Los nuevos misiles del Ejército español: guiados para los Eurofighter y antibuques en la Armada
El Consejo de Ministros ha aprobado la adquisición de material militar para las Fuerzas Armadas, con especial enfoque en todo tipo de misiles.
28 noviembre, 2022 01:14Las Fuerzas Armadas de España tendrán nuevo armamento próximamente. El Consejo de Ministros ha aprobado un batería de adquisiciones compuesta por 3 lotes de misiles que llegarán a los tres Ejércitos tras desembolsar un total de 368 millones. Destacan, por novedad dentro de las filas españolas, el misil aire-superficie Brimstone que se integrará dentro del caza Eurofighter Typhoon y misiles antibuque NSM para la Armada.
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El primero de los lotes irá a parar al Ejército del Aire y del Espacio por 43 millones de euros, mientras que el segundo significará un desembolso de 125 millones; en ninguno de los casos anteriores La Moncloa especifica el número de unidades adquiridas. El tercer lote lo componen 92 misiles aire-aire de medio alcance modelo AIM-120-C7 AMRAAM y 4 misiles AMRAAM en su versión AAVI por 200 millones.
La adquisición de los misiles AMRAAM "permitirá mantener y actualizar los stocks mínimos de reserva necesarios para las flotas de aeronaves y sistemas de armas que operan este misil", tal y como explican en la nota emitida tras la celebración del Consejo de Ministros. El contrato incluye un paquete de soporte logístico para el apoyo y mantenimiento del material durante su ciclo de vida, aunque ya se encuentra presente en las Fuerzas Armadas desde hace años.
Eurofighter con Brimstone
Sin duda la gran novedad de las adquisiciones la ha protagonizado el misil Brimstone (Azufre, en su traducción literal del inglés) fabricado por el consorcio MBDA compuesto por compañías de Francia, Alemania, Italia y Reino Unido. El desarrollo de este misil comenzó como una actualización del más conocido Hellfire llevada a cabo en los años 90 y que cristalizó finalmente en un modelo muy diferenciado del original.
El Consejo de Ministros ha aprobado la celebración del contrato para la adquisición de este modelo de misil guiado aire-superficie, así como su integración en el sistema de armas C.16 presente en los cazas Eurofighter Typhoon. Se incluye, según recogen, la adquisición del equipo asociado, equipos de comprobación, así como la formación en su uso y sostenimiento.
"La capacidad de ataque de superficie táctico del Ejército del Aire y del Espacio está cubierta actualmente por el misil Maverick, integrado en la flota de C.15 [cazas F-18]", afirman en la nota. "La disminución progresiva de dicha flota operativa, la antigüedad de los misiles y la no disposición de ningún misil similar integrado en los C.16 [Eurofighter], determinan la necesidad de iniciar el proceso de integración y adquisición de un misil de características similares existente".
El misil tiene un peso de 50 kilogramos —6 de ellos pertenecientes a la ojiva— con una longitud de 1,8 metros y un diámetro de 180 milímetros. Como sistema de propulsión emplea un cohete de combustible sólido que le permite superar los 60 kilómetros de radio en su versión más moderna disponible, aunque MBDA se encuentra desarrollando una más avanzada que permitiría superar los 100 kilómetros. El Consejo de Ministros no detalla el modelo exacto de la adquisición.
El Brimstone cuenta con una velocidad máxima supersónica de unos 1.500 kilómetros por hora y emplea un sistema de guiado por un radar de onda milimétrica apoyado en un sistema inercial. Según las especificaciones, tiene un error de precisión menor a un metro. El misil está presente actualmente en las fuerzas aéreas de Reino Unido, Arabia Saudí y Alemania.
Precisamente Reino Unido anunció en mayo que iba a enviar "cientos de unidades" de Brimstone a Ucrania en su versión lanzada desde tierra firme. Según las últimas noticias, el ejército de Zelenski ha pasado estos últimos meses modificando algunos camiones lanzadores para que puedan acomodar y utilizar este tipo de munición. Que ya habría sido desplegada en el campo de batalla.
