astra modelo Cádix 250, de 2 pulgadas con una capacidad de 5 cartuchos. Según indican, esta colución ha dejado de ser la más idónea tanto por el tipo de munición que emplean como por la ausencia de recambios para un arma que ya no se fabrica.
La adquisición de las Glock también corresponde con una necesidad de contar con el mismo tipo de cartucho para todas las armas cortas. La supresión de los revólveres conllevará una optimización de los recursos existentes, al no tener que adquirirse munición específica para esas armas en concreto.
"Por tanto, se consigue un arma de alta calidad, con mayor precisión, discreción en su porte por su reducido tamaño y una mayor eficiencia económica en la adquisición de munición y repuestos". Las planificaciones de la Dirección General de la Policía prevén la sustitución a todo el personal policial que tenga asignado un revólver de la marca Astra por la pistola subcompacta Glock 43X.