Probamos el Mac Studio: un ordenador con un rendimiento gigante en un tamaño minúsculo
Apple pone a la venta mañana en España el nuevo Mac Studio que se actualiza con el nuevo chip M2 Ultra para ser más potente y capaz.
12 junio, 2023 19:02Apple presentó el pasado lunes el futuro de la computación, las gafas Vision Pro. Con ellas prevé que la informática cambie por completo en los próximos años, llegando a un entorno espacial donde las aplicaciones se integren con nuestra visión de la realidad. Sin embargo, el gigante de Cupertino no descuidó su ordenadores actuales y también completó otro hito para la compañía: la transición de todos sus Mac a los chips Apple Silicon.
Lo hizo tras anunciar que su poderoso Mac Pro equipará el M2 Ultra, su chip propio más ambicioso que presume de rendimiento desbocado. Este procesador no se queda únicamente en el modelo Pro, sino que también llega al Mac Studio, con lo que renueva así su compacto ordenador de sobremesa orientado a usuarios profesionales que lanzó en 2022.
El Mac Studio llega a las tiendas de España este martes 13 de junio desde 4.849 euros con el chip M2 Ultra (2.429 euros si el procesador elegido es el M2 Max). No lo hace sólo, le acompaña también el nuevo MacBook Air de 15 pulgadas. En EL ESPAÑOL - Omicrono lo hemos podido probar en los últimos días para conocer cuáles son sus puntos fuertes y si merece la pena la actualización.
Potencia a raudales
El Mac Studio, tanto con M2 Max como con M2 Ultra —el modelo que estamos probando—, no es un ordenador para todo el mundo. Es un portento técnico y con una capacidad que supera las necesidades del gran público, e incluso de usuarios avanzados como quien le escribe. Más aún teniendo en cuenta la renovación del Mac mini de principio de año con más potencia y capacidad.
Sin embargo, este ordenador busca dar respuest a aquellos usuarios profesionales que quieren un ordenador realmente potente, mucho más que el mini, pero que tampoco tienen la necesidad de dar el salto hasta el Mac Pro. Creadores de contenido, programadores o editores que buscan un equipo compacto para sus escritorios pero que a la vez fuese tremendamente potente.
Ese ordenador se ha renovado con el M2 Max y el M2 Ultra, los chips más ambiciosos de la historia de la compañía pero manteniendo lo que hace tan especial al Studio: un tamaño compacto que encaja debajo de la mayoría de monitores y que cuenta con una amplia salida de conexiones para hacer con él prácticamente lo que se nos ocurra.
El M2 Ultra usa la tecnología UltraFusion de la compañía que permite unir en un único chip dos M2 Max, lo que en la práctica es duplicar el rendimiento del Max frente al Ultra. Es el chip más grande y potente que Apple ha lanzado jamás. Por ponerlo en perspectiva incorpora una CPU más potente y un 20% más rápida que la del M1 Ultra del año pasado, una GPU más grande y hasta un 30% más rápida, y un desarrollo neuronal de hasta 40% más veloz. Un salto increíble que justifican que la compañía haya renovado el Studio sólo un año después.
Este particular prodigio técnico que alberga la pequeña caja que es el Mac Studio integra una CPU de 24 núcleos con 16 núcleos de rendimiento y 8 núcleos de eficiencia, una GPU capaz de trabajar con hasta 76 núcleos y un Neural Engine de 32 núcleos que que puede realizar 31,6 billones, con b, de operaciones por segundo. Además, está pensado para gestionar una gigantesca cantidad de información gracias a su arquitectura de memoria unificada más grande, que ofrece 800 GB/s de ancho de banda y admite hasta 192 GB de RAM. En suma, es un equipo con el que hacer desde grabaciones de música a gran escala, mezclar y editar películas que puedes ver en el cine, o programar videojuegos sin problemas. Una bestia.
