Un gran avión militar ruso de transporte se estrelló esta mañana a las 11.00 horas locales en el poblado rural de Yablonovo, en Bélgorod, una región occidental rusa cercana a la frontera con Ucrania, matando a las 74 personas que iban a bordo, según informaron los medios estatales rusos. Sin embargo, inmediatamente después de que saltara la noticia, hubo versiones contradictorias sobre la naturaleza del accidente de la aeronave Ilyushin Il-76.
El Ministerio de Defensa de Rusia declaró que el avión estaba llevando a 65 prisioneros de guerra ucranianos, quienes estaban siendo trasladados a la región para un intercambio, según ha informado el medio estatal ruso RT. Ukrainska Pravda, un medio de comunicación ucraniano, citando a fuentes anónimas del Estado Mayor, afirmó que el avión transportaba misiles para el sistema de defensa aérea S-300, utilizados para atacar la región de Járkov y otras regiones fronterizas de Ucrania.
En una entrevista con Radio Liberty, Andriy Yusov, portavoz de la agencia de inteligencia militar de Ucrania, expresó que su país estaba llevando a cabo una investigación sobre las declaraciones de Rusia acerca de la presencia de prisioneros de guerra a bordo. Yusov también ratificó la existencia del intercambio previamente programado para el día de hoy y, al mismo tiempo, aclaró que dicho intercambio no se llevaría a cabo en la jornada actual.
[Así es el Ilyushin II-76, el avión ruso accidentado con 65 prisioneros ucranianos a bordo]
Por su parte, Dmytro Lubinets, comisionado de Derechos Humanos del Parlamento ucraniano, recordó en un comunicado en Facebook que “la guerra de información no es menos importante que la lucha en el frente”. Asimismo, instó a los medios de comunicación y a los ciudadanos ucranianos a no sacar conclusiones prematuras y confiar únicamente en las fuentes oficiales.
“El enemigo es insidioso. Y todos sabemos qué terribles métodos puede utilizar la Federación Rusa para desestabilizar a la sociedad ucraniana. No se dejen provocar. Más adelante se ofrecerá información más detalladas”, aseveró Lubinets.
La causa del accidente aún no ha sido esclarecida por el momento. Según indicó el gobernador de la región de Bélgorod, Vyacheslav Gladkov, a través de un comunicado en la red social Telegram, un avión se estrelló esta mañana en el distrito de Korochansky y cayó en un campo próximo a una zona habitada. Gladkov afirma que ya están sobre el terreno los servicios operativos y se ha enviado una comisión para determinar las causas del accidente.
En un video difundido a través de la red social Telegram, se aprecia el momento en que la aeronave se precipita hacia el suelo, provocando una intensa explosión.
Andrei Kartapolov, presidente del Comité de Defensa de la Duma (el parlamento ruso), sostiene que el avión fue derribado por tres misiles. “Los dirigentes ucranianos estaban al corriente del próximo intercambio, fueron informados de la forma en que se entregarían los prisioneros, pero el avión fue derribado por tres misiles del sistema de misiles tierra-aire Patriot o IRIS T fabricados en Alemania. Los expertos lo resolverán”, señaló Kartapolov en una sesión plenaria de la Duma Estatal, según informó el medio ruso Interfax.
Moscú alega que Ucrania derribó la nave con la intención de atribuir a Rusia la responsabilidad de una tragedia que involucra a prisioneros ucranianos. De acuerdo con la narrativa rusa, a bordo del avión se encontraban tres militares rusos y seis miembros de la tripulación, sumados a los 65 prisioneros ucranianos.
"Los indefensos pilotos de nuestro avión de transporte militar que realizaban una misión humanitaria han sido abatidos con misiles estadounidenses y alemanes", declaró el portavoz del parlamento ruso Vyacheslav Volodin durante una sesión parlamentaria esta mañana. “Los legisladores de estos países deben darse cuenta de su responsabilidad, de adónde conduce todo esto”.
Volodin también sostuvo que hubo un segundo avión Il-76, que transportaba a otros 80 prisioneros de guerra, aunque logró ser desviado a tiempo.
La región de Bélgorod, situada a lo largo de una extensa frontera con Ucrania, ha experimentado recurrentes ataques por parte de las fuerzas ucranianas. El 30 de diciembre de 2023, un ataque a la ciudad de Bélgorod provocó la muertes de 22 personas y dejó 110 heridos, constituyendo el ataque más letal contra una urbe rusa desde el inicio de la guerra hace casi dos años.