La situación parece ser dramática para Tesla. La empresa de coches de súper lujo de Elon Musk no está en su mejor momento, y así lo demuestra un correo electrónico del magnate a sus empleados. ¿Por qué? Porque en ese correo al que han podido acceder Electrek y Reuters Elon Musk asegura que Tesla se quedará sin dinero en 10 meses, poniendo en serio peligro a la compañía y además llevando a la firma a realizar una serie de cambios drásticos.

Tesla se quedará sin dinero en 10 meses, aunque no se rinde

En el correo electrónico, Elon Musk detalla que si no se realizan “esfuerzos extremos” para reducir costes, la compañía ya no tendrá dinero para dentro de 10 meses. Aunque Tesla recaudó 2.7 mil millones a principios de este mes, Musk insiste en que estas medidas de reducción de costes son necesarias.

Musk y Zach Kirkhorn, director financiero de Tesla, revisarán “todos los gastos de cualquier tipo en cualquier parte de la palabra, incluyendo partes, salarios, gastos de viaje, alquiler, literalmente cada pago que abandone nuestra cuenta bancaria”. Ciñiéndonos a estas palabras, Musk asegura que cualquier cosa que se pueda ver recortada para ahorrar, se recortará.

Musk, con su innato optimismo, dice en la carta lo siguiente: “¡Esto es mucho dinero, pero en realidad solo nos da unos 10 meses para alcanzar el equilibrio en la ‘burn rate’ del primer trimestre!. La burn rate es un término en inglés que expresa la velocidad a la que se queman los fondos de una empresa, en esencia, la forma de medir el gasto mensual. O sea, que lo que dice es que quieren controlar el nivel de gasto antes de que se queden directamente sin fondos.

¿Cómo afecta esto a Tesla?

En los últimos meses hemos visto variaciones en los precios de los Tesla y no es un misterio que las finanzas de la firma han ido cogiendo muchos altibajos, con otras ocasiones en el pasado en el que Musk volvía a pedir reducir gastos al extremo. Un año récord de ingresos y entregas no han sido suficientes, y ya desde hace un tiempo Tesla está sujeta a esta clase de gestión en la que ningún gasto queda injustificado.

No obstante, pongámonos en el peor de los casos; en el que no consiguen equilibrar el burn rate y Tesla se queda sin dinero. Además de peligrar innumerables puestos de trabajo de la compañía, los proyectos de Tesla podrían verse comprometidos. Subidas de precios como la que hubo recientemente este mismo mes, etcétera.

Tesla ha tenido severos problemas de producción, y en el peor de los casos este agotamiento de ingresos podría desembocar en que no haya nuevos modelos. Elon Musk ya obtuvo su tan aclamado ‘S.3.X.Y’, y podría ser que Tesla no pudiera hacer frente al increíble coste que supone diseñar, fabricar, idear y comercializar otro Tesla con una nueva sigla.

La mayor incógnita recae en la fabricación de los modelos actuales. Posiblemente Tesla se vea obligada a reducir la producción de sus coches, o en extremos serios, dejar de fabricar modelos ya existentes dependiendo de la acogida que tengan. Aunque estos son escenarios muy extremos.

Aunque Tesla ha salido del atolladero más de una vez. Estamos poniéndonos en un caso muy catastrofista, pero 10 meses es mucho tiempo para que Tesla recupere los suficientes ingresos como para poder seguir manteniéndose a flote. Todo depende de la gestión de reducción de gastos de Musk y de su director financiero. En 10 meses saldremos de dudas; si vemos Tesla quedarse sin un duro o si vemos a Musk saliendo (otra vez) de la catástrofe.