El rendimiento del M2 Ultra es inabarcable para un usuario normal e incluso le costará encontrarle las cosquillas a aquellos usuarios profesionales que deseen ponerlo al límite. Así por ejemplo, el Mac Studio puede mover hasta 22 streams en resolución ProRes 8K a la vez, al tiempo que, a la hora de editar, pueden trabajar juntos en la codificación en tiempo real en un único vídeo pasando de una toma a otra en tiempo real. Esto le permite además ser compatible con hasta ocho monitores 4K o tres monitores 8K a la vez.
Un diseño que funciona
Toda las novedades del Mac Studio se encuentran en su interior. Estéticamente nada cambia para cumplir así la máxima de no tocar lo que funciona. Con unas dimensiones de 9,5 cm de alto por 19,7 cm de ancho y fondo, y un peso que ronda los 3 kg —según componentes internos—. El Mac Studio está pensado para ser discreto y funcional al mismo tiempo
En la parte frontal se pueden encontrar dos puertos Thunderbolt 4 / USB-C y una entrada de tarjetas SDXC, una forma de poder conectar y desconectar dispositivos para descargar contenido o complementar nuestro trabajo. Mientras, en la parte trasera, dispone de otros cuatro puertos Thunderbolt 4, una conexión Ethernet de 10 Gb, dos USB-A, HDMI y salida 3,5 mm, en esta ocasión con compatibilidad avanzada con auriculares de alta impedancia. Asimismo, dispone de WiFi 6 y conexión Bluetooh 5.3.
Igualmente, uno de los detalles más interesantes del diseño es lo que no queda a la vista: su arquitectura térmica. El Mac Studio está configurado de tal forma que el flujo de aire circula a través de toda la circunferencia de la base de aluminio perforado. El aire se mueve sobre una fuente de alimentación circular a través de canales colocados con precisión dentro del sistema y es impulsado a través del escape trasero de baja impedancia, todo con un extremo silencio y en la mayoría de cargas de trabajo no notará que está encendido.
¿Me lo compro?
El Mac Studio es una bestia y con el M2 Ultra no se puede comparar con ningún rival en tamaño y desempeño. Es sencillamente una pequeña y silenciosa caja de aluminio robusta donde ocurre la magia. Una potencia descomunal que no está pensada para todos los usuarios y así ajusta su desempeño y precio (desde 4.849 euros con el M2 Ultra y 2.429 euros si el procesador elegido es el M2 Max).
Con él, Apple sigue diferenciando entre aquellos usuarios con exigencias especiales de sus equipos frente a los que hacen un uso más 'normal' de la informática. Un claro "no gastes de más, si no te hace falta". Sucede en los iPhone, en los Apple Watch, también en los iPad, los MacBook y hasta en los AirPods; diferencia claramente con el apellido Pro cuál es el rendimiento, capacidad y precio de sus equipos a los que los profesionales van a sacar todo el partido con una alta exigencia. El Mac Studio tendría que llevarlo, aunque es mucho más que un Mac mini Pro, es una máquina capaz de rendir a un altísimo nivel con herramientas profesionales de vídeo, arquitectura 3D, fotografía, composición musical, código, o desarrollo de videojuegos. Es un portento.
Si usted lo está buscando para sacar provecho a aplicaciones como Octane X, Maya, Final Cut, Photoshop, Xcode, DaVincci Resolve, Topaz, Compressor... incluso trabajando en paralelo, éste es su equipo. Quizá no le haga falta ir hasta el Mac Pro y el pulmón y músculo del Studio será más que suficiente. Sin embargo, si lo que usted está buscando son realizar tareas más mundanas y menos exigentes, yo le recomendaría que revisase el Mac mini, que a calidad y precio es insuperable, y opte por el modelo menor.
En suma, el Mac Studio es una máquina salvaje, con un desempeño brutal que sirve a Apple para seguir marcando el ritmo del mercado en lo que a informática personal y profesional se refiere. Tamaño compacto, rendimiento gigante.