Ni Vivo per lei ni cualquier hit de Laura Pausini. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y el ministro de Infraestructuras y Transportes, Matteo Salvini, han recibido duras críticas por parte de la oposición y de los medios de comunicación italianos después de haber sido pillados en un karaoke entonando La canción de Marinella. El tema, de Fabrizio de Andre y que interpretaron en la fiesta de 50 cumpleaños del líder de la Lega -el partido de ultraderecha italiano-, está inspirada en la historia de una emigrante de Calabria a la que encuentran ahogada en un río.
Un vídeo de los dos cantando en dicho cumpleaños, al que también acudió el socio gubernamental y líder de Forza Italia, Silvio Berlusconi, fue publicado por subdirector del diario Il Giornale, Nicola Porro, en sus redes sociales.
La prensa local y los políticos progresistas han criticado, no sólo que en una nueva ola migratoria en las costas italianas la primera ministra se encuentre en un karaoke, también la elección de la canción, que resuena demasiado con la reciente tragedia ocurrida en Calabria: la llegada de un barco con 200 migrantes que partieron desde Turquía y que naufragó en la localidad de Cutro. Murieron 79 personas, 33 de ellas menores de edad.
Meloni organizó el pasado jueves un consejo de ministros en Cutro, sin embargo, ninguno de los miembros del Gobierno acudió al palacio de deportes de Crotone donde se colocaron los féretros con las víctimas, mientras que sí acudió el presidente de la República, Sergio Mattarella, y la líder del PD, Elly Shlein.
A ello se suma la llegada de más barcos de las costas norafricanas. En las últimas horas, la Guardia Costera italiana ha rescatado a más de 1.400 migrantes, mientras que el mar sigue devolviendo cuerpos.
[Al menos 58 inmigrantes muertos al naufragar una embarcación en las costas del sur de Italia]
"Ayer fue un día muy doloroso para todos nosotros, enterramos unos ataúdes, entre ellos una niña pequeña. Debo decir que me impresionaron mucho las imágenes que vi tanto de la rueda de prensa del gobierno como del karaoke de Salvini y Meloni, que no quisieron reunirse con las familias de las víctimas o rendir homenaje a los féretros, pero encontraron tiempo para celebrar el 50 cumpleaños del ministro Salvini", dijo Matteo Lepore, alcalde de Bolonia, ciudad donde ayer se celebró el funeral de algunas de las víctimas del naufragio de Cutro.
Mientras que la portavoz del opositor Partido Demócrata (PD), Simona Malpezzi, declaró: "No rindieron homenaje a los muertos de Cutro, montaron una puesta en escena patética, cambiaron los compromisos institucionales para ir a cantar a la fiesta de Salvini. Inhumanidad, cinismo, improvisación y crueldad : este gobierno lo explicó en unos pocos gestos. Qué vergüenza...".
"Los dos cristianos Meloni y Salvini no van a Cutro a rezar frente a los ataúdes, se van de Cutro sin querer verlos y luego por la noche un poco de karaoke por el cumpleaños de Salvini", dijo en Twitter la periodista Selvaggia Lucarelli. "Cantan en el día equivocado. En el lugar equivocado”, escribió en sus redes el director de La Stampa, Massimo Giannini.
Nueva ola migratoria
Estos rescates masivos se producen durante una nueva ola de llegadas a las costas italianas en la que se suman cerca de 4.000 migrantes llegados en los últimos cuatro días.
Particularmente preocupante es la situación en la isla de Lampedusa, a pocas millas de las costas norteafricanas, y donde se hacinan cerca de 2.700 migrantes en el pequeño centro de acogida con una capacidad para unas 300 personas y sólo en los próximos días se podrán trasladar a algunos de ellos.
En Cutro cerca de 5.000 personas, entre ellas muchos representantes de asociaciones humanitarias, se manifestaron bajo el lema "Parad la masacre de inmediato" para protestar por las muertes de migrantes.