Disfrutar de kilómetros y kilómetros sin límite, recorrer entornos únicos, descubrir algunas de las localidades más interesantes, integrarnos en su historia… Viajar en coche nos ofrece siempre esa posibilidad única de elaborar un itinerario acorde a nuestros gustos y con total libertad, además de la posibilidad de descubrir interesantes sorpresas por el camino. Precisamente por ello y porque el verano es una de los mejores momentos para disfrutar de esas fascinantes rutas en coche que tenemos en España, esta vez queremos proponerte un itinerario diferente, repleto de castillos perfectamente conservados y pueblos medievales.
Una de esas grandes rutas por España que nos conducirá a atravesar el país de norte a suroeste y desde el País Vasco hasta Extremadura, con un itinerario total de unos 1.500 kilómetros. Una de esas oportunidades perfectas para disfrutar de la diversidad natural y cultural que esconde España, además de su impresionante patrimonio monumental que durante siglos ha seguido conservando esa esencia medieval tan especial.
Una ruta dividida en siete tramos
Esta ruta por las villas medievales de España que podrás hacer en coche, consta de siete tramos que podrás realizar íntegramente o si lo prefieres decantarte sólo por los trayectos que más te atraigan. Un itinerario en el que no faltarán los castillos, los conventos, los palacios, calles empedradas, templos y todo tipo de restos de historia de la Edad Media, que forman parte de ese gran patrimonio monumental con el que contamos en España.
Ruta en coche por las villas medievales de España
La ruta comienza en Hondarribia (Gipuzkoa), una ciudad que podrás encontrar muy cerca de San Sebastián y donde también se sitúa la desembocadura del río Bidasoa. Un lugar en el que será fácil que te enamores de cada rincón, del encanto de sus calles, de las fachadas del casco histórico y también de las bonitas vistas que tendrás desde el paseo marítimo. Pero será precisamente en su casco histórico donde podrás respirar ese aire medieval protagonista en sus calles y en cada detalle de sus balcones de hierro forjado y escudos. Una primera parada obligatoria también por su deliciosa gastronomía, reconocida a nivel internacional. Desde aquí y en la misma región, podrás dirigirte a Laguardia (Álava), donde además de pasear por su casco antiguo, también podrás aprovechar para saborear alguno de sus prestigiosos vinos de la Rioja Alavesa.
A poco menos de 65 km encontrarás la siguiente parada de este itinerario en Estella o Lizarra. Uno de los lugares por los que transcurre el Camino de Santiago, por lo que seguro encontrarás a más de un peregrino. Esta es también una de las ciudades navarras más bellas en la que podrás encontrar interesantes monumentos de la época medieval como el Palacio románico de los Reyes de Navarra. Tampoco dejes de visitar alguno de sus barrios más conocidos como el de San Pedro de la Rúa, el Barrio de San Miguel o la Plaza de los Fueros, tres de los puntos más atractivos de Estella.
Poco a poco el trayecto te irá adentrando en tierras castellanas, primero por el Almazán (Soria). Una pequeña villa de la provincia de Soria repleta de construcciones monumentales del Medievo y que encontrarás situada en lo alto de una atalaya y a orillas del río Duero. En ella destacan su Muralla y la Iglesia de San Miguel, una verdadera joya del románico.
Después nuestra ruta continuará por Sigüenza (Guadalajara), otra de las ciudades en las que aún sigue presente un importante legado del medievo perfectamente conservado y en la que podrás conocer un poco más de cerca cómo era la vida de los caballeros medievales, ya que por este lugar pasó el Cid Campeador. Esta ciudad también destaca por su maravilloso castillo convertido actualmente en Parador Nacional, así como también su casco antiguo, los restos de lienzos de muralla aún presentes, los torreones y sus cinco puertas medievales.
Continuando nuestra ruta y hacia el sur nos encontraremos con la siguiente parada imprescindible: Consuegra (Toledo). Otra de esas villas medievales que merecen una visita y que se sitúa en un valle muy amplio, atravesada por el paso del río Amarguillo. En su casco viejo aún podrás admirar bellas muestras de su glorioso pasado medieval en la Plaza de España (antiguo Foro Romano), el edificio de Los Corredores con una bonita balconada de madera y donde ahora se encuentra el Museo Arqueológico municipal. Pero sin duda, si por algo destaca esta villa es por sus molinos de viento alineados sobre el cerro Calderico, los mismos molinos que inspiraron a Cervantes en el famoso episodio de lucha contra los gigantes de Don Quijote.
Salamanca será la siguiente parada en esta ruta y concretamente la Ciudad Rodrigo, cercana a la frontera portuguesa. Un lugar en el que por su ubicación, en el pasado albergó la construcción de varios edificios defensivos de los que hoy en día aún se puede disfrutar. Uno de los pueblos medievales más bonitos de España y uno de los pueblos medievales más antiguos de Castilla. Un pueblo que encontrarás rodeado por una muralla y asentado en un espacio natural privilegiado, con las mejores vistas, palacios de cuento, puentes romanos y un castillo y una catedral capaces de hacerte viajar al pasado.
La ruta la terminaremos en nuestra siguiente parada: Extremadura y concretamente en la ciudad de Jerez de los Caballeros (Badajoz). Otra de esas localidades repleta de edificios monumentales e historia del Medievo y en la que los Caballeros Templarios también dejaron una gran huella. En su patrimonio histórico también se incluyen algunas de las mejores muestras de arquitectura barroca de Badajoz.