Antibuques para la Armada
Los próximos misiles antibuque de la Armada correrán a cargo de la compañía noruega Konsberg Defense & Aerospace (KDA) con el modelo NSM como bandera. La primera noticia sobre el empleo de esta munición apareció el pasado septiembre cuando el fabricante noruego incluyó a España entre los países que había seleccionado su tecnología. Por aquel entonces y según medios locales, el Ministerio de Defensa de Margarita Robles estaba a la espera de la firma del contrato.
"La Armada ha desarrollado un exhaustivo programa de evaluación de un nuevo misil antibuque para sustituir los actuales misiles HARPOON que están llegando al final de su vida útil", recoge la publicación del Consejo de Ministros. "El misil elegido ha sido el Naval Strike Missile (NSM) que permite su incorporación tanto a las actuales fragatas F-100 como a las futuras F-110".
La selección del misil, apuntan, se centró en el mercado europeo debido a que facilitará el apoyo a la munición durante todo su ciclo de vida. El NSM obtuvo las máximas puntuaciones en las cuatro áreas de criterios de selección: operación, costes, plan de mantenimiento y retorno industrial.
El NSM "proporciona un rendimiento operativo superior y una alta capacidad de supervivencia contra todos los sistemas de defensa enemigos", según KDA. Una de sus principales bazas es la flexibilidad que proporciona al poder atacar objetivos marítimos y terrestres con capacidad de penetración a través de escudos antiaéreos. Se apoya en un sistema a bordo capaz de identificar la clase de barco al que va a atacar gracias al reconocimiento automático de objetivos.
Dispone de una velocidad "subsónica alta" que no llega a romper la velocidad del sonido y que KDA no acota. La consigue gracias a un cohete de combustible en estado sólido de fabricación francesa que le impulsa los primeros segundo, para luego pasar a utilizar un turborreactor hasta el momento del impacto. Tiene una masa de 407 kilogramos —125 de ellos de ojiva— con un alcance de más de 185 kilómetros.
Más equipamiento
La cartera de Robles también ha recibido la luz verde para la adquisición de municiones y armamento guiado de precisión para el Ejército del Aire y del Espacio. "Para que los contingentes, dotaciones y sistemas de armas en las aeronaves puedan seguir cumpliendo las misiones que tienen asignadas". Indican que el contrato se va a gestionar a través de la OTAN por 104,4 millones de euros sin especificar el modelo exacto.
Del mismo modo, el Consejo de Ministros aprobó la adquisición de dispositivos criptográficos para la Infraestructura Integral de Información para la Defensa por 24,3 millones de euros. Estos dispositivos, de fabricación nacional, permitirán proteger los circuitos de comunicaciones de voz y datos seguras en la red de telecomunicaciones propiedad de la Infraestructura Integral de Información para la Defensa (I3D) y asegurar la información transmitida a través de la red.
"Esta protección de la red contribuirá a dotar a las Fuerzas Armadas de una infraestructura única con la capacidad necesaria para el despliegue e integración de servicios de los diversos sistemas que conforman el Sistema de Mando y Control Nacional, que proporcionarán servicio a las comunidades de interés de Mando y Control y de Inteligencia".
Por último, entre las adquisiciones más relevantes, se encuentra la implementación del sistema de un nuevo sistema de guerra electrónica en la flota de aeronave C.15 (F-18) del Ejército del Aire y del Espacio. En particular, se trata de la actualización de la versión SPAI 900 a SPAI 900+ por 28 millones.
"La actualización, que se enmarca en el proceso de modernización y actualización de estos aparatos, es necesaria para solventar la obsolescencia de sus diferentes elementos", recalcan desde La Moncloa. "Especialmente de los sistemas de guerra electrónica que son los responsables de la detección de amenazas y de la generación de contramedidas electrónicas garantizando con ello la supervivencia de las tripulaciones y de las aeronaves".